La Loba y la Chica Vestida de Verde II (Lapidot)

.Capitulo 9.

Nota Watarichan: quiero informar a las personas a la cuales leen mi historia y quieren Lapidot con beso y todo , que por favor lo esperen .

Algunos(as) que tal vez han visto más de mi trabajo saben perfectamente que me demoró con esto , por el simple hecho de que me gusta el enamoramiento con tiempo y no una calentura al tercer cap, quiero que esta historia sea más que un ship...tendrán su Lapidot , incluso con lemmon, solo sean pacientes.

Disculpen si el aviso fue algo largo.
Watarichan fuera ¡paz!.

*-*-*

El castaño abre la puerta de un ligero portonazo y entra a aquella casa con unas cuantas bolsas , lo deja en la mesa y saca de estas suficiente alimentos para un mes , legumbres , pescados frescos, fruta , queso , leche fresca , verduras y fruta .

¡¿quien esta ahí?!

Decía una viejita mientras agitaba su bastón por todos lados como si fuera un tipo de arma .

Steven: Mansón suelta eso antes que te lastimes* tratando de quitarle el bastón.

Mansón: ah eres tu de nuevo Steven* baja el bastón más calmada y se acerca al joven.

Steven: sabes que siempre llego a tu casa, no veo el motivo de esos gritos * sonríe leve.

Mansón: otra vez traes comida * viendo los alimentos * soy vieja y el hecho de que casi tenga cien años no significa  que no pueda cuidarme sola * toma una manzana.

Steven: sí, pero yo no, es por eso que vengo acá, a que me cuides , sin contar que yo también vivo acá* ríe * además recuerdo muy bien como una pequeña morenita siempre arrasaba con la comida que le llevaba* le da unas palmaditas suaves en el canoso cabello de la mujer.

Mansón: jajaja eso paso hace mucho tiempo , ya ni siquiera tengo dientes para morder * ríe.

Steven:  con diente o no* le quita la manzana y saca un pequeño cuchillo para cortar una parte* yo hice una promesa ¿no es así? * le ofrece el pedazo.

La mujer simplemente suspira y acepta el pedazo de manzana que le había ofrecido el muchacho , se sienta y lo come , por supuesto lo hace a pesar de que ya tiene sus años , aún se acuerda de aquella promesa que le hizo una mañana en la fría estación de invierno, en donde ella era tan sólo una niña...

Mansón: tu si que te tomas las promesas muy en serio ¿no Steven?* se apoya en el sillón * Incluso comenzaste a vivir conmigo..unos años después de que mi esposo George muriera * cabizbaja.