La Loba y la Chica Vestida de Verde II (Lapidot)

.Capitulo 20.

Parte II: "el capullo se rompe"

Van a matar a su hija.

  Dos lobos enormes estaban a unos escasos metros de su "pequeña hija", bastaba ver a ese inofensivo capullo para saber que tenía miedo, temblaba como un pajarito.

    La vampiresa se daba cuenta de lo mal que había hecho con ella, durante muchos años la ha sobreprotegido, la alejó del mundo lo suficiente para ya no saber sola. Ahora se veía en verdad vulnerable.

  Así que por lo tanto.... debería hacerla más fuerte, pero eso era algo para más adelante, hoy no.

Blue: Amari, se lo que piensas, escúchame*dice en susurro* no corras, ¿me has oído? No lo hagas * marca lo último con cierta autoridad.

  La ojos dorados asintió con la cabeza, sin embargo lo hizo de manera involuntaria,casi inconsciente, puesto que en verdad no había entendido ni una sola palabra, tenía un lío en su cabeza.

  Sí no bebía sangre moría, no obstante, si bebía o huía la matarían llegando a la misma conclusión, las opciones eran limitadas, y más bien... los resultados en las que salía con vida eran escasas.

  Sólo veía el caos que se desenvolvía en el ritual y en su existencia misma.

  Al ver que su madre se dirigía hacia el caos ella solo pensó en correr y ocultarse, la presión era mucha, así que no aguantó mucho y huyó. No tardó mucho para que ellos fueran tras ella.

Blue: Celes ve por Amari y cuida que nada le suceda, yo me encargaré de todo aquí* le ordena.

Celes: pero acaba de emocionarse el ritual*se relame sus labios con cierto entretenimiento.

   Aunque esa sonrisa gatuna se detuvo en cosa de segundos, pues Blue vuelca la mirada hacía ella por lo que logra entender que no es momento de "diversiones y juegos"

Celes: sí madre*obedece.

   Al poco de irse su hija mayor aparece una sombra que comienza escabullirse por los árboles de un lado a otro como si tuviera prisa y quisiera correr pero a la vez se está reteniendo.

Blue: Tú también ve, cuida a mis hijas, que nada malo les pase* recalcando lo último.

Sí señora.

    La sombra vuelve a escabullirse y desaparece en un pestañear, mientras eso ocurría el primogénito de la familia Handerzon lo escuchó todo y no pudo evitar demostrar su "sorpresa" con una sonrisa ladina dedicada únicamente a Diamante Azul.

Pitter: vaya Madame usted sí que tiene secretos ¿no hay nada para mí?* pregunta.

  Rápidamente los ojos azules de la vampiresa posaron sobre los de él de una manera fría.

Blue: has lo que quieras, solo trata de no morir, sería malo y bastante vergonzoso para mí y mi familia que muera el futuro marido de mi hija* se cruza de brazos* ya sabes, etiqueta* sonríe.

   Pero él no se inmutó y le respondió con otra sonrisa.

Pitter: Claro* ríe y hace una leve pausa* vuelvo luego * le da la espalda.

  Sin embargo, la vampiresa no escuchó o más bien hizo "oído sordo" al prometido de su hija y dejó que éste se marchará lo más antes posible.

Blue: bueno, veamos que pasará *dice para sí misma sentándose en una roca cercana a ella*a ver, dos lobos, esas de ahí son humanan, uhm, una casi de ellas podría ser hábil, se seguro es una cazadora, la otra...*algo pasmada* no me lo esperaba, será interesante *con un gesto que le hacía desternillarse en su interior.