Tenia que enamorarte... Y el enamorado fui Yo. [ Victuri ]

Capitulo II

[Un motivo para vivir?
No morir...]

Viktor:

—Así que has tenido momentos de diversión— le divertía leer esos hechos de la vida de aquel muchacho de solo 20 años —has tenido tantas aventuras— con cinismo,  mostraba una sonrisa reflejando su desprecio por aquel chico de ojos cafés.

—vaya, vaya— se notaba el sarcasmo en dicha frase, una sonrisa de sorpresa y desprecio combinadas por el simple hecho de elaborar este trabajo —Otabek Altín el único novio tuyo que duró 2 años— el simplemente se enfocaba en la ridícula idea que sería besar a un hombre, el simple hecho de imaginarlo le provocaba asco, nunca pensó en tener que "enamorar" a un hombre —por Dios! Debo estar realmente loco para hacer esto, pero trabajo es trabajo— se repetía esto como la única excusa para hacer este trabajo, realmente le desagradaba la idea de convivir con un hombre como su "amante" aún a sabiendas que el único enamorado sería el chico puro que se mostraba en aquella foto.

*Ya pasando las 6:00 de la de tarde, por lo que había perdido suficiente tiempo hablando con su jefe, este se recuesta en su cama colocando su cabeza en una almohada, blanca y blanda, recostando su cuerpo en esa cama que bien podían dormir tres personas en ella, pero solo un hombre está ahí, en una habitación teñida con un color crema, a su costado un pequeño mueble de color café con todo lo que el podría necesitar acostado antes de dormir o al levantarse, cerró sus ojos por la comunidad que sentía ahí recostado es aquella vacía cama...*

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Viktor!! Porqué!!?
No, no quiero esto!!

|Te amo|
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Viktor:

Se levanta de un susto respirando fuertemente —que diablos fue eso y porqué estoy llorando?— sin darse cuenta e involuntariamente se corrían lágrimas de sus ojos, al despertar de ese fatídico sueño, sin embargo él lo sabía, sabía que se sintió tan real, que es difícil creer que solo fue un producto de su imaginación.

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— Mamá!!, voy a salir con Pichit!! Así que tal vez llegue un poco tarde— le decía o más bien le gritaba (desde cierta distancia) a su madre ya que su amigo había llegado a recogerlo.

—Yuuri!!— decía un chico con extranjero, con una tonalidad de piel mas morena que la de el pelinegro, aunque este de igual manera con una cabellera negra, vestía unos pantalones ajustados, mostrando las cualidades del cuerpo del chico, donde la tela alcanzaba a cubrir, una playera blanca ni muy holgada ni muy ajustada, unos zapatos negros que hacían juego con el pantalón y una chaqueta negra.

— Pichit! Me alegro de verte— sonreía despreocupadamente al ver a su amigo.

— Yuuri apresurate Yakov nos espera!

— Pichit no grites!! — le respondía en un tono frustrado.

— si, si como digas — dándole por su lado para poder calmarlo.
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Toc! Toc! (Tocando la puerta)

— Adelante — respondió al toque de puerta que se oía. Levanta la mirada. — Yuuri! — dice asombrado por (aunque ya esperada) visita. — Porqué te asombras de que esté aquí? No tú fuiste quien me llamó? —
Respondía, pero su voz era fría, se notaba el desinterés de querer estar en tal lugar, además de un desagrado que se podía ver por el simple gesto que se reflejaba, solo lo vio a los ojos cuando respondió fuera de ellos desvío la mirada, para poder ver su entorno — veo que este lugar no cambia aún con el paso del tiempo eh? — mostrando un gesto de arrogancia en su mirar, dando un horrible escalofrío con solo ver sus ojos, eran los mismos? No. Ya no brillaban como antes.

— porqué cambiaste? — preguntó el mayor

— aún te lo preguntas ?— era obvia la respuesta, pero se negaba a decirla

— no piensas volver?

— a este lugar? Ja! — se mostraba seguro, definitivamente no volvería, pero, no podía huir más. — bien, pero no quiero a Otabek como compañero —

— Entonces será el chico que se encuentra afuera esperandote, tu primer trabajo sera sencillo solo acaba con un bicho que está molestándome — colocando una carpeta color paja en su escritorio, de un color café, con libros, una computadora y mas carpetas y papeles en ella, aunque todo correctamente ordenado para no confundirse.

— como diga jefe— decia timando en sus manos aquella caroeta oara abrirla y leer la informacion de desafortubano del cual el tendria que encargarse. —Y una pregunta... Yurio Plisetsky sigue buscándome?—

— No tengo información con respecto al tema— bajo la mirada sabía la verdad, pero no podía revelarla, después todo Yuuri Katsuki ya no le importaba nada, ni siquiera vivir. — solo has tu trabajo, no le des atención a cosas tan ordinarias como esas— comentó, mordiendose la legua al decir tal mentira, esperaba que él le hubiese creído, ya que Yuuri Katsuki es un hombre de temer.

*Estos hombres eran contratados para hacer cualquier tipo de trabajo, desde ayudar a alguien a cruzar la calle hasta asesinar a un hombre, en sus trabajos arriesgaban su vida, porque a ala persona que ayudaban a cruzar la calle era una a quien muchos quisieran eliminar, sus identidades por lógica eran ocultadas, este trabajo podía brindarles muchas comodidades económicas a cambio de sus simples y miserables vidas, ya los que trabajan ahí es porque no sabían que hacer con sus monótonas vidas o ahí esperaban descubrir que hacer con ellas.
al encontrarse al borde de muerte, desearían vivir y rogarían por ella? O aceptarían su muerte cerrando los ojos?

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Los vídeos que ponga, la mayoría serán canciones de anime, algunas tal vez solo en japones o inglés

Arigato!!