Mi vida era absolutamente normal y ordinaria. Todos los días sin falta, la misma rutina, con sus mismos problemas y momentos agradables. Las mismas personas sin importancia, los mismos amigos y enemigos.
Nada fuera de lo común, y todo se mantuvo de...
—Rosita me aviso que hoy teníamos dos nuevas alumnas, acérquense chicas, al medio.
Aún estaba confusa por la situación y pude volver a la realidad luego de que la chica a mi izquierda me dio un pequeño empujón hacia el frente de la clase, a centímetros del profesor. A mi lado se encontraba la chica con la vestimenta provocativa.
—Bueno. Mi nombre es Suga y espero que puedan aprender rápido conmigo. Cualquier problema o duda que tengan me preguntan. Antes de comenzar la clase, debo aclarar algo.
¿No se acuerda de mí? encontré su documento y se lo devolví. Aparte ¿Su nombre no era Min Yoongi? Estaba confundida así que me posicione atrás de todo, mientras que la otra chica nueva, se situó adelante luego de decirle al profesor que le encantaba su cabello. Cosa que mucho no le importo porque la ignoro completamente.
—Deben saber que no falta mucho para el festival de fin de año por lo que intentaremos adelantar todo lo más que podamos las siguientes clases. Las alumnas nuevas pueden practicar también, pero la capacidad que tengan para aprender los pasos definirá, que puedan ser parte o no. Si no lo logran habrá un nuevo festival el próximo año. Genial, eso me sonó a un reto.
La música comenzó a sonar, el profesor se quitó su campera y se colocó una gorra. Él llevaba puesta una sudadera blanca, bastante holgada y un short deportivo negro con unas medias que decían “swag” en grande. Comenzó a explicar cómo teníamos que movernos. Bailaba muy bien, pero yo estaba perdida totalmente y aun que intentaba seguirlo. Todo me salía mal. La chica rubia de ropa provocativa en cambio, no tuvo problema en seguirlo, aún que exageraba bastante sus movimientos.
De un instante a otro, el profesor detuvo la música.
—¡Tu! Chica, la de atrás de todo. Tienes que prestar más atención... —quería que la tierra me trague— Ven acércate aquí.
—¿Me dice a mí? —Estaba en shock.
—Sí, deja de mirarme y acércate. Y tú, ve a atrás —le exclamo a la rubia.
—Muy bien hare los pasos lentos y tu mmm... ¿Cómo es que te llamas?
— Haydee
—Ok Haydee, me seguirás. Presta atención a mis pies.
Intente hacerlo, me costaba. Pero con el transcurso de la clase comencé a poder seguirlo. No era por nada pero él tenía mucho ritmo y era increíblemente sexy al moverse.
Al finalizar la clase salió corriendo del salón despidiéndose con un “nos vemos el lunes” y yo la verdad no sabía si iba a volver. Me había costado mucho concentrarme, aparte me senti humillada totalmente.
A llegar a casa me tuve que comer una serie de quejas de mis padres por volver tarde y no avisar donde me encontraba. Las ignore lo más que pude y me fui a mi cuarto enojada.
Estaba agotada, realmente el día no había sido muy bueno. Puse una base de rap con mi computador y comencé a practicar algunas rimas con la oscuridad como espectador. El sonido del celular me interrumpió, era Natasha.
—¡¿Qué estás haciendo?!
—Nada, practicaba un poco de rap —La fuerte música se escuchaba del otro lado y el ruido de mucha gente junto a ella— ¿por?
—Un viernes a la noche ¿y vos estás en tu casa? Voy a hacer una juntada, viene mucha gente y va a ver alcohol... ¿Porque no venís?
—Realmente me gustaría, pero discutí con mis padres y no creo que me dejen salir.
—¡Escápate! Ya lo has hecho una vez y no te atraparon.
— No se Nati, esta vez sí se enteran voy acabar muerta.
—¡Vamos! yo pasare por ti, nada más tienes que recordar dejar la música encendida y almohadas debajo de la cama, para que nadie sospeche.
—Como se nota que te has escapado varias veces —susurre.
—¡Pude escucharte! De todas formas es verdad, no es algo que tenga que negar. Me voy ¡prepárate que en media hora estoy ahí!
—okey...
Natasha a veces no me dejaba opción y antes que escucharla quejarse prefería aceptar. Por suerte mi cuarto se encontraba del lado que daba a la calle y tenía una ventana enorme.
Respire nerviosa y comencé a cambiarme. Me calce un pantalón de cuero, que acentuaba mis caderas. Una blusa blanca, con la que se veía parte de mi hombro y mi ombligo, dejando ver mi aro. Combine el conjunto con unos borcegos marrones, maquille un poco mis ojos color miel con delineador y bastante rímel. Por último, me coloque un labial violeta pastel, tome mi chaqueta de jean, mi celular y después de aplicarme perfume observe por la ventana si mi amiga se encontraba cerca. Al no verla me dirigí a colocar música y acomodar las almohadas de forma que pareciera que estaba durmiendo.
A los segundos mi telefono comenzó a sonar, Natasha había llegado.
Haydee se esta portando mal😏😏
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Por cierto voy a publicar bastante seguido así que no los voy hacer esperar mucho.
