No me quiero enamorar (Legolas y tú) Segunda Temporada

Problemas

Nacil (o como chingaos se llame el wey) dio una risita, para luego tomar en brazos a Aranel.

-Ya se recuperará- comentó el pelinegro-Le afectó la noticia, supongo.
-Cuanto tardará en dejar de hacer la idiota - pregunté.
-Unos minutos quizá.

Seguimos caminando, pero yo no dejaba de pensar en que yo era Istari.

Me emocionaba la idea, ya podría se útil para proteger a mis amigos, pero a la vez me aterraba

- No la recordaba tan gorda- dijo Nacil, que ya no podía.
-
Solo mira algo que te guste de ella- habló Legolas- ¿Cómo crees que le hago yo cuando cargo a TN?
- ¡¿Indirecta para decirme gorda?!- exclamé ruborizada, no estoy gorda...
-No fue Indirecta, te dije gorda- rió el elfo.
-Estas tan delgado seguramente...-me defendió Anien.
-obvio- sonrió Legolas.

Vimos que Aranel se movió un poco, mientras abría sus ojos con pesadez. Pero al darse cuenta de que el chico la traía cargada, sus ojos se abrieron de inmediato, mostrando asombro.
Sus mejillas tomaron un fuerte color rosa, pero luego captó y empujó la cara de Nacil.

- ¡Estúpido! ¡Bajame! - ordenó muy sonrojada.
- De nada, te cargue por mucho tiempo, nena - la bajó con fastidio.
- ¡¿Nena?! - exclamó aún más roja.
- Oye, me gustas, ¿Si? ¿Cómo más te digo? - de inmediato, el humano se tapó la boca mientras que un tono rojizo le adornaba las mejillas.

La chica se asombró, pero no dijo nada, solamente apartó la vista con incomodidad.
Dio media vuelta, lo que sorprendió a Nacil .

- Vamos. Queda mucho por recorrer - habló Aranel en tono baja pero audible.

Nacil no tuvo más remedio que hacer caso, por lo que bajó la cabeza, mostrando decepción y un poco de tristeza.
Lo miré preocupada, para luego acercarme a el elfo.

- ¿Por qué Aranel reaccionó así? - pregunté en un susurro.
- Lo mismo me pregunto...que raro - dijo también en voz baja - ¿Crees que se arreglen la cosas?
- No lo sé...ojalá si, ellos son como tú y yo...- me di cuenta de lo que dije hasta que Legolas mostró sorpresa - Pero no me refiero a que seamos como pareja.

Reí nerviosa, mientras que el rubio solamente mostraba una sonrisa tímida con un sonrojo en su cara.

- Te refieres a que son muy Unidos, ¿Cierto?
- Si, eso más que nada - contesté con nervios.
- Pero no todos tenemos la suerte de encontrar a alguien como tú. Tan amable, linda, hermosa...pero no estoy diciendo que me gustes, ni nada de eso.
- N-No pensé eso - ambos nos sonrojamos y sonreimos tímidamente.

Miramos a Arancel que iba callada y sin expresión. Luego miramos a Nacil, que iba siendo apoyado por Anien, quien le daba consejos para animarlo.

- Esto es malo, Legolas - comenté preocupada.
- Lo sé, pero tranquila. Tal vez es un mal entendido - rodeó mis hombros con su brazo, abrazandome.
- Si, quizá si...
- Todo se solucionará pronto. No te preocupes, ¿Va?
- Vale - sonreí ampliamente.

A pesar de eso, no podía dejar de pensar en que pasaría con Nacil y Aranel... algunas veces, los finales felices no son para todos...

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Perdón si es corto, y si ya o estoy tan apegada a los otros capítulos, pero ya casi no recuerdo de que se trataba :'v