Otra de las veces en las que Aomine mostró sus habilidades como padre fue cuando le estaban enseñando a Ryo a andar en bicicleta. Taiga iba detrás de Ryo sosteniéndolo por la espalda para evitar que este se cayera o pasara algún otro accidente. Después de unos 20 minutos a Kagami le dio sed, por lo que le dijo a Aomine que vigilara a Ryo mientras él iba a comprar una botella de agua. El moreno asintió y vio como el chico pelirrojo se alejaba hacia un pequeño puesto en donde vendían varios alimentos y bebidas.
Después de unos minutos, Kagami había regresado al lugar donde había dejado a su esposo e hijo, pero cuando llego le sorprendió la escena que se encontraba frente a sus ojos. Con el dorso de su mano se tallo los ojos, pensando que lo que veía no era más que una ilusión, pero después de tallarse los ojos varias veces supo que todo era real.
El pequeño Ryo se encontraba riendo y gritando el nombre de su moreno padre, mientras este se encontraba montado sobre la pequeña bicicleta, pedaleando como si su vida dependiera de eso, mostrando su muy infantil personalidad.
Kagami sin perder el tiempo, saco su teléfono y empezó a grabar las acciones del moreno, pensando en que así podría chantajearlo cuando el de pelo azul decidiera dejarlo sin sexo.
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Dos padres y un bebé
FanfictionTodos sabían que el moreno no era especialmente bueno cuando se trataba de cuidar a alguien, pero Kagami quería pensar que cambiaría cuando tuvieran un hijo. Claramente estaba muy equivocado.
