Sombras

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La ventana estaba abierta, la pared azul reflejó una sombra macabra. Un niño dormía alegre en la casa que se encontraba en medio del bosque. El gritó desgarrador de su padre, no pudo ser escuchado por su único familiar, su pequeño hijo. La sombra se acercaba más al chiquitín que dormía como ángel. Del espejo, aquella criatura diabólica que había matado a el padre, se desprendió de allí. Transformándose en la víctima que había asesinado segundos atrás.

El niño sintió una presencia cerca, su padre o lo que se hacía llamar su padre ahora estaba recostado al lado de su cama.

—Duérmete hijo, te estaré cuidando siempre. Todo lo que hago es por tu bien— el niño cerró sus ojos. Y otra sombra pequeña se adentraba por la ventana.

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