Capítulo 3. Mejoramos.

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Oía al profesor, pero no lo escuchaba. Tenía mi atención puesta en la conversación que llevaban a cabo entre susurros Ben y Jack. Había oído ya un par de veces mi nombre en esa conversación, y eso no me gustaba nada.

-Alice. -Me llamó el profesor sobresaltándome. -¿Por qué miras a Ben y a Jack? ¿A caso dan ellos la lección?

Los chicos se giraron para mirarme y estallaron a risas muy bien disimuladas. Gruñí levemente y me disculpé de mala gana. Cuando acabó la clase, me encontré en el recreo con mis amigas y con Adeline.

-No entiendo como soportas a Ben y  a Jack en tu clase. -Dijo Jessy poniendo los ojos en blanco.

-Los aguanto igual que tú y Maggie aguantáis a Sean. -Dije. -Aunque a veces me cogen instintos asesinos.

-¡No te me acerques! -Exclamó Maggie entre risas. Jessy se rió suavemente y Laura me dio un codazo en el brazo para alertarme.

-Viene. -Dijo solamente.

Me giré y vi a Connor acercarse a nosotras. Se paró ante mí y me arrastró a otra parte del patio. Lo miré inquisitivamente y él se cruzó de brazos.

-Cuando una chica te dice: "¿Quieres salir conmigo?"...-Me reí ante su pésima imitación de la voz de una chica. -¿Qué significa exactamente? ¿Quiere que salga a dar un paseo con ella o quiere escaparse del colegio?

Me reí de nuevo y sacudí la cabeza. Le expliqué lo que significaba y él puso una mueca de asco. Cuando se fue, me percaté de que Connor había cambiado su manera de ser en este último mes en el colegio. Ahora mostraba más sus emociones y hablaba más a menudo. Volvimos a clase de nuevo y Adeline casi no se despegaba de mí, desconocía totalmente el laboratorio. En este último mes no habíamos ido en ningún momento y no había podido enseñárselo. 

-Aquí se hacen experimentos. -Le expliqué con una sonrisa.

-¿Experimentos? 

-Exacto. 

-Experimentos... -Repitió ella con la mirada perdida. Había algo que le preocupaba, pero no me dio tiempo a pensármelo, porque entró el profesor a la clase y empezó la explicación. 

Adeline estaba a mi lado e iba mirando lo que hacía con las diferentes substancias que nos daban para el experimento de Química. Vi que Adeline encendía el fuego con sumo cuidado y ponía encima, sosteniéndolo con unas pinzas, un trazo de cera. Según el guión, el primer paso era deshacer un trozo de cera y ponerlo en un vaso de precipitados. Si no fuera porque le aparté de un tirón la mano, seguramente se hubiera hecho una buena quemadura. 

-Gracias. -Me agradeció con un suspiro. 

-No se dan. -Respondí volviendo la mirada a mi trabajo. 

Después de esa clase, tocaba la de literatura. Suspiré con resignación y me encaminé a la clase. Por el camino me encontré con Ben, quién se rió (como siempre) de mí y de Adeline. Ella casi lo estranguló cuando Ben le dijo que parecía una escombra con la trenza que llevaba. Jack, por otro lado, se nos quedó mirando fijamente a la una y a la otra como si no estuviera seguro de si defendernos o atacarnos. 

Después de todo el día, volvimos a casa y, como que Adeline estaba aburrida, decidimos ir a dar una vuelta. Por el camino nos encontramos con Gabriel, o Gabe como le llamo yo. 

-¡Gabe! -Lo llamé.  Se dio la vuelta y, cuando me vio, corrió hacia nosotras.

-¡Ali! -Exclamó abrazándome. Luego se giró hacia Adeline y le tendió una mano. -Me llamo Gabriel.

-Elizabeth. -Dijo ella. Le estrechó la mano y ambos sonrieron. 

-¿Dónde ibas? -Le pregunté.

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