Hoy estábamos en la cafetería y tus ex-amigos no paraban de burlarse y reírse de ti. Hablaban bastante alto y todos escuchábamos las idioteces que decían.
Cuando decidí ponerme de pie para defenderte, tú tomaste mi mano y me dijiste
"No, Josh, por favor. No quiero que vuelvan a lastimarte"
Mi corazón parecía querer salir corriendo de mi pecho.
Oh, Tyler. Si supieras el dolor que estaría dispuesto a sentir sólo por volver a verte feliz.
Al final, no fui capaz de enfrentarme a tus antiguos amigos, sólo porque tus ojos me suplicaban que no lo hiciera.
Me senté de nuevo pero primero saqué mi dedo medio a tus amigos. Algo tenía que hacer.
Tú soltaste una pequeña risa en un volumen muy bajo.
Yo te miré y sonreí.
Esa pequeña risa me daba esperanzas de todo mejoraría para ti.