Hundí los dedos en la arena, disfrutándola lo máximo posible, ya que pronto acabaría el verano y tendría que volver a Madrid. Me levanté de la hamaca y me quité las gafas de sol dispuesta a darme un baño. Caminé hasta la orilla, donde los niños pequeños se divertían haciendo castillos de arena y los ancianos observaban el vaivén de las olas. El agua estaba llena de gente, estaba claro que no era la única que quería aprovechar lo que quedaba de vacaciones. Andaba tan distraída que no vi una enorme roca y acabé en el suelo segundos después. Alcé la vista y vi que alguien me estaba tendiendo la mano. -Estás bien?? -oí por encima mío. La voz venía de un chico que tendría mi edad. Era moreno con los ojos claros. -Si, o eso creo -mascullé enfadada por haber hecho el ridículo delante de aquel chico. Me intenté levantar pero no tuve mucho éxito ya que me resbalé y me volví a caer. El chico (que por cierto no tenía ni la menor idea de quién era, y menos, como se llamaba) me tendió su mano y con su ayuda por fin me pude volver a levantar. -Intenta no volver a caerte -me dijo con una sonrisa ladeada. Le sonreí yo también y le di las gracias. Se despidió de mí con un 'hasta pronto, espero verte mañana por aquí ' y nos separamos. Bueno, más bien él se separó y prosiguió con su paseo mientas yo me quedé como un pasmarote observando cómo se alejaba. Mientras andaba, se giró y me hizo el gesto de 'adiós' con la mano y yo se lo devolví, volviendo al lugar de donde había venido. Más tarde, recordé que lo que iba a hacer antes de mi encontronazo con aquel chico era ir a bañarme, así que sin pensarlo dos veces, corrí a zambullirme en el agua intentado poner mis pensamientos en orden.
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«Tengo Un Secreto »
Romance~ Lucía es una chica de 17 años que vive en Madrid y suele veranear por Cádiz. A finales de verano, conoce al chico que le pondrá patas arriba lo que le queda de verano : Álvaro. Enseguida se hacen amigos y empezarán a saltar chispas entre los dos...