—Vayan entregando, alumnos— la voz del queridísimo profesor de Quimica sonaba por todo el salón.
Resulta que el muy amado se levantó de mal humor y con ganas de cagar a alguien, por lo que decidió tomarnos un exámen sorpresa. ¡Qué maravilla!
Me levanté de mi mesa y le entregué el incompleto exámen, no muy segura de mis respuestas. Luego salí del salón y me dirigí a paso ligero al baño, ya que me habían entrado unas enormes náuseas debido a ese estúpido exámen.
De repente, siento que me toman bruscamente de la muñeca, y no me llevan exactamente al baño, sino, todo lo contrario.
—Emily, necesito hablar conmigo— me dijo un Louis algo ¿arrepentido? Bien, lo que me faltaba para completar esta perfecta mañana.
—Louis, por favor, no he tenido un buen día. Me han tomado un exámen sorpresa y creo que no me ha ido muy bien. Y además tengo unos mareos terribles. Necesito ir al baño.
— Por favor, será rápido— suplicó.
Bufé.
—Está bien. Que sea rápido— dije de mala gana.
—Lo lamento— dijo mirando al suelo. Ah, genial. Estaba loco si pensaba que lo iba a perdonar con solamente pronunciarme esas simples palabras.
—¿Por qué? ¿Por lo de ayer? ¿O por tomarme como tu objeto de burlas desde que llegué a este maldito colegio?—Deje de hablar por unos segundos, mientras él miraba al suelo avergonzado.— O no, tengo una idea mejor. ¿Te disculpas por hacer que todo el mundo en este instituto se ría de mí? Habla más claro, Tomlinson, porque realmente no te entiendo—Dije muy fastidiada, mientras me cruzaba de brazos y lo miraba esperando su repuesta.
Me miro suplicante.
—No me lo hagas más difícil, por favor.
No pudo haber dicho eso en serio. Este chico debe estar jugándome una mala broma.
— ¡¿Que yo no te la haga más díficil?! ¡¿Es en serio, Tomlinson?!— Comencé a levantar la voz muy enojada.
—No me digas Tomlinson...— susurró muy bajo, pero de igual manera yo lo pude oír.
— ¡Calla y escúchame de una maldita vez, mierda! ¿Sabes la cantidad de lágrimas que derramé por tí? ¿Sabes la cantidad de veces que pensé en dejar el instituto, solo porque tú y tus malditos amigos me avergonzaban cada día con sus estúpidas burlas?—Decía apuntándolo con mi dedo amenazadoramente, mientras que él... Él solo miraba al suelo, sin tener el coraje de mirarme a los ojos. Maldito cobarde...— ¿Sabes cuántas veces pensé en lastimarme, solo para olvidar tus malditos insultos? ¿Sabes la cantidad de noches que no dormí, porque estaba ocupada llorando por un estúpido animal que no mide sus actos? ¿Que acaso no sabías todo esto? ¿No pensaste, aunque sea una maldita vez, que me hacías daño? ¡Responde, mierda!—Louis levantó la cabeza y me miraba asombrado, pero no decía nada. Lágrimas comenzaban a caer de mis ojos, continuando su recorrido por mis mejillas. Eran lágrimas de tristeza, coraje... Pero sobre todo, eran lágrimas de rencor y odio que había guardado todo este tiempo hacia él— ¿Sabes que soy una persona, no?—Hablé un poco más calmada— ¿Sabes que tengo muchos problemas, además de los tuyos? La vida no me ha tratado muy bien, y tu tienes en parte la culpa. ¿Qué acaso disfrutabas de hacerme sufrir? ¿En serio te resultaba gracioso?—No aguanté más y caí en llanto. Me derrumbé. Louis reaccionó y me abrazó fuertemente para que no cayera, mientras daba suaves caricias en mi cabello.
—Shhh, tranquila, ya pasó— dejó de hablar por uno segundos, y luego suspiró— Perdóname, en serio. Y-yo nunca pensé que tu sufrías tanto por mi culpa— tartamudeaba nervioso. Podía responderle, diciéndole que cómo no iba a sufrir y todo eso. Pero en estos momentos no tenía ganas de hablar. Ya me habia desahogado lo suficiente.— En serio, yo... Nunca fue mi intención eso, y me odio por haberte hecho sufrir tanto, pero es que... No lo sé. No tengo justificante para lo que hice, y en serio te pido perdón. En serio lo lamento.—Me separé de él y lo miré a los ojos. Estaba arrepentido. No hacía falta que me lo jurase, tenía suficiente con la sinceridad que expresaba el azul claro de sus hermosos ojos. Pero de igual forma, no podía hacer como si nada hubiese pasado. Tenía que defender un poco mi orgullo y hacerme respetar. Y eso es lo que justamente haría.
ESTÁS LEYENDO
Broken Lifes (Louis Tomlinson)
FanficAlgunos dicen que las personas que molestan a los demás lo hacen para llamar su atención o pedir ayuda. Otros, que lo hacen porque son tan similares, que encuentran sus propios errores en el otro, pero se niegan rotundamente a asumirlo. Y hay alguno...