05.Johnny

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-¡Ey Johnny!, despierta

(Johnny)- ¿Qué sucedió Jonathan?

(Jonathan) – ¡Ya es navidad!

(Johnny) - ¡Navidad!

Eran las 6 de la mañana, Johnny y Jonathan de 9 años de edad bajaron de sus dormitorios y empezaron a correr, llegaron hacia el árbol de navidad, encontraron varios regalos bajo de ello, los dos felices se arrodillaron y empezaron a sujetarlos, Johnny agarró el regalo donde decía, "ábreme hijo Johnny" y Jonathan abrió donde decía "ábreme", Johnny al abrirlo se encontró con un peluche de oso, este sonrió y lo abrazó, su hermano Jonathan vio la etiqueta de Johnny en su regalo, donde decía... "para mi hijo amado, Johnny... que este peluche te acompañe en todos tus momentos", este vio su propio regalo y era un abrigo muy bonito, pero que no era de su tamaño, parecía más grande, como para un adulto, en la etiqueta decía... "ponme cuando tengas frío, te abrigaré", Jonathan agachó la mirada y desanimado se retiró a su habitación, Johnny se acerca y le pregunta.

(Johnny) - ¿Sucede algo hermano?

(Jonathan) – No sucede nada hermano, feliz navidad – sonríe – tengo un poco de sueño, me iré a dormir

(Johnny) – Hermano...

Johnny observó que el dejó su regalo tirado en el suelo, vio el abrigo y se sintió un poco mal, este suspiró y le miró a los ojos.

(Johnny) – Ten...

Johnny estiró sus manos, entregando su peluche a Jonathan, este lo miró y se fue corriendo hacia su habitación, la madre empezó a salir de su habitación y le miró a Jonathan correr, esta corrió detrás de Jonathan pero antes le miró a Johnny y le dijo, "¿ya estás contento? Para presumir tu regalo con el de Jonathan"

(Johnny) – Pero madre... yo.

(Rochelle) – Silencio... estás castigado, esta noche no cenarás

Rochelle corrió y entró en la habitación de Jonathan, Johnny se quedó un poco asustado, y bajó las manos, este sujetó el abrigo de Jonathan y lo dejó en el colgador, suspiró.

Este caminó hasta la biblioteca de su casa y miró a su padre leyendo un libro, este al mirarlo cerró el libro y sonrió diciendo, "feliz navidad".

(Johnny) – Papá... ¿Por qué le regalaron a Jonathan un abrigo y a mí un peluche?

(George)- ¿Sucedió algo?

(Johnny)- Si... mi hermano se fue triste a su cuarto... ¿no le quieres?

(George) – Yo lo amo, igual que a ti, simplemente no sé cómo decirlo... hijo mío, yo amo a todos, a tu madre, a tu hermano, a ti... los amo, pero no sé cómo expresarlo.

George saca de su bolsillo una carta, este la mira y se le entrega a Johnny, le acaricia la cabeza y sonríe.

(Johnny) - ¿Qué es esto papá?

(George) – Es una pequeña carta... dale a Jonathan cuando este pierda el conocimiento, cuando este esté cegado, cuando este piense que se quedó solo, dale esto, cuando el mismo piense que nadie lo ama, dale esto cuando es necesario hijo mío... por ahora solo guárdalo, y mantenlo contigo en todo momento, no lo olvides... hazlo por mí y por tu hermano.

Johnny sonríe y le abraza a su padre, este le acaricia la cabeza y le manda a retirarse, Johnny desde ese día quiso ayudar a su hermano, hasta que un día que Johnny caminó por la ciudad, en un lugar cerca del bosque, este paseaba pensando en cómo ayudar a su hermano. Johnny caminaba hasta encontrarse con una niña que estaba llorando, el preocupado se acercaba y al acercarse pudo ver en el lado derecho de la calle a varios adolescentes riéndose y sujetando una cartera.

-Vaya, vaya... miren quien anda por aquí... ¿es Johnny o es Jonathan? No tengo ni p*** mierda de quien es

-Yo tampoco...

Johnny se inclina para mirar a la niña y esta tenía una marca en su mejilla, como si le hubieran abofeteado, este la empieza a calmar y le pregunta.

(Johnny) - ¿Qué te hicieron?

-Me quitaron mi cartera...

(Johnny)- ¿Qué había en la cartera?

-¡Estaba el dinero que iba a comprar la medicina para mi mamá!

Ella gritó y llorando se inclinó hasta el suelo, Johnny sentía furia en si mismo, el no tenía miedo, y se levantó y mirando fijamente a los adolescentes el empezó hablar.

(Johnny) – ¡Son unos cobardes! – gritó

-¿Qué? ¿Y tú quién mierda eres niñato?

(Johnny) – Soy Johnny... dejen esa cartera ahora mismo

-¿Y si no queremos? ¿Nos golpearas?

(Johnny) – Cállense

Uno de ellos se acerca muy rápidamente y le golpea, Johnny cae al suelo y ya en el suelo otro de ellos le patea el rostro, Johnny no podía defenderse, este sentía un dolor inmenso en su rostro, el líder de los matones le patea entre su vientre, Johnny coloca su mano en ello y otro le patea en el rostro directamente, este sangrando en el rostro, entonces Johnny sentía miedo desde ese entonces... su cuerpo adolorido y temblando pensó en una ayuda.

-Ahora dime... ¿te meterás con nosotros?

(Johnny) –No... porque ustedes están haciendo mal... muy mal- llorando

-Miren... este niñato piensa que lo que estamos haciendo está mal

(Johnny) – Está mal, robar no lleva a nada bueno

-Cállate idiota

Uno lo golpea tirándole al suelo otra vez, todos fueron directamente a golpearles, pero este no tenía fuerzas para levantarse otra vez, en su mente solo venía su madre, su padre y Jonathan, caía nieve en mes de Diciembre, y algunas de esas nieves se manchaba de rojo, este pidió ayuda y de repente se escuchó como alguien golpea a otro, cuando el abrió los ojos, observó a Jonathan golpeando a uno de ellos, detrás de Jonathan estaban algunos vecinos, los adolescentes corrieron y se llevaron la cartera de la niña, la niña gritó "¡mi cartera!" mientras que algunos de ellos reían y corrían.

(Johnny) – Jonathan...

(Jonathan) – ¡No te metas en donde no te importa!

(Johnny) – Pero...

(Jonathan) -Pero nada, deja de joderme, deja de meter tu mierda en mi vida

(Johnny) – Entonces... -se levanta – no me defiendas, aléjate de mí, jamás me ayudes y ¡no me llames hermano!

Johnny corrió, en algunas ocasiones estaba "cojeando", por los moretones, el solo corría, llorando, su hermano se quedó quieto sin decir nada, la niña corrió tras Johnny, los vecinos pensaron "que malagradecido con su propio hermano" "déjenlo, pronto estará bien", pero Jonathan mismo sabía que lo decía por furia, pero aunque esas palabras le dolieron como jamás golpe le había dolido, es un fuerte dolor en el corazón.

Mientras tanto Johnny cayó bajo un árbol, este no podía seguir corriendo más, estaba protegido por la sombra del árbol, sin fuerza, y derrotado, moretones en su mejilla y sangre en la nariz y boca, sin fuerza, sin fuerza, cerró los ojos y descansó.

Al abrirlas el apareció en los regazos de una persona, el intentó levantarse pero era la niña quien le sostenía, este no quiso levantarse para no despertar a la niña, pero se sentía incómodo, hasta que el dio un soplido, eso hizo que la niña se despertara.

-Lo siento... yo...

(Johnny) - ¿Ya has dejado de llorar?


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