Mi Chico Luna (Yaoi/Gay)

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Hace cientos de años atrás los humanos eran de almas tan puras que se les tenia permitido tener contacto con toda clase de seres de la naturaleza como las Ninfas, Dioses del Aire, los Reyes del Sol, Lobos protectores de los volcanes, etc. Todos coexistían como si fueran de una misma especie, sin temor de unos hacia los otros, respetando los territorios para evitar guerras; Solo que había una regla que nadie podía romper ya que de hacerlo llegarían graves consecuencias

~Los humanos tienen prohibido enamorarse y desarrollar descendientes con otra especie iluminada por la naturaleza para mantener su ADN puro y no crear un desbalance de nuevas especies de vida~

Estaba claro que muchos humanos no se resistían a la belleza de otras especies y al compartir un amor correspondido debían ocultarlo demasiado bien para evitar el castigo fatídico, pero muy pocos se atrevían a huir a tierras desconocidas y ser libres de aquel dictamen que los distanciaba libremente.

En un bosque bautizado Fénix Luciérnaga se hospedaba un pequeño niño de cabello castaño, piel blanca, labios rosados, estatura media para sus 12 años y ojos tierra. Decían los habitantes de la nubes que siempre el chico tenia la mirada perdida en el cielo sin importar la gran belleza que le rodeaba por las noches.

~PUNTO DE VISTA DEL DIOS DE LA NOCHE~

-Cada anochecer sale de un pequeño escondite para subir a la terraza mas alta y admirar mi reino, su mirar es de tristeza como si algo lo torturara tanto que espera un fin. . . Es extraño, debería jugar como los de mas hasta dormir del cansancio. Tal vez necesite una buena compañía, se ve inofensivo así que. . .

Aquel dios de piel grisácea y resplandeciente fue en busca de su único hijo heredero de todo el Reino Luna para que acatara su orden de bajar a la tierra por un año y así poderse reencontrar a si mismo ya que de un día para otro su espíritu lunar y su espíritu del espacio oscuro colapsaron a tal punto que su propio físico se transformo de una silueta humana con piel de reflejo lunar, ojos turquesa, cabello rubio como los rayos del sol a piel blanca y seca como el papel, sus ojos se volvieron agujeros negros, su hermoso cabello a Blanco grisáceo y de su espalda le nacieron dos alas de demonio, estaba perdido en si mismo por el dolor, el miedo, el coraje; siempre estaba rodeado por tantas estrellas pero ahora solo alejaba a los demás por que no se sentía comprendido, amado por alguien de sentimientos puros, las estrellas eran arrogantes con el joven príncipe y solo se interesaban por que era el hijo de el Dios que controlaba la tierra y a otros planetas.
Así entonces ya enterado el joven fue transportado a la tierra, específicamente a una terraza hermosa donde le había dicho que a las 8:00pm un humano iría por el para cuidarlo todo el año que se quedara en la tierra.

~PUNTO DE VISTA DEL PRÍNCIPE~

Cuando llegue a ese lugar donde me había mandado mi padre al parecer no estaba nadie que me cuidaría... Tal vez llegue muy temprano.
Después de esperar un gran rato decidí tomar una pequeña siesta en el pasto hasta que llegara alguien por mi pero mi pequeña siesta fue en realidad una gran siesta, todo estaba completamente oscuro hasta que unas extrañas aves empezaron a llegar y a iluminar todo el bosque, en realidad eran hermosas. . . Lo único que falta es. . . Ah ahí esta el reino de mi padre, tenían razón desde aquí en la tierra era grandiosa la vista del reino.
De la nada escuche unos pasos acercarse pero se silenciaron, yo seguía sentado mirando.

-Eres tu quien me cuidara, verdad?- pero nadie contesto.

-Sabes que puedo oír como tu cuerpo tiembla verdad?- Y no volvió a responder hasta que escuche que sus pasos se alejaban con rapidez- Hey tonta!! No me dejes aquí solo!!
Corrí tras la niña hasta tomar su brazo y detenerla.
-Por que corres? Que no vez que me puedo perder?!