(Leanlo escuchando More Than This)
—¿Que va a celebrar la boda dónde? —le preguntó Niall a Harry delante de un plato de crepés de plátano y coco que habían pedido para un desayuno de trabajo.
—El Ritz de St. Thomas —dijo Harry mientras empapaba un crepé en jarabe de arce caliente.
—Pero eso es tan, tan… —Louis buscó las palabras adecuadas— pedestre —dijo al fin.
Harry arqueó una ceja.
Niall hizo una mueca al oírse; aquello había sonado muy estupido.
—Dios, empiezo a parecerme a mi padre.
—Pedestre o no, la ayudante de Christina dijo que a su alteza le impresionó de forma especial la mujer que está a cargo de su departamento de eventos especiales. Dijo que le inspiraba mayor confianza la capacidad del Ritz para satisfacer el nivel de exigencia que pide la princesa.
Una oleada de cólera invadió la cara de Niall.
—¿Qué pasa, que esto es un hotel de mala muerte?
—Es verdad que dijo que en términos de belleza, Cayo Holley era muy superior, pero al final tanto a ella como a su personal les pareció que el Ritz era más capaz de albergar el acontecimiento.
Niall maldijo con ganas.
—Hay que ser realistas, Niall, necesitamos a alguien que sepa de verdad gestionar estas cosas. Hasta ahora no nos ha ido mal, sobre todo por pura suerte. Pero al parecer somos incapaces de encontrar el modo de organizar uno de estos grandes eventos sin descuidar a los otros huéspedes, y eso no es justo.
Niall se tiró del labio inferior mientras pensaba.
—¿Has dicho que era la persona que organiza los eventos del Ritz lo que decidió a la princesa?
Harry asintió.
Niall se levantó de un salto sin una sola palabra y agarró su bolso.
—Llama a Max y dile que necesito que me lleve a St. Thomas. De inmediato.
—¿Qué estás haciendo?
—Me voy de caza a los terrenos de la competencia.
* * *—Gracias por la oportunidad de organizar los esponsales de su alteza. Estamos entusiasmados. Le enviaré unas cifras la semana que viene y podremos empezar a resolver los detalles.
________ colgó y se quedó mirando el teléfono. Al final no había llamado a Niall la noche antes. Se había metido en la página web del hotel, y había buscado el número principal de Cayo Holley, incluso había tenido el teléfono en la mano antes de detenerse.
La oficina estaría cerrada y no sabía el número privado de Niall. ¿Y qué posibilidades había de que estuviera en casa a las nueve de la noche? Lo más probable sería que estuviera alternando con los huéspedes, asegurándose de que todo estaba a la perfección en el mundo de fantasía que había construido para ellos.
Quizá incluso peor, podría estar cenando con una hermosa joven soltera que hubiera ido a la isla a pasar las vacaciones y que no llegara con suficiente bagaje familiar como para hundir el Titanic.
Cuando ese pensamiento tan deprimente echó raíces en su mente, decidió posponer la llamada hasta por la mañana, cuando Niall se encontrase en la oficina, solo. Al menos por el momento.
_________ intentó zafarse de los pensamientos negativos. Si iba a hacerlo, tenía que tener fe, al menos por unos minutos y creer que quizá, solo quizá, Niall también estaba suspirando por ella.
Llámalo de una vez, chilló una voz dentro de su cabeza.