10. Esto es el destino.

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Estaba al frente de mi nuevo departamento, cogí el teléfono y llamé a Edwardo, rápidamente me contestó.

- Edwardo, estoy al frente de tu departamento, voy a aceptar tu oferta...

- Es... ¿en serio?

- Si

- Ahora mismo bajo.

Colgué, le pagué al taxi y saqué mis maletas, pronto escuché unos pasos venir apresuradamente detrás mio.

-Te ayudo con eso - Edwardo cogió las maletas y las llevo dentro del edificio, entre luego y la sala de estar se veía bien por dentro, ya me imaginaba cuanto mas o menos debe estar el alquiler aquí, estábamos en el primer piso, lo acompañe hasta la puerta, entramos al departamento, era como una casa, la sala era espaciosa, tenia muchas puertas por dentro y tenia una cocina con un bar, era enorme. No pude esconder mi sorpresa, mis ojos estaban atrapados por la belleza del lugar cuando sentí que chocaba contra algo ligero pero contundente, voltee a ver y era Edwardo, me tenia sostenida de la cintura y se estaba apegando a mi, cada vez más, me separé de él y cogí mis maletas.

- ¿Dónde es mi cuarto? - le pregunté mientras seguía mirando a mi alrededor, no podía mirarlo a los ojos, se sentía incomodo.

- Es por aquí - era la habitación final en el pasillo, la abrió y la vi, era hermosa y esa cama era de dos plazas y parecía como si estuviera hecha para mi, lo que más me gusto es que tenia baño propio.

Entré, deje mis maletas y me senté en la cama, vi como Edwardo entraba y se sentaba conmigo.

- T/N - me habló mirándome con algo de preocupación - ¿Por qué te mudaste aquí?¿Qué te hizo cambiar de parecer?

Sin poder contener las lágrimas, me tapé mi rostro, el solo me veía y pude sentir su mano en mi espalda, cuando estaba calda, le conté todo lo que había pasado, confiando en el le comenté que había estado saliendo con Jimin de BTS, pero que yo decidí terminarle, por todas las cosas que estaban pasando.

- Ya veo... no te preocupes, puedes quedarte aquí todo lo que quieras.

- Gracias

- Ven te voy a mostrar el departamento.

~*~

- ¿Tienes alguna información de ella? - se podía escuchar una voz femenina en la otra linea del teléfono.

- Ellos terminaron su relación al parecer... además te tengo una buena noticia - el hombre que hablaba hizo una sonrisa malévola - esta viviendo en mi departamento.

- Perfecto, eso la mantendrá alejada de mi objetivo.

~*~

Sentía como la luz del sol pasaba a través de mis parpados, los abrí lentamente y recordé que ya no estaba viviendo con los chicos de BTS, una sensación de tristeza invadió mi ser, no había pasado ni un solo día pero yo ya los extrañaba. Me di cuenta que faltaba algo de tiempo para ir a trabajar, así que fui a la cocina y busque algo para hacerme un desayuno, vi que tenia yogurt, jugo, pan en molde, cereales... cereales... un recuerdo rápidamente invadió mi memoria.

- ¿Siempre vienes a comer a estas horas de la noche?

- La mayoría de veces, ¿Por qué?

- Por que posiblemente sea tu acompañante, no suelo dormir bien los primeros días que vivo en una casa que no sea la mía y el mínimo sonido me va despertar, justo como ahora.

- Ya veo, eso no esta nada mal. - Y me dedicó una sonrisa que estoy segura nunca haberla visto en ninguna foto, me dio un mini ataque cardíaco en ese instante.. era hermosa.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, lo amaba mucho, pero tenia que seguir en pie con mi decisión, era por el bien de los dos, era por su felicidad. Me serví lo primero que vi y luego me fui a arreglar para irme a trabajar, cuando salí de mi cuarto vi que Edwardo ya estaba listo también.

- Vamos juntos.... ¿te parece?

- Esta bien... vamos.

Como el trabajo también era algo cerca de este departamento, decidimos ir caminando, nos pusimos a hablar de muchas cosas, el hacia bromas de las cosas que decía, yo también me burlaba de el, era graciosisimo, me encantaba hablar con el, era genial. Sin darnos cuenta ya nos encontrábamos en la puerta, saludamos a todos y pronto escuchamos murmullos, sabia lo que decían, pero no me importaba, seguí hasta el cuarto de empleados, y me puse el delantal. Cuando ya estaba a punto de empezar a trabajar, mi jefe me llamó.

- T/N, ven necesito decirte algo

Fui con el hasta su oficina, cuando entré habían tres personas más, rápidamente tome asiento en uno de los sofás.

- Los he reunido para decirles que han sido trasladados a otra cafetería, allí les van a pagar más y van a tener permisos de más tiempo, si están interesados en trasladarse firman, tienen la opción de quedarse aquí si lo desean.

Me van a pagar más... eso me gusta. Me levanté del sillón y cogí el lapicero, firme y le di las gracias a mi jefe por la bondad de contratarme y de darme esta oportunidad. Firmó una chica más y de allí mi jefe se quedó a conversar con nosotras dos.

- Este trabajo es a tiempo completo, es en una empresa musical, la dirección esta en este sobre - rápidamente nos alcanzo un sobre blando con una símbolo en la esquina superior, no lo llegué a ver bien - empiezan en un mes, pueden retirarse.

Salí de la oficina, y me encontré con Edwardo, le conté todo lo que había pasado, al parecer no se lo tomó muy bien que digamos, por la expresión de su rostro, creo que esta celoso.

Terminamos de trabajar y fuimos al departamento juntos de nuevo. Estábamos conversando casi por la mitad del camino cuando veo una combi blanca detenerse con brusquedad a mi costado, haciendo un ruido estrepitoso con las llantas, luego la puerta se abrió y de ella, salio Jimin, corriendo directamente a mi.

- ¿¡Por qué no contestas el celular!?

De la impresión, no podía decir ni una sola palabra, me di cuenta que desde el día de ayer no había visto mi celular y tampoco había prendido el portátil.

-¿¡Por qué me haces esto!? Sabes de mis sentimientos y te alejas de mi, ¿¡Por qué!?

Yo aun estaba sin palabras, mi mente estaba en blanco, quería llorar, el no me entendía, nunca lo haría. Antes de que pudiera notarlo, sentí una mano en muñeca y vi que Jimin me sostenía y me jalaba hacia la combi, pero al instante sentí otra mano en mi otra muñeca, era Edwardo, no dejaba que Jimin me llevara con el.

- No ves que ella no quiere ir, déjala. - vi como Jimin miraba con unos ojos de odio a Edwardo luego me miro a mi, y su mirada se torno a una triste.

- Ya veo... T/N, aun tenemos una charla pendiente, no lo olvides.

Y así retrocedió y se fue hacia la combi, en la puerta estaba Jin y Jungkook, luego subieron los tres y se fueron. La tristeza me embargaba hasta el fondo de mi corazón, solo queria llorar, y asi fue deje que las lagrimas corrieran por mis mejillas, pronto sentí los brazos de Edwardo sostenerme para reconfortarme, no dijo nada solo se mantuvo así por un tiempo luego fuimos a nuestro departamento en silencio.

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Nos vemos en el siguiente capítulo como siempre... bye!


{Jimin y Tu} No soy lo que tu creesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora