ULTIMO DÍA.

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Faltaba un día para que Nacho se marchase, ese día Nacho y Maeva lo pasaron juntos.

Cuando Nacho se levantantó, se dirigió a la cocina y le preparó el desayuno, aquel desayuno era como los que les traian a la habitación del hotel de Francia, Nacho puso sobre la bandeja dos chocolates calientes, crepes con sirope de chocolate y un bolt con fresas. Se dirigió hasta su habitación y despertó a Maeva con besos, empezando desde el ombligo pasando por el pecho continuando por el hombro, el cuello, la barbilla, hasta la boca. Mae se despertó con una sonrisa, abrazó a Nacho por la espalda y le empezó a besar los lunares que tenia, alli Nacho se dió la vuelta y le dijo susurrandole al oido que tenían la casa para ellos solos. Comenzaron a besarse, cada vez con más y más intensidad. Comenzaron a quitarse la ropa, hasta quedarse en ropa interior, Nacho intentó quitarle aquel bonito sujetador de encaje negro. Cuando los dos se quedaron completamente desnudos Nacho le dijo al oido que no le haria daño, y comenzaron a hacer el amor.

Cuando terminaron Maeva y Nacho se quedaron en la cama desnudos tapados con el edredón de la cama y se pusieron a desayunar la comida que había preparado Nacho.

-¿Cómo podré hablar contigo cuando no estés a mi lado? preguntó Nacho.

-Te escribiré cartas todas las semanas para que sepas los que me ocurre le contestó Maeva.

Nacho sonrió.

-Te echaré mucho de menos mi vida dijo Nacho.

-Yo a ti también mi amor, ¿No ocurrirá nada verdad? preguntó Maeva preocupada.

-¿Nada de que? le preguntó Nacho.

-Nada en ninguna batalla contestó Maeva.

-No cielo, tranquila, yo también te escribiré para que sepas que estaré bien le dijo Nacho mientras le daba un beso en la frente.

Ambos se vistieron antes de que llegase la madre de Nacho.

Llevaron los platos a la cocina y los metieron en el lavavajillas junto a otros platos sucios.

Salieron a la calle allí vieron que la madre de Nacho entraba.

-Hola mamá le dijo Nacho.

-Hola guapos, ¿A donde vais? preguntó su madre.

-Vamos a dar una vuelta, no tardaremos contestó Nacho.

-Vale, Maeva ¿te quieres quedar a comer? voy a hacer macarrones, Nacho me ha dicho que te gustan dijo la madre de Nacho.

-Esta bien, gracias contestó Maeva sonriendo.

-Adiós mamá dijo Nacho mientras salian por la puerta.

-Adios contestó su madre.

Mae cogió el movil del bolsillo y llamó a su madre para advertirle de que no iba a ir a comer.

-¿Sí? preguntó su madre cogiendo el teléfono.

-Mamá, oye, no me esperes de comer, la madre de Nacho me ha invitado dijo Maeva.

-Vale cielo, ¿sobre que hora vendras? preguntó su madre.

-Sobre las ocho o por ahi, no muy tarde porque Nacho tiene que descansar para mañana contestó Maeva.

-Vale cielo dijo su madre.

-Adios mamá dijo Mae.

-Adiós contestó su madre.

Ambas colgaron el teléfono y Maeva se puso a hablar con Nacho.

-¿Mañana a que hora llegaras al aeropuerto? me gustaría estar ahí para despedirme de tí dijo Maeva.

-Supongo que estaré a las siete, el avión sale a las nueve de la mañana contestó Nacho.

-Esta bien dijo Maeva.

Pasó cerca de una hora y decidieron volver a casa de Nacho para ayudar a su madre con la comida.

-Mamá, ya estamos aquí gritó Nacho desde la puerta de entrada.

-Vale cariño gritó su madre contestandole.

Maeva y Nacho se dirigieron hasta la cocina para ver como iba la comida.

-Ya estamos a punto de comer dijo su madre.

Nacho y Mae empezaron a poner la mesa, platos, vasos, cubiertos, bebida..

La madre de Nacho empezó a servir la comida.

-Que buena pinta tienen dijo Maeva.

-Pruebalos haber si te gustan dijo la madre de Nacho.

-Seguro que sí contestó Mae.

Todos empezaron a comer.

-Estan riquísimos dijo Mae.

-Muchas gracias cielo contestó la madre de Nacho que cuyo nombre era Charo.

-Cómo voy a echar de menos tus comidas tan ricas mamá dijo Nacho.

-Anda no me hagas las pelota contestó Charo. ¿Ahora te preparo la maleta o te la preparas tu? preguntó.

-Tú por favor, que me gusta como me doblas la ropa contestó Nacho.

-Que pelota eres dijo Maeva con un toque de risa.

-No lo conoces tu bien, comenzó a reir Charo mientras se levantaba a por la fruta como postre. ¿Quieres algo de postre? le preguntaba Charo a Maeva.

-No, no muchas gracias, estoy llena contestó Maeva.

Nacho y Maeva se levantaron de la mesa y se dirigieron al salón a ver la tele, en la mayoría de canales estaban las noticias, y decidieron ver un programa que echaban en 'Factoría de Ficción' más conocido como 'FDF'.

Se tumbaron en el sofá uno al lado del otro, y se besaban de vez en cuando.

-¿Sabes lo mucho que te quiero? preguntó Nacho.

-No sé, ¿Cuánto? preguntó Maeva.

-Lo suficiente para aceptar tus defectos y aún así pensar que eres perfecta contestó Nacho.

Maeva se lanzó a darle un beso, un gran beso.

Apagaron la televisión y se dirigieron a la habitación de Nacho, allí se tiraron en la cama y comenzaron a besarse, con música de fondo, sonaba su canción, fondo flamenco - escuchame mujer.

El tiempo pasó era cerca de las cinco y media decidieron salir a dar una vuelta. Decidieron ir de camino a aquel acampado que fueron la primera vez que se escaparon para pasar el día juntos.

Allí se sentaron en un banco viejo de madera en el que se sentaban siempre que iban aquel lugar.

Allí comenzaron a besarse más y más apasionadamente.

Nacho miró el reloj del movil, vió que eran las ocho, y decidieron levantarse y bajar hasta la casa de Maeva para que Nacho pudiese descansar.

Cuando llegaron a su portal se despidieron con un gran beso.

-¿Mañana vendras? preguntó Nacho.

-Sí, estaré allí contestó Maeva.

Se dieron otro beso y Maeva entró a su portal.

-Mamá ya estoy en casa gritó Maeva desde la puerta.

-Vale cariño contestó su madre.

-¿Dónde estas? preguntó Mae.

-En la cocina contestó su madre.

-Mamá ¿mañana me podrías llevar en coche al aeropuerto para estar allí a las siete? preguntó Maeva.

-Claro que sí cielo dijo su madre.

Mae se marchó a su habitación a dormir y descansar.

te esperaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora