Weasley, los bromistas de hogwarts (reescribiendo)

Capítulo 2

La broma a Slytherin.

—¡Shh! —me hizo callar George justo cuando estaba por hablar..vaya, ¿como supo que estaba por hablar? ¿Acaso es adivino?

—Pero..

—Shhh —dijo esta vez Fred.

—Chicos..

—Sam, ya..shh.—esta vez fue mi mellizo, que me metió un codazo en las costillas.

A pesar de que me habían echo callar tres veces, hable. Oh si, soy tan rebelde.

—¿Chicos cuando lo tiraremos?

Los tres se dieron vuelta a mirarme reprochante. Tenían la misma cara los tres que me dio risa y me tuve que tapar la boca para no empezar a reírme como loca ya que eso hubiera sido desastrosos para nuestra suerte.
 Allí los tres chiflados.

—¿Que no entiendes de "shh"?—pregunto burlón George. Tuve el impulso de pegarle, pero como lo acabo de conocer y no tengo tanta confianza no le pego, aunque nos llevamos bien, vamos, solo un golpecito en el hombro. Levante la mano para pegarle despacio en el hombro pero ya no estaba a lado mío, escucho su voz por detrás y supe que ya se había ido, Fu, mucho tiempo pensando..

—Lo tiraremos cuando sea el momento..—hablo Fred en susurros.

—..de que abran la puerta y allí.

—..la tiraremos..¡Bam!

—¿No se darán cuenta? —preguntó esta vez Ben, esta un poco asustado.

—No—No se cual de los dos lo dijo por que no pude contener la risa al imaginar a los de Slytherin tratando de escapar de la bomba de olor.

—Sam, si no te callas..¡Te pegaré!—dijo George, si supiera que sólo hace dos segundos yo estaba pensando en pegarle.

Estábamos los tres agachados a lado de un compartimento de Slytherin, dos zanahorias y dos morenos..bien..si nos pillan...¡Ay pero será genial! Nadie nos pillará, por lo que me contaron las serpientes, así llaman a los de Slytherin, son muy distraídos. Estos zanahorias me caen bien..a pesar de que parecen locos, no había nadie en los pasillos, seguro faltaban horas para llegar, afuera ya estaba oscureciendo y las luces del tren a decir verdad no alumbraban nada ¡casi nada! Yo que ellos..pondría más luces en el tren, ¿quien sabe? Podrían encontrarse más como nosotros que se esconden en la oscuridad de los pasillo..mejor me concentro..Hasta un foco de la luz que estaba en el techo pipilaba ¿Que es lo que estaba diciendo?. Parece que Fred también se percató de ese foco, ya que sacó la varita de su bolsillo y apuntó hacia allí.

—Tengo un conjuro para arreglar eso.

Iba a preguntarle que haría, pero sería muy obvio, soy una cabeza hueca, si saca su varita es para hacer algún hechizo ¡no va a ser para comer! aunque me pregunto si sabe algún encantamiento para arreglar cosas..o alguno que haga comidas..

Apuntó al foco y murmuró algo por lo bajó, tan bajo que no alcancé a escuchar bien a pesar de estar cerca de el. Iba a preguntarle que dijo, pero seguro quedaría como molesta y el me lanzaría algún hechizo..bueno, no así. Pegamos un salto los cuatro cuando el foco explotó y saltaron los pedazos de vidrio, por suerte no cayeron arriba de nosotros, por poco pego un grito pero Ben me tapó la boca a tiempo..hermano si que me conoces.

—Ups..conjuro incorrecto..—susurro.

—Fred, hermano. Te mataré.

La puerta del compartimento se abrió, nos volvimos a sobresaltar, si me seguía sobresaltando así terminaría desmayada del susto, nos agachamos aún más y nos separamos un poco de la puerta, un chico de pelo negro salió y miro para ambos lados del pasillo. Nos quedamos de piedra, parece que por la oscuridad en ese sector, ya que mi amigo zanahoria Fred había roto el foco, no podía vernos ¡Bendito seas Fred! Sentí unas manos tocando las mías me volví a sobresaltar ¡mierda! En cualquier momento moría. George me agarró la mano y me la apretó, me sonroje en el acto. Menos mal que estaba oscuro allí.

—Pásame la bomba de olor..—sentí que susurraba en mi oído. Fue todo rápido, se la di, que justo la tenía apretando en mi mano, el sin dudar tiro la bomba dentro del compartimento, vaya, le calculó bien ¡y que puntería! Podría haber pegado en la puerta y no entrar pero entró y justo en el momento en que el chico serpiente estaba por cerrar la puerta. La bomba explotó y se vio que los vidrios se ponían verdes. No pude seguir viendo más por que George me había agarrado de la mano y me llevaba corriendo lejos de ahí.

Algunos curiosos de otros compartimentos nos miraban mientras pasábamos corriendo. Por lo que pude ver, ya que íbamos tan rápido que veía borroso.

—¡Que suerte tuvimos! —grito mientras entrábamos a nuestro compartimento aún riéndonos.

—No estuvo tan mal.

Todos tomamos asientos y seguimos riéndonos.

—¡Claro que no Ben! —grite— ¡Fred! Pensé que ibas a arreglar ese foco no a romperlo.

—Es que iba a arreglarlo..—dijo confundido mientras se rasgaba la cabeza y no creo que sean piojos —Creo que dije el hechizo mal.

—¡Y si no fuera por eso nos habrían pillado! —dije feliz— ¡Eres un genio Fred!

El me miro y me sonrió mientras hacía un gesto con su mano y movía su cabeza para todos lados.

—Gracias a este cerebro —dijo presumiendo.

—Gracias a tu varita..—río George.

—No lo arruines hermano..

Pasaron unos chicos corriendo por el compartimento, iban pintado de verde..bueno..no pintados, al parecer esos son los chicos del compartimiento con la bomba fétida. Nos miramos entre los cuatros y reímos a carcajadas.

—¡Salió genial! —los cuatro chocamos los cinco.

Ya estábamos vestidos con nuestras correspondientes túnicas de primer año, eran negras y era obligatorio usar camisa y corbata, menos mal que se como va una corbata. A pesar del calor que hace..espero que no haga tanto calor dentro del castillo. Al menos la pollera es cómoda, pero creo que me queda un poco grande, bueno seguro creceré y luego me quedará bien.

Volví a entrar al compartimento que había salido para que los chicos se puedan cambiar, ya que me había ido a dar un paseo por el tren, a ver si con un poco de suerte encontraba a mi hermano Luke que parece que nos abandonó en el tren y se olvidó de nosotros, no lo sé. Al parecer éramos los únicos que faltaban que se vistieran, ya que cuando paseaba por allí (no pude evitar mirar adentro de otros compartimentos) la mayoría estaban con sus túnicas. Cuando entre George se estaba acomodando la corbata como podía, era el único, los otros tenían la corbata bien acomodada.

—Espero que no tengamos que hacer esto todos los días —dijo algo cansado, parece que llevaba un buen rato acomodándose.

—De echo, es todo los días.

Torció la boca.

—¿Y como sabes?

—Bueno..nuestro hermano Luke nos contó.

—¿y como sabe el?

—Bueno..Fred..es muy obvio.

—Ya lo sé no soy tonto.

—Pero lo aparentas.

—No soy tonto, soy hermoso.

Los cuatro largamos una carcajada. Definitivamente si, empezamos bien.

_______________