You're Driving Me Wild (Gay/Yaoi)

Capitulo 3: See you later.

"Tyler".

El sonido de unas pisadas me habían despertado, giro mi cuerpo suavemente asomándome al costado de la litera de arriba. Al parecer el pequeño Troye se había despertado a mitad de la noche luego de habernos perdido en el bosque por dos horas y que llegáramos a casa justo antes de que su madre notara que no estábamos dentro.

Al final ambos tomamos una ducha rápida. Su madre nos preparó la cena y fuimos a su habitación a ver la televisión mientras Troye se incomodaba por haber ido al bosque sin que su madre lo supiera. Supuse que eso era lo que no lo dejaba dormir.

-¿Estás bien ojitos tristes?.- pregunté, al instante me observo y se sorprendió un poco.- ¿No puedes dormir?, tienes mala cara últimamente.

-¡Oh!, Siento haberte despertado Tyler.- respondió algo bajo, raramente se veía lindo en ese momento con su carita de cachorro pidiendo perdón.- Es que... creo que solo tube una pesadilla.

-¿Crees?.- pregunté imitando su tono.- ¿Tiene que ver con haber ido sin permiso al bosque?, porque si es así yo lo lamento. No debi haberte arrastrado conmigo a pesar de que no querías.

Lo observé un rato ya que no me daba respuesta, pues sabía que era por esa razón. Bajé de la litera de un ligero salto y me acerque a él lentamente mientras él observaba al suelo pensativo y preocupado.

-Hey.- dije, toque su suave rostro con mis pequeños dedos y dirigí su mirada hacia mi.- Realmente lo siento, no te sientas culpable. Si tu madre se entera, me llevaré toda la culpa no te preocupes.

-Pero...-empezó, tardo un poco en seguir hablando.- No quiero que te metas en problemas, no seria justo. Te defenderé si hace falta.

Creo que le daba mucha importancia a algo tan insignificante, conociendo a su madre lo mas que podría hacer era decirle que no lo hiciera de nuevo. Pero aun así me agradaba un Troye preocupado, pues me da la oportunidad de hacerlo sentir mejor.

-No creo que haga falta todo eso, dudo mucho que tu madre se de cuenta.- dije acariciando aún su rostro, no me di cuenta que todavía lo seguía tocando hasta ahora. Parecía gustarle el contacto que hacia, se notaba más calmado.- Bueno, creo que ya está. ¿Puedes dormir ahora?.

-Esto... eso creo. Pero... podrías?...- Sabía que quería decir sin que terminara la oración. Como le daba nervios preguntármelo simplemente lo lleve a su cama y me acosté a su lado.- Tyler... yo... bueno, gracias.

- Es lo menos que puedo hacer por haberte provocado tanta angustia.- respondí, su rostro descansaba en mi pecho. Me sentía tan bien estando así con él que mi palpitar se aceleraba de repente.- Buenas noches Troye.

No recibí respuesta, pues ya se habia dormido. Mientras yo aun acariciaba su ondulado cabello, y olía su presencia que era el olor del jabón con el que nos duchábamos.

Antes de que el sueño me venciera, hice algo que no debi haber hecho en ese momento. Pero mi cuerpo se movía solo, y en el fondo lo deseaba.

Suavemente, coloqué su cuerpo a mi costado. Tomé de nuevo su suave rostro deslizando mis dedos por el contorno de sus mejillas, su nariz, su mandíbula y finalmente sus labios. Debía admitir que me encontraba algo nervioso pues mi pulso se aceleraba con ese simple contacto.

Finalmente lo hice. Lentamente sin despertarlo, choqué mis labios con los suyos y me sentí en las nubes. Sus labios eran como deliciosos ositos de gomitas al sentirlos, y su sabor algo indefinido pero que quisiera sentir por siempre.