That Boy is a MONSTER (Adaptación)

CAPÍTULO 10

Lean sensualmente jajaja esto está mejorando poco a poco recuerden que solo yo estoy adaptando el fic
La autora es LizCovath

El sol de mediodía brillaba en el cielo. Kai y Kyungsoo había permanecido en el río un par de horas. El íncubo respondió todas las dudas que a Soo le surgieron en ese momento, claro que Kai se limitó a dar información del resto de su especie, así como evitar especificar qué era lo que hacían realmente. Ahora los dos caminaban por el bosque a paso lento, Soo no quería llegar a su casa aún, y Kai tampoco quería despedirse.

—¿Por qué yo? —Se atrevió a preguntar Soo mientras seguían de camino hacia el pueblo.

—Primero fue atracción física, tu olor me atrajo. Después no sé, solo pasó —Kyungsoo asintió mordiendo su labio, toda esa situación lo ponía muy nervioso—. ¿Y tú?, ¿cómo pudiste cambiar de parecer? Si mal no recuerdo me detestabas.

—Odio tu comportamiento, eres demasiado confianzudo y vulgar —Kai arrugó la frente—, pero… pude verte detrás de eso. Tu bondad.

Kai río, Kyungsoo tenía un mal concepto de él, no era para nada bueno, si él supiera todo lo que había hecho, no estaría en ese momento a su lado. Soo lo miró extrañado, no entendía por qué el íncubo se reía, ¿acaso había dicho algo malo?

—¿Qué sucede?

—Ángel, eres demasiado bueno para mí, soy como uno de esos demonios. Es peligroso que te guste y me gustes.

—¿Por qué?, ¿por qué lo dices?—Kai se mantuvo callado por unos segundos, hasta que finalmente habló.

—Cuanto menos sepas, mejor —Kai se transformó nuevamente y tomó a Soo en los brazos—. Es peligroso continuar aquí, regresaremos rápido,  sujétate.

Kyungsoo se abrazó a su cuello al momento de ver que los dos subían. Una vez arriba pudo ver todo el pueblo, el bosque y la carretera rumbo a la ciudad. Todo se veía tan pequeño y hermoso. Sonrió inevitablemente y volteó a ver a Kai, este lo miraba sonriente ante su felicidad.

—Es maravilloso volar —dijo con los ojitos brillantes, Kai acercó su rostro y le dio un beso. La sonrisa de Soo se esfumó, pero no estaba molesto, más bien abochornado.

—Y tú eres hermoso.

Kai continuó el vuelo hacia la casa de Soo. En todo momento el corazón de Kyungsoo palpitó con rapidez, ese monstruo estaba subiendo de nivel en su acelerado corazón.

***

—Kyungsoo, puedes subir a tu habitación —dijo su padre, toda la familia estaba reunida para la cena, Soo ya había terminado su plato.

—Pero ustedes no han terminado.

—No es necesario que nos esperes, yo hablaré un rato con tu madre. —Soo asintió y se levantó.

—Buenas noches, y gracias por la comida.

Su papá generalmente lo hacía esperar hasta que todos hubieran terminado, ellos comían demasiado lento, fue una suerte que su padre estuviera de buen humor últimamente, o eso es lo que parecía, aunque por las noches podía escuchar que despertaba aterrado, quizá alguna pesadilla.

Al entrar a su habitación encendió la luz esperando encontrar a su visitante nocturno, pero no estaba ahí. Suspiró, apenas ese día había descubierto su verdadera naturaleza y a pesar de todos sus miedos y traumas infantiles, no le importó. Al principio sintió miedo, pero su corazón se aferró a sus sentimientos y mandó al diablo todo lo demás. Kai lo hacía cambiar demasiado y eso le asustaba, no quería fallarles a sus padres, ya suficiente tenían con elegir a un hombre y no a una chica, pues sus papás jamás lo aceptarían.

***

Kai llegó a la zona que ocupaban los íncubos dentro del pueblo, es decir, los terrenos de su casa. Entró sin ninguna complicación, hacía bastante tiempo que no iba por ahí ya que su padre lo tenía viviendo con su mamá, por un momento creyó que lo correrían, pero nadie salió a cerrarle el paso.

—¿Dónde está mi padre? —preguntó Kai al primer íncubo que se encontró.

—Salió muy temprano hacia la ciudad. Volverá en unos días —le respondió el hombre.

—¿Sabes a qué fue?, papá no suele irse a lugares concurridos.

—No lo sé, Chanyeol lo acompaña —dijo simplemente. Kai dio media vuelta y caminó de regreso, no tenía nada más que hacer ahí. Ahora ni siquiera estaba Chanyeol para hacerle compañía.

Era tarde, pero al menos quería hacerle una visita a Kyungsoo, probablemente el chico debía estar dormido ya pero necesitaba verlo y robarle quince o veinte besos más. Extendió sus alas una vez que alcanzó el camino dentro del bosque, pero inmediatamente sintió el agarre de otra persona en su mandíbula. Un demonio, él.

El cuerpo de Kai fue lanzado hacia el extremo derecho dando vueltas en el suelo duro. Una sonrisa torcida se asomó por el rostro del demonio. A simple vista era un chiquillo débil, no el demonio poderoso que los rumores contaban.

Cabello negro, mirada oscura, cuerpo delgado, alto y de rostro atractivo. No podía creer que ese estúpido estuviera delante de él, lo había visto aquella vez que fue en busca de su padre, pero jamás imaginó que tuviera que tenerlo frente a frente una vez más. ¿Qué es lo que quería?, ¿lo había descubierto con KyungSoo?

—Asmodeo —dijo una vez que se levantó.

—Hola, híbrido —respondió peinando rápidamente su cabello, era un gesto habitual.

—¿Qué quieres? —preguntó secamente.

—Vine a visitar a tu padre, pero me dijeron que no está —dio unos pasos acercándose a él—. ¿Sabes qué hace tu buen padre en la ciudad?

Kai no contestó, estaba más concentrado en las pisadas que daba Asmodeo en el suelo. No le agradaba que comenzara a acortar la distancia, si era tan poderoso como decían, moriría si intentaba hacerle frente. Su corazón prácticamente se detuvo, en menos de un segundo ya tenía a Asmodeo frente a sus narices. Esos pozos negros eran tan escalofriantes que incluso temió que pudiera ver sus recuerdos, no quería que descubriera a Soo.

—Dile a tu padre que me visite más seguido. —Se alejó dando media vuelta. Kai sintió que le regresaba el alma al cuerpo, un demonio tenía el poder de infundir temor con tan solo una mirada, y Asmodeo era excelente a pesar de su apariencia— Ah, se me olvidaba.

Kai escupió sangre, el demonio le había atravesado parte de su abdomen con una daga grande y afilada. La retorció haciéndolo gritar de dolor, la sangre llegó al suelo y poco después Kai cayó en él tocándose la herida, intentando resistir el dolor. Asmodeo chupó la daga ensangrentada con su lengua.

—Eso es un pequeño recordatorio a lo que te espera, la próxima vez serán mis garras quienes atraviesen tus entrañas. Buenas noches, híbrido.

Kai se miró la herida una vez que se vio solo, estaba sangrando mucho, y tampoco tenía suficiente energía para recuperarse por sí solo. Podía volver a la casa de su padre, pero no serviría de nada.

—Ahh… —se quejó. Con las últimas fuerzas se levantó y comenzó a caminar, necesitaba llegar al pueblo.

***

Kyungsoo se despertó, creyó escuchar un ruido así que asomó su cabeza por fuera de la sábana, pero no había nadie ahí. Volvió a cerrar los ojos intentando dormir, pero otro ruido lo alarmó de nuevo. Antes se hubiera asustado pensando que un monstruo estaría debajo de su cama, pero después de conocer a Kai quería verlo.

—Kai —susurró, pero no obtuvo respuesta.

Después de pensarlo un poco se levantó y caminó hacia la ventana, al abrirla pudo ver todo completamente en calma, hasta que un nuevo ruido lo hizo brincar del susto. Kai se apoyaba en la pared de la casa intentando subir, sus alas no le respondían y Soo no entendía por qué.

Kyungsoo bajó hacia la primera planta, y haciendo el menor ruido posible abrió la puerta. Corrió hacia Kai quien ahora se deslizaba completamente agotado. Al tenerlo cerca pudo ver la mancha de sangre en sus manos y ropa.

—Kai… ¿qué pasó?, ¿por qué estás herido?

—Soo... necesito…

—Vamos adentro, ven —Kyungsoo lo ayudó a levantarse y lo llevó hasta su habitación.

Una vez dentro lo recostó en la cama. Era como aquella vez, Kai estaba nuevamente herido, pero en esta ocasión la herida era terrible. ¿Debía llamar a un médico? Estaba todavía con esa transformación.

—¿Qué debo hacer? Kai, debes transformarte en humano para llamar a un doctor —dijo, pero Kai lo tomó de la mano y lo acercó.

—Déjame…

—¿Qué?

—Déjame tocarte un momento. —Kyungsoo se sorprendió, no entendía por qué tenía que salirle con eso ahora.

—¿Pero qué cosas dices? ¿Te estás muriendo y piensas en cochinadas? —le reclamó molesto.

—Soy un íncubo, idiota. Es la única forma —lo tomó del pijama y lo besó.

Kyungsoo abrió muchos sus ojos, Kai era un tonto que no entendía razones. Pero por la cabeza de Soo pasaba la misma pregunta ¿qué rayos era un íncubo? Kai le contó cosas de su familia, que su padre era estricto, que había pocos de su especie en el pueblo y que dependían de los humanos para obtener su fuerza. Pero no sabía exactamente qué hacían ellos con las personas.

Kyungsoo sintió como Kai iba desabrochando  la camisa de su pijama hasta que la desprendió por completo. Con sus manos recorrió su torso, acariciando cada área de piel en esa zona.

—Kai… detente… debemos curarte…

—Eso hago, Ángel —respondió. La vista de Soo se nubló. Estaba cayendo presa del placer. Kai chupó su cuello una vez que lo recostó sobre él.

—Tonto, te lastimaré —intentó alejarse, pero Kai no lo dejó— ah… mmm… nnah… Kai…

—Solo un poco más —susurró Kai. Soo se mojó sus labios, ya comenzaba a respirar rápidamente. De pronto Minnie se vio abajo y Kai sobre él, provocando que se sorprendiera y asustara, no quería ese tipo de acto en ese momento—. Si hago esto me curaré mucho más rápido.

Toda palabra murió en su boca al sentir algo caliente en su hombría. Se tapó la boca con su mano al gemir inconscientemente, cerró sus ojos fuertemente, no era capaz de quitar a Kai y mucho menos de reclamarle ¿Qué era todo eso?, se sentía tan bien que quería gritar, pero sus padres estaban ahí, y si descubrían lo que pasaba probablemente lo botarían de casa.

—No puedo… —dejó salir Soo retorciéndose entre las sábanas— Detente, por favor basta… ah… Oh, por Dios…

Kai se sintió mucho mejor, sabía que Soo estaba por terminar, nunca había experimentado ese tipo de cosas completamente despierto pues aquellas veces que lo tocó, Kyungsoo no estaba en sus cinco sentidos. Y comprendía que se viniera tan rápido, pero incluso con tan poco ya estaba completamente sano.

—¡Ah…! —Kyungsoo se arqueó al expulsar su esencia sobre las manos de Kai.

El íncubo se recostó a su lado con una sonrisa bastante satisfactoria, el rostro de Soo estaba bañado en sudor, sus mejillas rojas, y completamente acalorado.

—¿Qué… fue eso? —preguntó mirando al techo, todavía con la respiración acelerada.

—Un delicioso orgasmo, mi bello ángel —respondió.

—Un or… —Entonces Soo se sobresaltó— ¡Tu herida!

—Tranquilo, me has curado bien —Ki lo atrajo a él y tomó una de sus manos para llevarla al área donde debía estar la herida, pero se había esfumado como los falsos fantasmas de Baek.

—¿Pero cómo…? —Kai lo besó.

—Acabo de descubrir que eres demasiado sensible, te voy a enseñar los placeres de la vida.

En ese momento la puerta de la recámara se abrió de golpe. Dos personas, específicamente los padres de Kyungsoo, aparecieron irrumpiendo en la habitación. Los adultos miraron horrorizados a la criatura que en esos momentos abrazaba a su hijo entre las sábanas.

††††

Hola volví con otra actualización​ también pude actúalizar  hoy jajaja dejen sus comentarios abajo a para saber si les gusta también gracias por leer nos veremos pronto con más.