Capítulo VI

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Tranquilo, eres el fabuloso Chat Noir, no porque Alex se haya esfumado de la nada te tienes que asustar, tienes a Plagg, sin energías, pero lo tienes. En todo caso puedes correr y ver qué pasa.

Gire mi cabeza y vi dos grandes ojos púrpuras mirandome.

—. Con una mano me tomo del cuello y me pego contra la pared.

— ¡Bajame! —. Empecé a patalear.

Su mirada denotaba furia, pero, ¿por qué?

— ¿Sabes cuánto sufrimos? —. Su respiración se agitaba, y aplicaba más fuerza de agarre en mi cuello —. ¡¿Sabes lo que hizo él?! ¡Por tu culpa él se suicido!

— ¿Qui...én? —. Trataba de que el aire llegase a mis pulmones.

— ¡¿Quién más?! ¡Nino! ¡Y todo por tu culpa! —. La noticia me cayó como un balde de agua fría. ¿Nino acabó con su vida... Por ? —. me arrebataste a Nino, yo te arrebatare la vida —. Me soltó y yo caí de rodillas, trataba de que la mayor cantidad de aire volviese a llegar a mis pulmones. Miré hacía arriba y vi como ella me apuntaba con un celular. En ese punto me di cuenta de algo, ella era LadyWiFi, era Alya siendo consumida por el dolor, el odio y la furia. Me "puso en pausa", mi cuerpo dolia, y mucho —. ¿Sabes Adrien? Quisiera poder haber jugado contigo un poco más —. Vi como acercaba su dedo al botón de apagar. Su mirada me perforaba. Y ahí estaba yo, Adrien Agreste, 15 años, a punto de ser asesinado por su amiga. Pero de repente aparece un yoyo.

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