---Ishi---
Pensé que la novia de Onii-chan era la pelirroja.
Pero parece que no.
No sé porque me duele verlos juntos.
Esa mujer se lo llevo a la habitación.
Kyo-san me miraba fijamente.
Supongo que estarán haciendo cosa de adultos.
Como besarse y como lo llamo esa señora.
¿Tener sexo?
Cuando dos personas que se quieren comparten la cama.
Ya veo.
Pero aun así...
Duele.
Me levanté del sofá y salí de su departamento.
No quiero interrumpirlos.
Vi a mi mamá llegar y la abrace.
-Lo siento mi niño, tenía que entregar algunas cosas.
-No pasa nada mamá.
-¿Y Kyo?
-E-En su habitación.
-Oh, ese chico debe estar descansando y...
-Señora Shizuku.
Él tenía su cabello revuelto y el aroma de esa mujer estaba impregnado en él.
-Gracias por cuidarlo, vamos Ishi despídete.
-Hasta mañana Ijuuin-san. –susurre.
Él me miro sorprendido.
Incluso puedo ver una tristeza en su mirada.
-¿Por qué me llamas así? –murmuro cuando mi madre entro al departamento.
-P-Porque no quiero que su novia se enoje.
-Ella no es...
-K-Kyo, apúrate, te necesito.
Me di media vuelta y me detuve.
-¿Me devuelves la chamarra de Claus?
-Y a él si le llamas por su nombre. –bufó.
-¿Huh?
Kyo entro molesto a su casa y me aventó la chamarra al piso.
-No quiero porquerías en mi departamento. –gruñó.
Jamás me había hablado así.
Él siempre...
Siento mis lágrimas caer y él me miro.
-Ishi lo siento yo no...
-KYO BAKA, ERES LO PEOR, BAKA. –exclame y agarre la chamarra.
Me metí corriendo a mi casa y me encerré en mi habitación.
Él fue muy malo.
Pensé que me quería.
Pero...
Seguramente algo le dijo su novia.
Algo hice mal.
-¿Ishi? ¿Qué ocurre?
-Mami, ¿podemos volver a París?
---Ryu---
Kaoru es un maldito.
Lo hizo a propósito.
Llevar a la escandalosa de su novia a nuestra cena familiar.
Si tanto me odia...
Solo que lo diga.
Que no me ilusione.
Que ya no me bese.
Él es mi Alfa destinado.
Lo supe el primer momento en que lo vi.
Cuando nuestros padres nos juntaron para darnos la noticia.
Y cuando empezamos a vivir juntos por su casamiento.
Se descontrolo todo.
Él me besaba.
Incluso...
Un día...
Cuando mi celo era insoportable, él me ayudo.
No lo hicimos hasta el final, solo me ayudo a correrme.
Y me dijo que lo hacía por ayudar.
Que nunca me verá como su pareja.
Duele...
Pero tengo que salir adelante.
Por eso salí de esa cena.
Y fui a la casa de mis mejores amigos.
Son hermanos, y gemelos.
Oh...
Y también Alfas.
Ambos formamos una banda de rock llamada Cold and Hot
-Llegas tarde.
-Lo siento Trip, Virus, digamos que se me paso la hora.
-No pasa nada pequeño. –revolvieron mi cabello.
Ellos son muy cariñosos y me protegen.
Son amables y caballerosos.
Son buenos.
Aunque con los demás se porta muy frío.
Casi no les gusta que los Alfas se me acerquen.
Siempre me están abrazando o besando mis mejillas.
Actúan como si fueran mis Alfas.
Muchos dices que quieren conmigo.
Pero...
Son tonterías.
Ensayamos un poco.
Cantar y tocar la guitarra me desestreza.
Me hace sentir cómodo.
Después de lo ocurrido.
Ya es tiempo de levantarme.
De dejar de sufrir y rogarle a Kaoru.
Él tomo su decisión y su camino.
Es hora que haga lo mismo.
Ya no hay vuelta atrás.
Todo va a cambiar.
-Chicos, creo que deberíamos aceptar lo que dijo el manager, -suspire- probar en otros lados.
---Hiroki---
Realmente.
Siento que alguien nos observa.
Como si nos hubieran seguido desde la casa.
Esta sensación es desagradable.
¿Quién nos pudo seguir?
Tal vez solo es mi imaginación.
Espero que sea así.
Maldición.
Al menos Bakahiko tiene seguridad en su casa.
Me recosté en mi cama y me quede dormido.
Es difícil ser Omega en este momento.
En esta vida.
¿Por qué?
¿Qué hemos hecho?
¿Por qué los tratan tan mal?
A pesar de mi corta edad.
Entiendo perfectamente lo que pasa.
Soy muy inteligente y observador.
En la mayoría de las noticias.
Son sobre Omegas.
Que han sido secuestrados.
O los encontraron muertos.
Es difícil.
No entiendo porque.
A pesar de mostrar fortaleza.
Muero de miedo.
Pero no me dejaré vencer por ese miedo.
Seguiré adelante.
Porque no estoy solo.
No ahora que estoy comprometido con Akihiko.
Desperté con mucho calor.
Además sentía un peso extra.
Como si un oso me abrazara.
Abrí los ojos y vi a Akihiko abrazándome fuertemente.
-¡¡Waaaaaaa!!
Lo tire de la cama.
-A-Aún es temprano, -bostezo- ¿Por qué me despiertas?
-¿C-Cómo que por qué?
-...
-¿QUÉ HACES EN MI HABITACIÓN?
-Hacía frío y pues...
-...
-Aún es temprano, -se subió a mi cama y me abrazó- buenas noches.
Siento mis mejillas arder.
-B-Bakahiko.
Cuando menos lo pensé se quedó completamente dormido.
Este tonto.
Pero es muy cálido.
A pesar del calor...
Me siento cómodo en sus brazos.
Me quede mirándolo fijamente
Su cabello es de un color lindo.
Siempre me ha gustado el color de sus ojos.
Y ese olor a menta fresca.
Aunque más me recuerda al olor del verano.
Tan cálido.
Aunque...
No me agrada que sea más alto que yo.
A pesar que tenemos la misma edad.
Él se ve más grande.
Por estatura.
Me agrada.
De un momento a otro me dio un beso casto.
-¿Ehhh?
-Es que me miras fijamente.
-N-No es cierto. –me sonroje.
-Además lo haré muy seguido porque eres mi prometido.
-B-Baka.
Él rio y nos quedamos dormidos.
Es un sentimiento tan cálido.
Me gusta estar así con él.
Aunque...
Tengo de nuevo esa sensación de estar siendo observado.
A pesar de dormir profundamente...
Siento un aura pesada.
Y un aroma a cacao.
No me agrada el cacao.
---Miyagi---
Mierda....
Soy un idiota.
Joder...
-¿QUÉ HACES? –exclamo.
Me separe de mi niño que aún seguía dormido.
-P-Puedo explicarlo.
Ella se ve furiosa.
Seguramente.
Es la típica sobreprotectora.
Joder...
Esto es malo.
-Risako yo, digo él...
-Pobre Miyagi.
-¿HUh?
Ella me abrazo fuertemente.
-Seguramente mi hermanito te sedujo.
-¿QUÉ?
-Niños...
El señor Takatsuki entro.
Mierda...
-¡Papá!
-¿Qué ocurre Risako?
Por favor...
No me digas nada.
-Parece que la parte omega de mi hermano despertó y sedujo a Miyagi.
-Eso no...
-Ya decía yo que tener a un Omega en la familia solo causa problemas.
-Esperen...
No dejan que hable.
Shinobu no tuvo la culpa.
-Lo siento tanto Miyagi. –susurro el señor.
-Eso...
-Ahora déjennos solos.
Risako me dio un beso en la mejilla y le saco del departamento.
Rayos....
No me escuchan.
Shinobu no fue el culpable.
Fui yo.
Tengo que decirles.
Que él es mi destinado.
Por favor...
No lo castigue.
Risako malentendiste las cosas.
Él no me sedujo.
Es un omega tan tierno y lindo.
Por favor.
Aunque insisto no abren.
Tendré que venir mañana.
Lo siento mi niño.
Mañana mismo hablare con tu papá.
Él debe entender lo que siento ¿no?
---Misaki---
Toudou dijo que es mi prometido.
Que me cuidará.
Y yo le creo.
Porque siempre me ha estado cuidando.
Me protege.
Quiero estar a su lado.
Me siento tan feliz a su lado.
Desde que lo conozco.
Me encanta la vainilla.
Y él desprende ese aroma.
Comimos unas palomitas mientras su abuelo nos cuenta historias.
Su abuelo es un hombre tan tierno.
Me hubiera encantado conocer a los míos.
Su abuelo.
Siempre ha dicho que seré una buena esposa para Toudou.
Aunque...
Soy hombre.
Pero...
Quiero estar con él.
Caminamos un rato por el bosque.
Toudou tomo mi mano mientras caminábamos.
Mis mejillas siempre estaban rojas.
Él dijo que parecía una linda manzana.
Aunque...
No deja de decir cosas vergonzosas.
-Misaki.
-¿Huh?
Él me coloco un collar con un anillo en medio.
-Con esto prometo hacerte feliz y protegerte.
-T-Toudou.
-Quiero que estemos juntos siempre.
-H-Hai.
Él me coloco el collar y sonrió.
-Por siempre.
-Y para siempre. –reí.
---Externo---
La pareja Kamijou estaba sentada en la sala.
La omega lloraba a mares.
Mientras el Alfa trataba de consolarla.
Desde hace unos meses habían estado recibiendo muchas cartas.
Amenazas para ser precisos.
Diciendo que se llevarían a sus hijos.
Que los entregaran.
O todo se pondría peor.
Sus hijos estaban en peligro.
La pareja tenía que tomar una decisión.
Y era llevarse a sus hijos lejos.
Dónde nadie los encontrará.
Sin saber que esa sería la peor de las decisiones, al menos afectaría a uno de los castaños más que él otro, ya que el caos iba a desatarse, y los señores Kamijou pagarían las consecuencias de una mala decisión.
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Las Vueltas de la Vida (Akihiko x Hiroki)
FanficOmegaverse Desde un principio lo sabían, eran una pareja destinada pero... la vida trae siempre muchas sorpresas