Bianca P.O.V
Estaba en el suelo, dolorida, y perdida.
De repente, oí unos pasos. Me levanté lentamente, esa persona estaba detrás mía, pero se seguía acercando. De pronto, mi actitud cambió de repente.
-Quien eres...-dije con la cabeza agachada y de espaldas a él.
-Quien eres tu?-Dijo una voz masculina.
Me dí la vuelta, pero sin revelar mi rostro. De pronto, hice que levitara.
-Eres un policía...verdad?-Dije, con voz siniestra.
-Si, además venía a buscarte para llevarte a casa. Pero...SUELTAME!!
-*Sonrisa pícara* De momento, esta es mi casa.-Después de decir eso, al policía le esplotó la cabeza, pero lo que me estrañó es que yo...quería que se muriese. Lo dejé caer.
Andé lentamente hacia el sendero, para salir del túnel. Me pregunto...cómo lo hice levitar? y cómo...lo mas raro, cómo hice que le esplotara la cabeza? (Ya se...suena demasiado Gore pero esque está ambientado en la serie Elfen Lied)
Ví a un chico tirado boca abajo en el suelo, pero no le dí importancia y seguí caminando lentamente.
X-Ibas a alguna parte, pequeña?-Dijo una voz grave...y masculina.-jajaja, te estaba buscando.-Esa voz cada vez se acercaba más a mi. De repente, alguien me golpeó con un bate de béibol y me desmayé.
...
Desperté atada en una sala, con cadenas y sangre, por todas partes. Me habían hecho algo? Tenía puesto un camisón blanco, también manchado de sangre. Estaba en una sala como ... metálica y a lo lejos, una vitrina y detrás unas personas. Unos tentáculos negros me caían desde la espalda, y no respondían. Les habían hecho cortes pero no tardaron en caer al suelo.
-Ola Bianca, me oyes?-Dijo un altavoz.
-No respondí-
-Parece que la tenemos que obligar a hablar.-Entró a la sala un hombre con un chaleco antibalas, un escudo poco efectible contra mis ataques. Me apuntó con un rifle.
-*Sonrisa burlona*A qué has vienido, a hacerme hablar?
Él se acercó más.
-Creo que no te importa morir...eres valiente...verdad?-Le dije.
De pronto le amputé la pierna para que no pudiera andar más.
-Te lo estás pasando bien?-Le dije mirándole agonizar.
-Blanca, basta ya.-Me dijo un altavoz.
Sonreí burlona. Seguí haciendo daño al chico amputándole las demás extremidades. Hasta que me harté y rompí las cadenas y la vitrina de cristal que estaba a unos metros. Atranqué la compuerta de metal y me escapé.
-Rápido, traed más refuerzos.-Dijo uno de los científicos. Pero no pudo decir más porque le exploté la cabeza.
Muchos soldados y policías empezaron a dispararme pero yo seguía andando, sin que una bala me diese. A todas las personas, las iba matando hasta que llegué a la salida, donde había muchos soldados apuntándome.
-Bianca, ríndete o te matamos.-Dijo uno de los científicos que estaba en medio.
-Quiero saber una cosa...-Le dije.
-Dime Bianca.-Me dijo serio.
-Donde estan...Evan...Ainoha.
-Estan en otras salas. Haciéndoles pruebas igual que a tí.
-Puah...de que sirve que me apunen tantas armas.-Dí un paso y de repente, una chica tropezó al lado mía.
-AH!!-Se apartó de repente. Pero no pudo escapar porque le corté la cabeza y la sostení en el aire.
-Quereis acabar como ella?-Les dije.
-Disparaaaad!!!-Les gritó y me señaló a mi.
Caminaba lentamente hacia la salida.
Cuando estaba a punto de salir, una niña pequeña, con camisón rosa, lleno de barro y pelo rizado moreno me cojió el brazo. La miré de reojo.
-Oiga...no debería escaparse...es muy peligroso.
-Oye niña, necesito irme porque en mi casa me esperan y no saben que estoy aqui...entiendes?-Me dí la vuelta.
-Ya...pero quiero que juegues conmigo.
-Otro día, vale?-Escusa perfecta. Estaba a punto de salir por la puerta cuando...
-Si sales...Slender te matará.-Me paré en seco y seguí caminando.
Salí por la puerta y ví claridad por fin. Fuí corriendo hacia afuera pero notaba que me dejaba algo por el camino...Ainoha, Evan...
Volví adentro, arrasando todo lo que se me cruzaba por mi camino, había sangre por todas partes... y cuerpos muertos por los pasillos. Hasta que llegué a ña sala donde estaba Evan y Ainoha.
-Mira quien ha vuelto a por sus amiguitos-. Se dió la vuelta uno de los científicos.
Me cojió desprevenida un soldado y me agarró por los brazos desde atrás.
-Creo que esos cuernos, no te favorecen.-Se rió uno de los científicos.
¿¡CUERNOS!?
-TU CARA SI QUE NO TE FAVORECE!! - Grité con todas mis fuerzas y todos los que estaban a mi alrededor, esplotaron.
Abrí la compuerta metálica para liberar a Evan y a Ainoha.
-Eii...estais bien?-Dije mientras liberaba a Ainoha.
-Si...perece ser que si.-Dijo Evan.
-Vamos, salgamos de aqui.-Les hice una seña para que viniesen.
Salimos corriendo de allí pero de repente, se apagaron las luces del edificio.
-No os mováis-Dijo Evan.
-Una pregunta Bianca...¿Porqué tienes esos cuernos?-Preguntó Ainoha.
Me toqué la cabeza...efectivamente...tenía dos pequeños cuernos parecidos a dos orejas de gato en la cabeza.
-Aah!!-Grité asustada.
Salimos de ese antro y vimos el mundo real.
__________
Votad y comentad plss <3

ESTÁS LEYENDO
SLENDER MAN
Gizem / Gerilimesto es una mujer que tenía su vida hecha: Sus 20 años, su casa su coche... Pero de repente ve algo en su vida que no se lo espera y que da un giro 180 grados.