BLOODLUST.

Caps. 1 y 2

Cap. 1

Cuando abrí los ojos me encontraba sobre una cama en una habitación totalmente blanca, solo traía puesta una bata y estaba descalza. "¿Qué está ocurriendo?", pensé, tenía vendas en ambas muñecas, y me estaban poniendo suero, me puse de pie y arranque las agujas que estaban en mis venas, me dolió y salieron unas cuantas gotas de sangre que cayeron al piso, estaba mareada y me sentía un poco extraña, como si algo en mi hubiera cambiado, me asome por la única ventana que había, esta daba al exterior, todo estaba oscuro, al parecer estaba en el último piso, afuera todo era extraño, los autos no se movían, estaban dispersos por el pavimento, ¿había cuerpos?, por todas partes, a pesar de que estaba todo oscuro, los faros iluminaban lo suficiente, "¿Qué demonios ocurrió?", pensé asustada. De una u otra manera tenía que averiguar qué era lo que pasaba.

Me acerque a la puerta, y me asome por la diminuta ventana, no se veía nadie, eso era mucho más extraño, gire la perilla y abrí la puerta lentamente, salí, comencé a caminar, las lámparas parpadeaban, todo estaba en silencio, un silencio realmente aterrador, seguí caminando hasta llegar al elevador, entre en él, aunque algo en mi interior me decía que regresara, ya que las luces comenzaban a fallar, le pique al botón que tenía un uno, ósea el primer piso, cuando iba por el sexto, el elevador se detuvo, no entendía porque, entonces la puerta se abrió, decidí salir a revisar, comencé a caminar lentamente, lo único que veía eran cuerpos y más cuerpos, algo grave debía de haber ocurrido. Sabía que estaba en peligro, pero no me importo, vi un arma y la tome, después regrese al elevador, le pique nuevamente y comenzó a descender, se volvió a parar en seco, pero esta vez fue en el tercer piso, las puertas se abrieron, igual solo distinguía cuerpos, pero a lo lejos logre ver a un niño, estaba de espaldas e hincado en el suelo, parecía que lloraba, me fui acercando lentamente.

-¿Estás bien? ¿Qué sucedió?- le pregunte.

No respondió, pero escuche una clase de gruñido, volteo a mí, sus ojos estaban muy dilatados, y de su boca salía sangre, entonces comprendí, estaba alimentándose del interior de otra persona, se puso de pie, me miro y grito, después se fue sobre mí, me tiro al suelo, el arma cayo un poco lejos de mí, el niño trataba de morderme y seguía gruñendo, lo empuje de una patada, me estire y llegue al arma, la tome, el niño venia nuevamente hacia mí, le apunte a su frente y dispare, por fin cayó al suelo, de pronto comencé a llorar, había matado a una persona, a un niño.

Minutos después me limpie las lágrimas y me puse de pie, escondí el arma en mi ropa interior, regrese al elevador y seguí descendiendo, las puertas se abrieron nuevamente, pero ya estaba en el primer piso, comencé a caminar y enfrente de mi había muchas personas, todas estaban gruñendo justo como el niño al que había matado, empecé a llorar en silencio, pues sabía que me atacarían. Comencé a caminar de espaldas lentamente, deseaba que no notaran mi presencia, pero lo hicieron, me vieron y corrieron en mi dirección, también comencé a correr, venían detrás de mí, sabía que estaba a punto de morir, entonces alguien me jalo y tapo mi boca.

-Tranquila, no grites, si nos escuchan estaremos muertos- dijo.

Espero a que ese grupo de cosas terminaran de pasar, después me soltó, me miro de arriba a abajo, y eso me incomodo un poco.

-¿Quién eres?- pregunte.

-Un sobreviviente, así como tú.

-¿Sobreviviente?

-¿No sabes nada de lo que está sucediendo?

-No, acabo de despertar, me encontraba en el décimo piso.

-El hotel solo tiene nueve pisos.

-Pues yo estaba en el décimo, en una habitación completamente blanca y vestida así- señale mi bata.