-Te veo salir, tu visita fue muy larga y realmente no deseada.
Pero francamente sonrió, porque ya te vas.
Te estás marchando, me trajiste dolor y desepción al ver que todavía no lo supero.
¿Sabes? Pero el se dio cuenta de que llegó este tiempo cálido, y me miro y podría prometerte que vi aquellos recuerdos en un instante dentro de sus ojos. Y siguió caminando...
Te llevas tus arboles de cerezo, tu siempre tan cálido y reflexionativo, tan roto y tan unido. Me tuviste tus 30 días de profunda tristeza y tu mala visita de recuerdos vivos de dolor.
Que te vaya bien aunque no de corazón, regresa pronto aunque no sinceramente.
Adiós abril...
Mi cálido abril...
Un abril más sin él...
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Aquel abril calído
Roman d'amour"El se enamoró de sus flores y no de sus raíces, y en otoño no supo que hacer..." -Una pianista melancólica.
