En un suspiro

¿Qué narices?

Marta
Me despierto, pero... ¿dónde estoy? Me incorporo bruscamente y un dolor agudo empieza en mi cabeza:
- Aaaay!- digo en un tono de voz alto.
Me vuelto a tumbar e intentó localizar algo conocido... espera, ese cuadro... de qué me suena? Me incorporo, ahora sí, despacio. Estoy en un salón amplio en el sofá, mi móvil está en la mesa, lo cojo y miro las últimas conversaciones:
Laura
- Tía dónde estás??
- Te estamos llamando, porfavor contesta!!
- Nos volvemos a casa, en cuanto lo veas llama
- Le he dicho a mi madre que te quedabas en mi casa.

Ya le contestaré cuando averigüe donde estoy. Me levanto y busco La Cocina para beber un poco de agua y intentar acordarme de algo.
Cojo un vaso y lo lleno de agua del grifo, me siento en una mesa que está enfrente del fregadero:
*Pensando* :
-A ver... ayer estuve con Laura y estas bebiendo, cuánto bebí? Me tomé 3-4 cubatas... perdí la cuenta. Y luego conocí a ese chico, cómo se llamaba? Leo? Pero no me gusto y me empecé a encontrar mal, y salí de la discoteca. Ya me acuerdo! Apareció otro chico (Hugo?) y me ayudó a incorporarme y me dio un poco de agua; nos pusimos a hablar y... me invitó a su casa. Vale, ahora tengo que encontrar a Hugo y preguntarle que qué pasó.
Me miro inspeccionando mi ropa, voy igual que ayer, no creo que haya perdido mi virginidad (o espero). Cortando mis pensamientos oigo unas llaves y seguido veo un chico con una bolsa de papel que me dice:
- Ah! Ya te has despertado, te he traído unos churros y un café, quieres?- buah, qué sonrisa, no me acordaba de que era tan guapo...- hola?
- Sí sí, muchas gracias, perdona, ayer...?
- No, no pasó nada- me interrumpe- vi que no te encontrabas bien y como me dijiste que habías venido con unas amigas y nos las encontrabas te pregunté que si querías venir a mi casa, me dijiste que sí, y de camino en el coche te quedaste frita. Entonces, cuando llegamos a mi casa te subí y te acosté en el sofá, y está mañana como todavía estabas dormida y no había nada de comer he bajado a por comida- joé, no me esperaría este comportamiento de un chico...
- Muchas gracias, no tenías por qué, pero me alegro porque tengo un hambre....
- Toma- dice dándome el café con los churros.
- Tú no quieres??
- No, ya me he tomado algunos por el camino- otra vez esa sonrisa, cómo me transmite tanta simpatía?
Me río y empiezo a desayunar. En cuanto termino le envió un mensaje a Laura diciéndole que estoy bien y que ya le contaré, y también le envió un mensaje a mi madre diciéndole que salgo en una hora de casa de Laura. A ver si con el tiempo y un con el efecto del café consigo acordarme con más detalle de lo que pasó anoche.