Shall we skate|SeungxPhichit

17. Gatito ruso

Por la mañana sentí los rayos de luz inundar la habitación, era hora de levantarse, ya ni siquiera tenia la esperanza de regresar, supuse que eso pasaría cuando resolviera esto, había tomado un baño en la noche en las aguas termales así que solo tenia que vestirme, me aliste y abrí la puerta corrediza... sonreí de inmediato al ver aquella silueta recargada justo a un lado 

-buenos días Kyun Sang ¿dormiste bien?-

asintió -supongo que tu también ¿no es así?-

asentí -¿deberíamos dar un paseo por el palacio antes de reunirnos con el emperador?-

-supongo que no hay problema- 

comenzamos a caminar por los pasillos, si Seung Gil tenia enormes jardines, estos eran lo doble de grandes, estaba impactado con tan bellos paisajes adornados con los copos de nieve que cubrían todo... avanzamos hasta escuchar la voz del emperador hablando con alguien mas 

puso una mano en el pecho del moreno evitándole avanzar -sera mejor que regresemos-

asentí justo en el momento en que note el tono familiar ladee la cabeza, tenia que asegurarme de esto, tome la mano de mi poste y lo jale hasta atrás de unos arbustos mientras le indicaba guardar silencio con una de mis manos

-¡¿estas loco?!- grito en voz baja -nos van a descubrir-

-necesito averiguar algo- respondí en voz baja

nos agachamos tratando de ocultarnos mientras sentíamos las voces acercarse

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-Es un placer recibirlo- hablo el pelinegro con una sonrisa en su rostro

-el placer es todo mio- 

-¿trajiste al gatito contigo?- 

Asintió mientras giraba levemente haciendo un gesto con los dedos, al poco tiempo apareció un chico con el cabello rubio cubriéndole la mitad del rostro, a pesar de eso los bellos ojos color esmeralda resaltaban con una mirada fiera, su tez blanca resaltaba con la vestimenta amarilla típica que portaba

sonrió de lado -que gusto verte Yurio- 

-¡deja de llamarme así Katsudon!- gruño

-¡Yura! ya hemos hablado de esto, compórtate de acuerdo a tu posición ya bastante hice con traerte hasta acá... ahora discúlpate- soltó el de ojos marrones y rostro impasible

bufo levanto unos mechones de su rostro -lo siento su alteza- dijo el rubio rodando los ojos

soltó una risita -es un gusto que hayas domado a la fiera Otabek, llamare a Viktor... ese holgazán sigue durmiendo, esperen aquí- 

ambos hombres asintieron mientras el pelinegro avanzaba con gracia, una vez que lo vieron alejarse lo suficiente

-¡¿que demonios Beka?! ¿vas a decirme que hacer frente a ese cerdo?- grito el rubio

el kazajo de inmediato se encogió de hombros -lo siento Yura, sabes que debemos mantener las apariencias-

-¡apariencias mi trasero! soy tu pareja y debes tratarme como tal ¿de que lado vas a estar?-

-Yura... el te vendió a mi si le demuestro que te trato como mi pareja tendremos problemas y no nos conviene- 

-¡agh! por eso Kazajistan tiene problemas con Rusia-

frunció el ceño -¿quieres quedarte sin sexo por un mes?-

-¿estas amenazándome?- afilo la mirada, sus ojos verdes resplandecían con furia