One Shots Teen Wolf

Scott Mccall

La noche fría caía sobre todo el vecindario, las 3:00 am y yo aun sin poder dormir.

Y díganme ¿Cómo dormir si piensas tanto en esa persona? La cual ni siquiera sabe que existo, acaso ¿vale la pena tanto sufrimiento? Pero si algo se, es que yo tengo la culpa de eso. Mis amigas dicen que le hable, que tal vez este la posibilidad de que le guste, por el hecho de que cada vez que me lo topo por los pasillos de la preparatoria me mira.

Dicen que las miradas hablan, expresan los sentimientos que tenemos, sin embargo yo no lo creo así, si fuera verdad él ya me hubiera hablado.

Tengo la esperanza de que cuando sea la hora del receso, me vea y se hacer que, preguntando si quisiera desayunar con él, pero luego recuerdo la cruel y triste realidad, ¿él se fijaría en mí? _____ la típica chica rara, que prefiere usar jeans que vestidos o faldas, estar al natural que maquillada y sobre todo que no sale de su mundo de fantasía por preferir leer que salir a divertirse como cualquier adolescente normal.

Genial, son las 4:15 am y sigo igual. Pensamientos, pensamientos y más pensamientos, por favor aléjense ya de mí, no me hagan sufrir más. Tal vez deba resignarme a que nunca Scott pensara en mí.

Mientras _____ seguía pensando en que debía dejar ese sentimiento por Scott, en otro lugar un chico, no dejaba de pensar en su chica perfecta, aquella que no le interesa usar vestidos o faldas, ni maquillaje para ser bonita, porque para el ella era hermosa, la chica más hermosa que sus ojos habían visto.

Lo que más le gustaba de ella, era que siempre estaba leyendo, y no le importaba perderse fiestas por seguir en ese increíble mundo que él conocía, al leer.

Por favor Scott – se decía así mismo- deja de pensar en _____, porque ella jamás se fijaría en alguien como yo, somos totalmente diferentes.

Al día siguiente, a la hora del receso, _______ salía a desayunar, como siempre, con un libro en la mano, mientras que Scott iba platicando con sus amigos. Ambos chicos se vieron y decidieron hablarse, pero luego la cruel realidad los invadió con la misma respuesta, nunca se fijara en mí.

"La mente y sobre todo nuestros pensamientos, en ocasiones, llegan a perjudicarnos, sobre todo cuando las personas son inseguras, a tal grado de dejar ir lo que en verdad quieren".