Raw I: Sin Escape [En Edicion]

Enmascarado

La persona tocó la puerta, Paloma y yo corrimos a la cocina y agarramos lo primero que vimos, yo un tenedor y ella un cuchillo. Se escondió al lado de la puerta, y yo me acerqué a abrirla.

-¿¡Quienes son!?- exclamé apoyada sobre la puerta.

-Queremos ayudar- contestó una voz algo grave del otro lado.

-¿Ayudar como?

-Sabemos que están aquí hace tres años, es imposible que aun tengan comida, les traemos comida y armas, abre, por favor.

-¿Como saben eso?

-Ehhhhh... Los vimos entrar.

-No parece que quiera hacernos daño- susurró  Paloma.

Puse mi mano sobre la perilla de la puerta, dudé si abrir o no, y lo hice.

La persona entró, y sus compañeros entraron tras él. El que llevaba las mochilas las dejó en el suelo.

-Vale... no venimos a darles comida, venimos a llevarlos con nosotros.- dijo el que no llevaba nada.

-No pensamos ir a ningún lado- Respondí.

-Si, lo harán - dijo el mismo.

- He dicho que no, no iremos con ustedes.

- ¡Que si lo harán! - alzó la voz.

-¿Por qué tendría que hacerlo?- dije, Paloma seguía escondida tras la puerta.

-Porque yo lo digo.

- ¿Y quien mierda eres tú? - el del rifle lo apuntó hacia mi.

-Soy tu jefe - dijo más tranquilo.

-Jaja no lo creo - reí.

-Si, lo soy- se quitó la mascara - Mariana.

Él tenía ojos marrones, el pelo medio largo y una cicatriz en la mejilla.

-Dios... - murmuré.

-¿Qué? ¿Vas a llorar?-dijo, los otros dos también dejaron de estar tensos.

-No... no es posible... - dije con lagrimas en los ojos.

Paloma salió de su escondite y se puso a mi lado, quedó boquiabierta al ver a Rodrigo parado, vivo, frente a nosotras.

-¿No me extrañaron?- rió - perdona por el show, quería que sea lo más  parecido a una pelicula.

Me lancé  a abrazarlo, y lloré como nunca antes lo había hecho.

-¿Donde estuviste? - preguntó Paloma aun sorprendida.

-No estuve, estuvimos... algo ocupados- dijo Rodrigo mirando a su compañero, el que llevaba las mochilas, también se quitó la mascara.

-¡Dante! - exclamó Paloma - ¿Q- qué te pasó?

-Salvé a Rodrigo de explotar junto a una granada - dijo Dante - gracias a él, ahora tengo esta cicatriz en la cara.