¡Sálvese Quien Pueda!

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Mientras eso pasaba, Itachi y Naruto seguían caminando tratando de encontrar una salida. El rubio seguía aferrado al azabache, quien aunque iba un poco incómodo, no le molestaba ya que para él, Naruto era su segundo hermano.

- ¿Faltara mucho?

- No... no lo sé... pero estos chicos sí que se lucieron

Ambos seguían caminando, cuando escucharon el sonido de un relámpago que ilumino el sitio, Naruto se aferró más a Itachi y este lo abrazo más. Notaron que de una de las vigas había un enorme bulto colgado, el cual abrió lo que parecían ser alas de murciélago y sonrió al ver los jóvenes para dejarse caer al piso.

- I-Itachi...

- Bienvenidos... -riéndose- y adiós...

Itachi y Naruto no entendieron hasta que una parvada de murciélagos comenzó a volar en dirección a ellos, el azabache reacciono tomando al rubio de la mano para empezar a correr.

Mientras el vampiro se reía, Izuna y Lúthien recuperaban el aliento

- Eso... fue... extraño -decía Izuna

- Demos seguir buscando a los demás

- Lo sé, pero, ¿por dónde?

Lúthien vio una puerta y no sabía si abrirla o no, Izuna solo asintió, ¿Qué más podría pasar? La chica abrió con cuidado y ambos se adentraron con precaución. No se percataron de que el Frankenstein se puso detrás de ellos y los empujo a un muro falso.

Deidara y Sasuke seguían huyendo de su perseguidor, lograban escuchar los gemidos de las cabezas que el carnicero tenía en sus manos, pero este los acorralo hasta una pared sin salida

- Hasta aquí... llegaron - con una voz siniestra

El rubio y el azabache del miedo, se olvidaron que solo era un juego, pero era demasiado real. Deidara tanteaba el muro con su mano cuando toco un botón haciendo que el muro girara.

Ambos se sorprendieron e iban a reanudar el camino, cuando dos cuerpos chocaron con ellos.

- Izuna-san, Lúthien-chan - exclamo Deidara

- Sasuke, Deidara-kun - Izuna abrazo a Sasuke- ¿estás bien?

- Si, ¿Dónde están mi hermano y Naruto?

- No lo sabemos -respondió la chica

- Todos nos separamos, pero de ahora en adelante tratemos de estar juntos -hablo Izuna

Todos asintieron y comenzaron a caminar juntos. Mientras tanto, Madara y Minato solo caminaban en silencio a una leve distancia del otro. Luego del beso parecían no tener nada más que decir

- ¿Estás bien, Minato?

- Si... solo pensaba en los chicos

- Están bien

- Lo se... pero...

Minato se detuvo por un momento con la mirada baja, Madara lo vio sobre su hombro preocupado, apenas le iba a hablar cuando escucho unos pasos rápidos. Rápidamente se puso en defensa cuando otro cuerpo lo derribo

- Ita.. ta

Naruto alzo su vista y pudo ver el sombrío rostro de Madara que sobresalía de entre su cabello*

- Ah... una bruja - grito el rubio alejándose de él

- ¿A quién llamas bruja?

Pídela y Yo la PongoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora