teen wolf [os I]

18- Brett Talbot

*Aclaración: hay modificaciones de escena en este OS.*

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No es para nadie un secreto que en Beacon Hills las cosas no andan nada bien, nada, con los "doctores del terror" por ahí fabricando cosas.

Pero para Brett Talbot se complicaron más cuando salió al bosque con Liam Dunbar.

–¿Podrías decirme que esperamos aquí?–preguntó Brett, por décima vez.

–Esperar.

–¿Esperar qué? ¿a que vengan y nos maten?

–Quizás.

Brett iba a reclamarle a Liam por sus respuestas tan cortas, pero una voz en donde se denotaba confusión lo interrumpió.

–¿Brett?–el rubio volteó, pero sólo se encontré con su actual novia.– ¿que haces aquí?

–No, espera.. ¿Tú que haces aquí? Es de noche. Es muy tarde y estas en el bosque sola, ¿en que piensas? Podrías haberte lastimado por ahí y yo..

–¡Wow! –alzó las manos Liam– ¿y ustedes que?

–Es mi novio.

–Si, soy su novio.–frunció el ceño–

Liam rodó los ojos y volteó hacia Brett.

–La esperábamos a ella, Brett.

–¿Como que la esperábamos a ella? ¿No ves que puede salir herida?

Liam vio hacia la chica, y olió su nerviosismo. Volvió su mirada a Brett y de él solo desprendía confusión.

–Oh.. Ustedes.. Tú–vio a la novia de Brett–.. Oh..

–¿Por que parezco el único que no sabe lo que está pasando?

–Brett..–el chico se volteó a ella– Yo..

Una flecha.

Los tres se quedaron en silencio, contemplando la flecha que había caído un árbol más allá de ellos. Alertas.

Después de esa, siguieron más y más. Tratando de herirlos, pero, no era una flecha común y corriente. Era una flecha de los Belmont, unos famosos cazadores (más que los Argent) casi igual que los calavera. Eran muy buenos en su trabajo, y la mayoría de las criaturas sobrenaturales trataban de huir de sus garras, o sus flechas que son como garras para ellos. Cuando caminaban sobre un pueblo se encargaban de eliminar la mayoría de las criaturas y Beacon Hills no sería la excepción.

–Tienes que irte, bonita. Irte ahora.

–¿Por que me iría?–lo vio a los ojos– tú debes saber algo,Brett. Y espero que me perdones por no haberlo dicho antes.

–¿Qu..

No pudo seguir hablando pues, se escuchó la risa de una muchacha. Los tres se voltearon y encontraron a cuatro personas, dos de cada sexo.

–Amor juvenil. Tan puro y hermoso.–sonrió mientras se colocaba bien su arma en el cinturón– Mi nombre es Lively. Me presento, Lively Belmont.

–No nos importa. –gruñó Liam–

–Liam Dunbar, inservible beta de Scott McCall el verdadero alfa. Que tierno que digas que no te importa–borró su sonrisa–, a trabajar muchachos.

Brett colocó su cuerpo delante de su novia, él no iba a dejar que la tocarán por nada del mundo.

–Brett, creo que ella puede defenderse sola–el chico miró confundido a Liam–

Vio a su novia y la chica tenía los ojos de un azul, azul frío y vacío.

No tuvo tiempo de decir nada, una batalla de flechas ya venía hacia ellos.

Todo pasaba rápido, todos hacían movimientos precisos. Y los cazadores eran muy hábiles, al parecer más que un hombre lobo.

–¡Gané!–río una castaña– Ahora, mi dinero. –vio a sus otros hermanos ya que había dejado en el suelo a dos hombres lobo, que aún que lo son el cansancio les consumía.–

Más alejado de ambos, un cuerpo tirado, apunto de dar su último respiro. Al ambos darse cuenta de lo que sucedió, se arrastraron hacia el cuerpo.

–Por favor, no hagas esto–le decía–

–Te amo.

–Lo sé, yo también te amo.–juntaron sus frentes–

–Ayudalos.

–Lo haré–sollozó–, créeme que lo haré.

–Eres mi más grande amor, y jamás cambiará.–se miraron a los ojos– Te amo..–sonrió, antes de dejarse ir.–

–Yo.. yo también.. Te amo, bonita.–sollozo, mientras un mar de lágrimas lo consumía–

Brett Talbot la había perdido, y eso para él era haber perdido absolutamente todo.