one;

331 30 2
                                    

1 año después

Otra noche sin él, he pasado noches enteras pensando en la casi nula probabilidad de que Diego venga, de que recuerde lo mucho lo amo, lo mucho que luchamos, lo mucho que luche para alejar a los demonios que lo atormentaban día a día. Que recuerde todos los <<te amo>>, todos los besos, los abrazos, las caricias, todos los planes... Duele como nada en el mundo. 

– Señorita Dove, le llego esto. – tome en mis manos una invitación.

– Gracias, Monica. – se retiro de mi habitación y comencé a abrir el pequeño papel.

La leí y mi sonrisa abarcaba toda mi cara. Tal vez en la boda del hermano de Diego, lo vea a él. Después de tanto tiempo pensando en él, de estar día y noche esperándolo. Después de tanta espera, al fin lo podré ver, podré volver a abrazarlo, tenerlo cerca e inundar mi nariz con su perfume tan característico. Después de tantas lágrimas, podré volver a ver esa sonrisa con la que tanto soñé.

[...]

Arreglaba por última vez mi vestido, estaba más nerviosa de lo que jamás estuve. Las manos me sudaban, mis piernas flaqueaban mientras me acercaba más a la iglesia. El taxi me había dejado una cuadra antes. 

Entonces lo vi. Estaba ahí parado, con una hermosa sonrisa en su rostro, con un lindo esmoquin negro que se le veía estupendo. Pero había algo diferente en él. Entonces salió ella, una linda castaña, con una hermosa sonrisa. Lo tomó del antebrazo y le dio un beso.

Sentí una gran presión en el pecho y no podía respirar. Las lágrimas salían sin parar de mis ojos, una vez más estaba desmoronándome. Un fuerte sollozo salió de mi pecho. Él es el único al que he amado, no puedo borrarlo de mi mente, aunque lo intente. Después de que la ceremonia comenzó, pensé en irme, pero mi orgullo estaba intacto.

𝕯𝕴𝕰𝕲𝕺 ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora