Raíces

#3 Día a día.

Narra Leonor :

Cuando era pequeña me encantaban las mañanas y más específicamente ver los amaneceres, conforme pasaba el tiempo deje de despertar con entusiasmo, y casi sin darme cuenta comencé a ignorarlos por que mientras más adulto eres menos perseptible, luego me di cuenta de que esa alegría se esfumó y mis mañanas no eran tan motivadoras, como sea igual que hoy como de costumbre cumpliendo con mi estricta rutina me levanté a las 6:00 am y fui a bañarme, arreglarme y desayunar, mis padres insistían en que al menos pasaríamos los desayunos juntos para hablar de nuestros días y problemas, pero normalmente nos saludábamos y lo demás casi era silencio, de vez en cuando cruzábamos miradas amistosas y cuando terminábamos, yo subo por mis cosas y tomo mis cosas para la escuela, y cuando mi padre tiene tiempo me lleva en el auto.

-Como te va en la carrera Leo ?. Dice él mirándome por el retrovisor

-No tengo problemas, todo va bien. Digo para luego sonreír y desviar la mirada ; Después de eso el suele prender la radio para disimular el silencio camino al Instituto.

En mi familia, desde siempre me habían dado la libertad de escoger la carrera que yo decidiera y eso era algo que agradecía mucho, así que decidí como de costumbre a retarme y estudiar "Astronomía", ya que muchos decían era algo difícil pero a decir verdad siempre estuve fascinada con ello, disfrutaba realmente la escuela y trataba de no torturarme con nada que se relacionara al Instituto; Así que además de tener mi imagen asegurada ahí, la única condición que tenía para todo aquel que deseara pasar el tiempo conmigo era no interponerse en mis estudios, no por que pensará que era lo más importante o de eso dependía mi futuro y el resto de mi vida, sino que sentía que ese tiempo era realmente para mi, sentía que era lo único en lo que yo era buena y que a demás me encantaba, Además yo era la firme prueba de que estudiar y tener vida social no era imposible, claro que es verdad que las tareas y proyectos te consumen, pero si realmente sabes ser ordenada y dedicada, todo de alguna manera tiene sentido para mi.

Paseando por los jardines de aquella gran construcción puedo reconocer a casi todos los rostros deambulantes, pero estaba segura de que todos aquellos sabían mi nombre, nunca puedes llamar "amigos" a todo aquel con el que compartes un tiempo y espacio, cada uno tenemos un grupo con el cual encajamos más y en ese grupo, personas con las cuales concordamos casi a la perfección esos son los por poco "verdaderos amigos", así sólo consideraba tener 5 los cuales eran en nivel de importancia: Marco, el chico con mejor gusto musical que ningún otro ser humano, a demas de ser parte de una banda que solo era reconocida localmente, se le atribuían por completo los chistes, él nos mantiene a todos unidos es el que a pesar de cualquier problema nos ayuda la única palabra para describirlo era "amor". Gissel, las personas no la tomaban muy en serio por su apariencia ya que no era el típico estereotipo de lo que la sociedad etiqueta como "linda", pero te bastaba solo hablar con ella un par de minutos para darte cuenta de lo inteligente que era, es de esas personas que cada día te dan una enseñanza que no olvidas nunca, era sabia y sus consejos eran los más acertados, todos la amamos por eso. Bruno, la cabeza y madre del grupo él sabía todo a cerca de todos, nos regañaba cuando la liabamos, se preocupaba por cada uno, y era el primero en apoyarnos con cualquier idea o desición nos informaba de cada fiesta o evento, se encargaba de llevarnos a los mejores lugares para pasarla bien. Camila, era una chica linda en todos los sentidos, siempre positiva y animando a todos, era defensora total de las chicas y en general de cualquier sector, se le podía ver un fin de semana recaudando dinero para la escuela, otro en protesta por el feminicidio o simplemente ayudando en cualquier lugar donde necesitarán de una chica fuerte y abnegada como ella. Y luego estaba Ruben, que de todos es el que siempre tenía problemas, así fueran mínimos él siempre daba de que hablar, era el que le daba ese toque de adrenalina al grupo, no podía pasar un día sin que alguien quisiera golpearlo o los profesores lo reportaran, no era el típico chico rudo por que detrás de esa gran fama que tenía, siempre tenía una respuesta para todo, era listo y eso le funcionaba para salirse con la suya. Esos eran mis amigos, los chicos que ocupaban casi todo el tiempo en mi vida.

Por la tarde, juntos nos dirigíamos a cualquier lugar a comer y hablar de nuestro día o planear lo que haríamos en fin de semana, y después de hacer cualquier cosa que se nos ocurriera, cada uno se iba por su camino el cual casi compartía con Gissel al igual que con su auto, a veces ella se quedaba un rato en mi casa haciendo tareas y compartiendo las poco canciones que enuentra a menudo.

Al caer la noche, cuando Gissel ya se a ido, arreglo todo para el siguiente día, y trato de evitar la "gran ingesta" con la cual eh luchado por superar hace ya algún tiempo.

Hi ! Bueno como pueden notar la historia a avanzado un poco ya que les eh presentado a algunos personajes que sin duda harán de esta historia algo genial.

Si es que les gusta por favor den a la estrellita y comenten <3 xau