Aprendiendo a ser Romántico (Chris Evans Y Tú)

Capítulo 34

"Encerrado en casa todo un dia?" Esa fue la primera pregunta que le hizo su tio, cuando despertó. Se rascó la cabeza, despeinando su cabellera, aun más, y miro a su tio con expresión sombría. No era una excelente pregunta la que le estaba dando. Su tío postizo lo miro esperando los reproches e insultos que podría decirle, pero se sorprendió cuando Chris  solo asintió sin palabras. Se levanto lentamente, acariciando la cabeza arrugada de Cleo y se metió en el baño. Después de media hora bajo el agua, salio y busco algo que ponerse. Un par de jeans desgastados y un sueter con algunos agujeros en la espalda, de tan vieja que estaba, fueron su única opción. Se puso las zapatillas y salio de su habitación. Bajo las escaleras, cuidando de no hacer el menor ruido, y se metió por un pasillo, bajando hacia la cocina. Al entrar, se dio con sus tios que hablaban despacio y cariñosamente. Saludo rápido y se encamino hacia la estufa.

- Ale: Buenos días Chris  – dijo, levantándose – deja yo te serviré el desayuno – Chris  sonrió y dejo la taza para sentarse en la silla que solía usar su padrino.

- Richard: Chris  – dijo – no me dijiste tu opinion respecto a lo que te dije esta mañana en tu cuarto.

- Chris: Bien – solo dijo. Ale se acerco, mirando a Richard y este se encogió de hombros. No tenia idea por que Chris  actuaba así.

- Ale : Si te parece bien… - dijo acercándole la taza humeante de te – Podríamos salir a comprarte algo de ropa… no puedes andar en estas fachas ahora que… bueno frecuentas un roce social…

- Chris: Me haría bien comprar ropa porque tengo la necesidad de comprarla. – tomo una tostada – no tiene nada que ver con mi futuro roce social… no tendré ninguno aparte del que he estado teniendo siempre… - mordió la tostada sin ganas.

- Ale: Pasó algo en la fiesta? – pregunto

- Chris: No lo leyeron en el periodico? – dijo al descuido.

- Ale: Bueno… allí dijeron que… estabas con Tiffany y que te largaste a gritar varias cosas como loco…

- Chris: No fueron cosas a lo loco! – dijo serio – Fue opinar sobre una absurda ley… - miró a su tío – echar a las personas de bajos recursos del barrio – bufó – si tu hubieras estado ahí tia, los hubieras insultado a todos de la peor manera… daban asco…

- Ale: Qué? – dijo la mujer – quieren……

- Richard: así es… – dijo– ya había escuchado algo así… bueno será cuestión de esperar a ver lo que hacen… - dijo resignado.

- Chris: Esperar? – dijo, levantando la voz – estás loco si piensas que tenemos que esperar… tenemos que actuar ahora! No debemos dejar que esa maldita ley sea promulgada!! Eso será el principio del fin para algunos con problemas como el tuyo… si eso sucede, como dije anoche, antes de cabrearme, esto se convertirá en una bola de nieve que nos llevara a todos a la mierda!! – y golpeó furioso la mesa.

- Richard: Cuida tu lenguaje muchacho! – dijo serio – Entiendo lo que dices…, pero no todo se puede hacer así Chris.

- Chris: Por qué no? Acaso te sentarás y esperarás ver pasar el cadáver de tu enemigo? Dejarás que otros hagan el trabajo que tú debes hacer? Que otros te defiendan, porque tú no quieres estar inmiscuido?

- Richard: No se trata de eso… - dijo, algo mortificado.

- Chris: Entonces explícame por qué no quieres unirte a una lucha!!

- Richard: Qué te pasa? – dijo extrañado del comportamiento de su sobrino.

- Chris: Es que… estoy harto de que gente como esa maneje la vida y el porvenir de las personas como marionetas!! Anoche mismo me dieron la oportunidad para pelear contra estos imbéciles que se creen con derecho a dirigir nuestras vidas… El padre de Ella es legislador… podremos hacer una ley de igualdad… yo estaré apoyándolo… dónde estarás tu tio?