Capitulo IV

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Ya tenía dos años con Kafra y lo escuchaba hablar en mi mente, con una voz gruesa y varonil, de solo escucharlo se me erizaba la piel y la sentía arder, me complacía en todo, desde tener la mejor suculenta comida de desayuno, hasta poseer las joyas más hermosas del planeta. Después de que él llego a mi vida, jamás supe que era necesitar algo material pero aun mi cuerpo pedía a gritos que ese ser me tocara, me amara de una manera más humana, pero era imposible el no era humano y jamás lo seria. Nunca pude estar tranquila había algo dentro de mí que me decía que esto era malo que destruyera ese florero, pero no podía ya sin él no podía vivir. Empecé a sentirme débil, cada vez con menos apetito y empezaron a ocurrir cosas terribles, un compañero de trabajo vino a mi apartamento a traerme un obsequio, siempre tuve la impresión de que yo le gustaba, al irse vi a Kafra irradiando tanta rabia y odio que sentí miedo por mi vida, resulta que al día siguiente me entere que mi compañero tuvo un accidente en su vehículo, perdió los frenos y se estrello con un muro, casi pierde su vida, al enterarme de esto supe que había sido él y comencé a tener pánico.

Kafra se volvió posesivo trancaba las puertas para que no saliera del apartamento, mi auto no quería encender, a veces cuando le gritaba que me dejara en paz amanecía con tantos morados en mi cuerpo que daba miedo y asco verme al espejo,  cada día me sentía más enferma, sin vida y él en cambio se veía más fuerte, la flor que crecía que me representaba en ese florero se veía más grande y radiante, destacaba en medio de ese matero viejo y con esas flores opacas, todo esto me parecía extraño.

Comencé a investigar en la red, sobre todo lo que me ocurría, logre dar con artículos que se parecían a lo que me pasaba, entendí que Kafra no era un ser de amor y complaciente, en cierto modo lo era pero todo lo hacía para conseguir un beneficio, el cual era obtener mi alma. Kafra absorbía mi energía, mi vitalidad, por eso era la razón de que la flor creciera sin ningún tipo de cuidado de mi parte, en ella se representaba toda mi energía y mi vida, el me estaba consumiendo. Pero había algo más terrible en esta historia, que yo no tenía hijos así que si moría sin dejar descendencia el desaparecería de este mundo, por esta razón comencé a preocuparme, me volví paranoica y me termine de alejar del mundo, en pocas palabras me desconecte, tenía miedo de salir y conocer a alguien que Kafra utilizara para yo tener un hijo y después morir dejándole esta maldición a mi descendencia. Tenía que hacer algo acabar con él, pero ese asqueroso florero no podía destruirlo. Pero entre mis pesadillas, donde me advertía que era de él y de nadie más, que jamás escaparé de su poder y en la vida real verlo cada vez más seguido y sin dejarme poder pensar con claridad, simplemente me quedaba sin opciones, sentía que perdía la estabilidad en mi mente, me estaba volviendo loca no sabía identificar lo real de lo irreal.


HOLAAAAA!!! recuerda comentar si te va gustando mi historia, y si no también deja tu opinión. ;*

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