Siempre Tú ©

Parte 10- Alice

Alice

¡Estoy feliz! Hoy es mi primer día de trabajo, al principio pensé que Johann no me pondría a cargo del departamento pero después de la cena con los japoneses se convenció de que yo estaba preparada para este puesto y terminó aceptando, además de que me puso una enorme oficina, no cerca de la de él porque "invadiría su privacidad", todos en las oficinas saben que el señor Meyer engaña a mi hermana o en este caso a mí, le arme un escándalo en casa cuando lo atrape teniendo sexo en su oficia con una tal Nellya Volkova, le deje muy claro que mientras yo trabajara aquí tendría que dejar sus aventuras porque si a mi hermana no le importa que le vean la cara de idiota a mi si y mientras yo este suplantando a Alisson me tendrá que respetar.

-Alice, es hora, sabes que odio retrasarme- Escucho su voz al otro lado de la puerta, ya me acostumbré a que sea mandón y autoritario conmigo.

Me coloco unos aretes de oro, rápidamente miro el espejo y me gusta lo que veo una mujer bonita y elegante podría jurar que soy Allison pero se que estoy muy lejos de ser como ella y no lo deseo; salgo rápidamente de la habitación para encontrarme con esos hermosos ojos azules llenos de misterios y secretos ¿Quién será realmente Dimitry Ivánovich? ¿Habrá un hombre bueno detrás de todo ese egoísmo que muestra a diario?

-Ya estoy lista mandon vámonos- Digo cruzando de brazos y los dos bajamos la escalera juntos, Dorotha nos da nuestros abrigos, ella es muy linda y me ha tratado de lo mejor, creo que todos los empleados aquí son amables, me pregunto si habrán firmado algún contrato que les impida hablar acerca de mi usurpación; salimos del lugar y apenas cruzamos la puerta de entrada Johann toma mi mano y siento una pequeña opresión en mi pecho, subimos al auto y este se pone en marcha. Mientras miro por la ventana me pregunto cuando podré conocer este enorme país, aunque sea solo un poco, quizá él pueda acompañarme a visitar algunos museos y lugares históricos por aquí, si claro como si el quisiera perder su tiempo conmigo, quizá pueda preguntar no pierdo nada.

- ¿Johann? - Pregunto con un poco de timidez.

-Alice- Responde frío y sin mirarme, no entiendo como puede ser así, algunas veces me mira sin parar y responde seductoramente a mis gestos y otras veces como ésta ni siquiera me mira.

-Yo...Yo solo quería saber si puedo ir a conocer algunos lugares cerca de aquí, quizá algún museo o algún lugar que tenga historia. -

Me mira sorprendido y esboza una pequeña sonrisa.

-Alice, todos los lugares aquí son históricos, pero si quieres conocer algún lugar en especial, dime y yo te acompañare, no puedo dejar que mi esposa ande sola por las calles, no hablaría bien de mí. -Su mirada se fija de nuevo en la ventana y me quedo atónita por un momento, sin palabras hasta que finalmente puedo pronunciar algo.

-Enserio lo harías? sería perfecto, gracias Johann de verdad gracias- Por impulso tomo su mano, él gira rápidamente a mirarme y yo hago lo mismo, nos quedamos así un par de segundos, mirándonos como si jamás nos hubiéramos visto, es como si en este momento solo existiéramos él y yo.

La puerta del automóvil se abre y los dos reaccionamos, él se aclara la garganta y baja del auto para después brindarme su mano y bajar yo también, empieza el acto y me toma de la mano para entrar a la oficina, nos dirigimos al elevador privado y cuando las puertas están a punto de cerrarse una mano interviene, es la mano de una mujer; levanto la mirada y la veo, mi cuerpo comienza a arder y mi seño se frunce al verla, Nellya Volkova, la amante de Johann.

-Disculpen, no les molesta que valla con ustedes, el elevador público es muy incómodo- Sonríe y me mira de arriba a abajo, maldita sin vergüenza. Meyer asiente con la cabeza y yo me cruzo de brazos, mientras el elevador sube, la zorra Volkova intenta tomar la mano de Dimitry, pero en un arranque de ira me coloco frente a Dimitry y le doy un beso en la mejilla, me mira sorprendido y me toma de la cintura siguiéndome el juego.

- ¿Mi amor,  podemos ir de fin de semana  a conocer la ciudad ? - Le sonrió y veo en su mirada algo de diversión.

-Por mi bella mujer lo que sea- me toma de la cintura y deposita un beso en mi mejilla, me giro a ver a esa mujer mirándola de arriba a abajo y sonrió aún más, ella se cruza de brazos y vuelvo a colocarme a un lado de Johann sin soltar su mano.

El elevador se abre y la mujer esa sale rápidamente enojada y yo me preparo para lo que Meyer me tenga que decir.

- ¿Y bien? ¿Qué fue esa escenita de celos Alice? - Dios ¡CELOS! no fueron celos solo fue...rabia de saber que con esa le pone el cuerno a Allison.

-No fueron celos Meyer, por favor, no te creas tan importante, solo que esa mujer no es de mi agrado y bien sabes por qué además estoy haciendo que respete a mi hermana, no me gusta que le veas la cara de idiota.-

-Cierra la boca que cualquiera te puede escuchar y no quiero rumores estúpidos, ahora vete a trabajar, en la noche hablamos de nuestro fin de semana. - Se da la media vuelta y se va, dejándome sin habla nuevamente, me llevara de paseo encerio.

Es maravilloso.

Johann.

De paseo en Alemania, en qué carajo estaba pensando, pasearme con Alice por la ciudad eso no es normal en mí, pero después de la escena que armó en el elevador fue imposible decirle que no. Nellya estaba furiosa y no la culpo, Allison jamás me hizo una escena de tal magnitud, y aunque Alice diga que no son celos yo estoy seguro de que lo fueron, recuerdo su beso en la mejilla y sonrió sin darme cuenta, con Alice no se sabe que podrá pasar, es vivaz y eso es algo que no había visto en una mujer desde...

No me gusta el rumbo que toman mis pensamientos así que apresuro mi paso para llegar a la oficina y distraerme en mi trabajo, no debo pensar en nada mas, aunque pensar en Alice desnuda en mi cama no me hace daño, la deseo y yo jamás me quedo con las ganas de probar lo que deseo, ella es mi próximo objetivo y cuando me aburra de ella simplemente la mando de nuevo a Estados Unidos, aunque presiento que este año será uno de los más entretenidos de mi vida con esta pequeña viviendo bajo mi techo y provocando toda clase de pensamientos pervertidos en mí.
Poco a poco me iré metiendo en su mente, llegaré a un punto donde ninguno de los dos pueda resistirse a cumplir sus deseos, la haré mía y le haré olvidar las caricias que le hayan dado en el pasado, en el momento en el que me apodere de su cuerpo la haré desear mas y mas de mi hasta consumirlos el uno al otro. Maldición estos pensamientos me excitan tanto que hacen que la mejor parte de mi cuerpo despierte y se mantenga dura.
La puerta de mi oficina se abre y veo a una sensual Nellya Volkova entrar, con cuidado cierra la puerta y comienza a desabrochar su vestido para después dejarlo caer al suelo, su ropa interior acentúa bien sus curvas, comienza a acercarse a mi escritorio y se posa encima de mi yo respondo de un solo movimiento y comienzo a besarla, el pensar en Alice me excito y que mejor que esta mujer para quitarme las ganas, me imagino a Alice sentada sobre mi pienso que es ella cuando la desnudo y entro en su cuerpo, el pensar en ella me vuelve completamente loco y no puedo parar cada uno de mis pensamientos se posan en ella.
Alice
Alice
Alice
-Alice-
Nellya se levanta furiosa y yo regreso a mi realidad.
-¿Quien mierda es Alice?- me grita y comienza vestirse.
-¿Qué de que estás hablando?- respondo un poco desorientado.
-Dijiste su nombre mientras lo hacíamos, eres un maldito Meyer.-
Mierda mis pensamientos me traicionaron y sin darme cuenta dije su nombre, al menos no sabe quién es Alice.
- Alice es...No es nadie ahora lárgate no quiero una escenita con las de mi esposa me basta- subo la bragueta de mi pantalón y veo a una Nellya furiosa salir de mi oficina, no puedo creerlo Alice se mete hasta en mis pensamientos más pervertidos no puedo sacarla de mi mente esa mujer tiene que ser mía.

Hola!!! Ya a los 10 capítulos les está gustando?

Saludos!!!
SLSMendoza. 😘