Teoría del Caos [exo/mafia]

Fuera de Control

TEORÍA DEL CAOS

CAPÍTULO ONCE - FUERA DE CONTROL

Silencio.

Todo estaba silencioso en la cocina del apartamento que Kyungsoo y Jongin compartían. El más alto aún permanecía parado en la puerta, mirando al mayor – que estaba sentado en la mesa – mientras esperaba una respuesta.

Esperando para ver cuál de los dos – Kyungsoo o D.O. – estaba allí.

El mayor levantó la cabeza lentamente, el rostro – antes escondido entre sus brazos – estaba rosado y húmedo denunciando que lloraba. Sus ojos hinchados miraron al moreno cerca de la puerta durante algunos segundos antes de que su voz se desprendiera, ronca, de entre sus labios "¿Jongin?" El mayor llamó, intentando sonreír.

Y entonces Jongin suspiró, de cierta manera aliviado... Porque era Kyungsoo quien estaba allí.

El moreno dio pasos rápidos hasta el chico pálido y tiró de él delicadamente por el brazo para un abrazo. Kyungsoo mordió su labio inferior y sollozo, comenzando a llorar nuevamente abrazándose al menor, sin importarle que el cuerpo de Jongin estuviera cubierto de hollín y sudor.

"¿Qué ocurrió?" Kyungsoo murmuró contra el cuello del más alto, preocupado con lo que habría ocurrido para que el mismo estuviera en ese estado.

"Me pregunto lo mismo," El moreno murmuró, ignorando la pregunta del más bajo. "¿Qué ocurrió contigo?" Preguntó en un susurro, agarrándose del cuerpo delgado frente a él.

"Una mujer apareció... Ella dijo," Kyungsoo sollozó, no consiguiendo controlar el llanto, recordando las escenas frescas en su memoria. "Nah Yonghee, era su nombre... Ella dijo que era tu amiga y como tú no estaba, y-yo no sabía como actuar... Ella dijo que quería huir contigo, que nadie sabía que ella estaba aquí y que era el momento oportuno para que ustedes huyeran." Kyungsoo se hundió aún más en el abrazo y escondió su rostro contra el pecho de Jongin. "Ella quería llegarte lejos, lo siento, Jongin, lo siento, yo lo llamé..."

Y entonces Jongin se congeló.

"¿Dónde está?" Jongin preguntó contra el cuello del mayor, de manera firme y directa.

"Y-yo no lo sé... Desperté hace poco tiempo, lo siento..." Kyungsoo respondió aún intentando esconder su rostro contra el cuerpo del más alto, aunque el mismo intentara alejar al mayor de él, delicadamente.

"Mírame a los ojos," Jongin pidió, su voz seria asustando al otro. "Kyungsoo, mírame." El mayor obedeció y sus ojos se encontraron. A Jongin no le gustaba ser demostrativo, pero el pavor que sentía era visible en su voz, temblorosa. Nada estaba bien. "¿Dónde está? ¿Qué ocurrió exactamente?"

Kyungsoo se ahogó con su propia saliva, asustado, dando algunos pasos hacia atrás hasta encontrarse con la pared. No demoro mucho para que el menor se acercara a él, acorralándolo contra la superficie helada de la cocina.

"Dime lo que ocurrió." Jongin pidió una vez más, haciendo a Kyungsoo suspirar, temeroso.

Normalmente, cuando algo así ocurría, Jongin lo acogía en sus brazos y le decía que todo iba a estar bien. Él le pediría a Kyungsoo que no pensara en eso y que ambos fingirian que nada había ocurrido, muy diferente a lo que estaba ocurriendo ahora. El más bajo temblaba, intentando forzar a su memoria a recordar lo que había ocurrido, pero todo lo que sabía era que se había desesperado con la idea de ser dejado por Jongin y que había, por eso, llamado a D.O.

"Lo siento, Jongin," Kyungsoo murmuró, asustado. "Le pedí que no la lastimara, yo le pedí, pero yo... Él, no sé lo que hizo. Sólo dejó un papel diciendo que ella nunca más volvería a molestarnos, pero su auto aún sigue estacionado allí y no se-"