Senri Shiki estaba acostado en el sofá mordiendo su barra de chocolate y sumergido en sus pensamientos, su cerebro no dejaba de trabajar las más locas conclusiones, por qué tanto misticismo entre su novio y primo, algo le estaban ocultando pero el oji azul no sabía que era, estaba a punto de gritar de frustración pero un golpe en su frente lo saca de su ensimismamiento.
- Oye, si sigues comiendo así te pondrás gordo – dijo un apuesto rubio mostrando su trabajado cuerpo, pues había salido de la ducha
- No me importa, tu nunca me dejarías, me amas – dice el menor tirándole un beso al aire
- Sabes... llevamos casi medio mes aquí y no hemos turisteado, porque no salimos hoy – sugirió el oji verde
- Valeee, ya tengo el lugar perfecto al que quiero ir – poniéndose de pie rodea con sus esbeltos brazos el cuello de su pareja y lo besa – mmm, chocolate y menta, mi sabor favorito – nuevamente lo besa – sabes algo querido, estoy hambriento – dando un salto trepo al mayor enredando sus piernas en las caderas del contrario
- Creo que yo también – dice soltando una risa el rubio
Llegaron a su habitación a tropezones, no perdiendo el tiempo cerraron de un portazo la puerta y la aseguraron, Takuma dejó caer a su amado esposo sobre la cama y sin más ataco nuevamente la boca del menor, este solo podía emitir quejidos de placer, Shiki no queriendo quedar atrás empujo al hombre mayor de espaldas a la cama y empezó a dejar un camino de besos por su rostro hasta llegar a su fuerte cuello dejando en el marcas de propiedad, fue bajando hasta llegar al valle que ocultaba su hombría, al llegar al lugar donde estaba su tesoro no dudo en tomarlo en su boca, dando un cuidado casi magistral para endurecerlo, cosa que hizo al instante, a Takuma le gustaba el lado salvaje de su pequeño gato, pero él no tendría toda la diversión, el rubio tomo del tobillo a su alma gemela e intercambiaron posiciones ahora el turno de Takuma de amarlo, se deshizo de la ropa que sobraba en el cuerpo del más pequeño y se hizo de él, marcándole todo en cuerpo, Senri no podía más – Tómame ya... no me tortures - decía mientras el mayor engullía su masculinidad – cariño si esto apenas comienza – dijo el mayor – bajando sus manos hacia el cálido hogar que le esperaba – vaya... vaya, alguien está realmente desesperado aquí abajo- decía Ichijo mientras palpaba la muy húmeda entrada, pasando un dedo cerca de la fuente de dicha humedad e insertándolo – te gusta lo que te hago, pequeño – decía burlándose de la necesidad de su compañero – basta ya Takuma, fóllame yaaaa – y sin más el mayor se separó del menor colocando sus piernas en sus hombros y penetrándolo de golpe, el menor siseo por la abrupta invasión pero empezó a seguir el ritmo de las embestidas, sus caderas se movían solas – maaaáss- pedía – más duro... maas profundo... ahí....justo ahí...Ta..kuma, joder dame maás – gemía entrando ya en la inconciencia, el mayor hizo sus movimientos más rápidos, más erráticos, más certeros y sin mas el de cabello marrón se vino entre sus estómagos, Takuma estaba cerca sentía sus bolas tensarse y un escalofrió en su espina dorsal, estaba cerca, su cuerpo se tensó – jo..oder tan apretado vo..oy a – embistió de nuevo más fuerte y exploto en el interior de su esposo, beso salvajemente a Shiki que sus manos quedaron tatuadas en las caderas del chico y cayó sobre el aun sin salirse de ese caliente lugar – te amo – dijo Shiki – yo también - contesto el rubio, y dándole el último beso del día, sucumbieron ante el sueño.
Al día siguiente
La pareja Ichijo – Senri se estaba preparando para su día, cuando Shiki le dice a Takuma a quien se topó la noche pasada
- Oye Ta-chan, tu recuerdas al chico que vivía al lado de mi en los dormitorios de la escuela de Artes – dijo el menor mientras acomodaba su bolso de viaje
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LAS DOS LUNAS
FanfictionDOS PERSONAS COMPLETAMENTE IGUALES Y TAN DIFERENTES A LA VEZ PODRÁ NUESTRO PROTAGONISTA VER A SU VERDADERA LUNA