Marioneta

Cristal empañado

Rachel

El sonido del despertador me asusto anunciando que hoy era mi primer dia de clases...
Me sente en la cama mirando hacia la ventana el clima estaba acorde a mi estado de animo: lluvioso.
Logre levantarme y bajar hacia el comedor.

Buenos dias - saludo mi madre.
Buenos...mmmmmghhh - balbuceo Lenore mientras bostezaba.
Respondi el saludo y me serví un plato de cereal aun adormilada, despues de desayunar subi a mi habitación para vestirme, tome lo primero que encontre, sinceramente no me importaba mucho.
Baje a la sala y tome mis cosas y subi al auto.

¿Lista? - pregunto Lenore encendiendo el auto.

No...

Tranquila, ¿que es lo peor que puede pasar?.

No lo se, ¿que tal que cae un meteorito?

No creo que eso pase...
Unos minutos mas tarde se estaciono frente a un edificio alto que la lluvia hacia ver muy lúgubre.
Trague saliva pesadamente y baje del auto despues de despedirme de Lenore.
Entre al edificio y me quede parada un momento en la entrada antes de ver a lo lejos la puerta donde se suponía era el aula a donde debia ir.
Subi por las escaleras y empuje la puerta la cual crujio al abrirse, no habia nadie asi que me sente en la parte trasera al lado de la ventana, con suerte nadie me vería.
Comenzaron a entrar los alumnos y se sentaron en lugares al azar, estaban hablando entre ellos, por suerte nadie notaba mi presencia, hasta que un hombre de traje hizo su aparición y arruinó todo.
Me miro a traves del cristal  empañado de sus anteojos y sonrio.
Lo reconocí de inmediato, el enseñaba en mi anterior escuela, unos grados superiores al mio,sinceramente era la ultima persona que esperaba encontrar aqui.

Rachel - dijo y su voz sonó por todos lados haciendo que todos voltearan a mirarme - no esperaba verte aqui - continuo - ¿Como estas?

Ehh b-bien...
¿Acaso el sabría por que me mude?

Chicos, ella era una estudiante de la otra escuela donde enseño.

¿Y por que te mudaste aqui? - pregunto una voz entre los oyentes.
Esa pregunta evidentemente desató la curiosidad de todos que continuaron haciendome preguntas que  no llegue a escuchar...
"¿Por que te mudaste?"... ¿que debia responder?...
Senti unas horribles ganas de llorar que trate de reprimir pero me era imposible...no podia decir o hacer nada por que comenzaría a llorar irremediablemente....necesitaba un milagro...

La puerta se abrio violentamente.
Lamento el retraso ¿puedo pasar?... - una voz femenina y entrecortada interrumpio todo.
Levante la mirada para ver a quien debia agradecer.
¡Era ella! Sa...¿Sariha? Es un nombre raro.

Sahira, es tu tercer retardo del mes - dijo el profesor molesto.

Lo se...lo siento...

No importa, pasa.
Entro y se sento a poca distancia de donde estaba yo, por un momento dudo pero despues me miro y sonrio mientras me saludaba con la mano.
Suspire aliviada...todos habian perdido el interés en esa tonta pregunta que yo no podia responder...
¿Por que te mudaste aqui?...
Por que no puedo volver a esa ciudad...por que tuve que desaparecer...