Un Amor Qué Trasiende Barreras

Capitulo 6

Lágrimas del corazón

El fin de semana había transcurrido lento, Marinette había aprovechado para realizar todos sus deberes estudiantiles, mientras se encargaba de revisar algunos arreglos para la obra que ella y sus compañeros harían.

No había visto a Chat todo el fin de semana ya que la ciudad estaba muy tranquila, a ella esa tranquilidad le gustaba ya que también podría visitar a su padre en el hospital.

Después de lo ocurrido el día que su padre fue internado, no podía andar sola ni un solo momento así que pido a su mejor amiga que la acompañara a visitar a su padre al hospital.

Luego de una caminata de 20 minutos, y unas cuantas bromas sobre la obra, Allya y Marinette habían llegado al hospital en donde Sabine y Tom se encontraban. Al entrar al hospital pudieron ver a Sabine saliendo de la sala en las cual Tom estaba.

Mamá dijo la azabache al verla; con una sonrisa Sabine la recibió, era una alegría poder ver ale su hija fuera de la casa y mucho más en la compañía de su gran amiga.

Como están chicas -dijo abrazando a las jóvenes- es bueno verlas.

Estamos bien señora, gracias por preguntar, la joven de piel canela contestó  muy alegremente.

Como está papá?  Marinette estaba impaciente por saber sobre la salud del hombre que la amaba tanto.

Esta progresando muy bien dijo la amaba mujer con mucha tranquilidad,  aun no despierta pero es mejor así. Si gustan pueden pasar a verlo dijo la amable señora. Tomándole la palabra las jóvenes pasaron a la habitación casi blanquecina en la cual se encontraba Tom.

Marinette se quedo estupefacta al ver a su padre tendido en la camilla, sus ojos se pusieron cristalinos al notar al gran hombre que permanecía dormido y sin probabilidades de reaccionar pronto. No pudo evitar derramar unas lágrimas. Al ver edad reacción Sabine y si Allya prefirieron dejarlos solos. Sabine sabía que su hija adoraba  a su padre y a pesar de que Tom estaba dormido el podría escucharla o por lo menos sentir su presencia.

Cuando Marinette estuvo sola en la habitación no pudo contener más las lágrimas,  extrañaba mucho mucho a sus padres, y ver así a su papá era muy duro.

Tom era un hombre fuerte y de gran valor, Marinette siempre lo vio como su héroe pero para ella, verlo así era muy fuerte, no veía sus hermosos ojos verdes, su rostro que siempre tenía una tierna sonrisa para su hija, no estaba iluminado por ella. Contrario a eso sus ojos estaban cerrados y sus labios quietos, su rostro tranquilo, se notaba pálido ya que el color de sus mejillas el lo obtenía de su trabajo diario, de sonreírle a sus clientes, de alegrar el día de su visitas y sobre todo del amor que recibía de su familia.

Papá, yo te extraño mucho y te necesito, por favor recuperate  pronto,  la panaderia va muy bien pero no es lo mismo si no estas tú  -sonrió - tu le das mucha alegría a tus clientes, por favor, regresa pronto.
.......

La hora de las visitas terminó pronto, Marinette y Allya debían retirarse ya que tendría que preparar sus materiales escolares. Ladybug debía salir a patrullar sola, eso le ayudaría a despejar su mente, Chat noir debía odiarla por rechazarlo de tal forma.

El camino a su casa fue silencioso, a regresar a la casa y ver todo en penumbras, la hizo sentir muy mal, sus padres no estaban allí y ella se sentia sola.

Tratando de no llorar comenzó el camino hacia su habitación, Tikki salió de su bolsa al sentir que estaban solas. Marinette una vez estando en su recamara pudo visualizar todo lo que ella tenía,  observó  las fotos de Adrien al igual que las de su familia, en la su mesa de trabajo, se encontraba abandonado el gorro que ella había comenzado a hacer para Adrien, sonrió con tristeza al recordar lo entusiasmada que estaba cuando compro los materiales para este regalo.