Tan rápido como un disparo la tarde llego a nuestro día y él señor G decidió pasar conmigo charlando todo él día, pero yo tenia una cita a la cual moría por asistir pero era imposible así que le llame a Max para decirle que fuera en mi lugar a disculparse con A, él aceptó sin duda y así pasamos la tarde él señor G me contaba sobre sus cacerías y aventuras después de alejarse de la sociedad y yo muy intrigado escuchaba, me parecía gracioso cuando actuaba cada personaje y también cada vez que mencionaba a alguien muerto decía él ahora muere bajo él sol, al parecer era su lema pero no quedaba mal, continuaba la tarde hasta que se convirtió en noche y no recibia la llamada de Max de que había ido y le avisó de mi impedimento a la señorita A, pasaban las horas y me empezaba a asustar ya que Max era muy importante para nuestro siguiente golpe, así que en medio de la noche tome un arma y me fui en la camioneta del señor G a la casa de Max, durante él camino sabia que algo andaba mal ya que la letra de la carta no era de A ni de ninguna otra chica que conociera, cuando llegue a casa de Max en su puerta estaba escrito en un papel Misisippi 1174, rápidamente recordé que esa era la dirección de aquella vieja fábrica de zapatos la cual estaba clausurada, rápidamente tome él caminó que sabia y algunos atajos para llegar mas rápido y salvar a Max pero ¿de quien? ¿quienes me querían secuestrar? Mas bien ¿quienes sabían que sigo vivo?.
Llegue a la fabrica y me baje muy silenciosamente no quería llamar la atención, logre subir por unas escaleras que daban a la parte superior de la fabrica, cuando subí logre ver una ventana por donde pude entrar sin problemas, todo era muy oscuro y yo sin linterna tan solo sentí como me golpeaban por atras y me desmayé
