capítulo 4: ayuda

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Salí corriendo de ahi, no podía creer que mi amigo no estuviera vivo.
Cuando regrese a casa estaba confundido despues de lo sucecido, no sabia si me estaba volviendo loco o si estaban tratando de volverme loco.
No había nadie en mi casa solo yo y me sentia como un psicopata, todo a mi alrededor cambiaba de manera constante, ya nada tenia sentido.
Me iré a acostar un rato a poner mis pensamientos en orden.
Me dormi un rato, ahora estaba en la carniceria y ahi estaba el carnicero, tenia un cuchillo en mi mano, me dio la carne y cuando él se voltio lo tome por la espalda, estaba muy sudado y tenia los guantes llenos de sangre, deslize lentamente el cuchillo por su cuello y se comenzó a desangrar lentamente y de repente me desmayo, comenze a convulsionar.
Desperte, sin duda habia sido un sueño bastante raro, pero ¿si en realidad no fue un sueño? y ¿si yo lo hize?
Alguien comenzo a tocar la puerta al abrirla, estaba el policia de la otra vez, dicen que ahora  tienen las suficientes pruebas. Me pusieron las esposas y me  llevaron a la comisaria
He pasado  ya tres meses  aqui encerrado desde la muerte del cárnicero o hoy es el día del juicio,  el día en el que determinarán mi paradero, pero ni siquiera yo se si en verdad no lo hize, me llevan a la corte esposado paso en medio de todos, en los asientos veo a mi madre y junto al ella mi hermana, la verdad es que siempre he pensado, que mi hermana no existe casi nunca esta y cuando la veo me odia, mi madre apenas y le habla, tal vez sea también un producto de mi imaginación.

El juez se sienta y comienza hablar de lo cual no pongo ni la mayor  atención estoy tan distradio, no puedo dejar de pensar en todo, sin embargo, algo me distrajo a un mas y fue la presencia de mi amigo Damasio crei que estaba muerto tan solo me desconcertaba un día estaba muerto y al siguiente no, me quede ido, solo veía que la boca del juez se movía. Hasta, que dijo, --todos de pie, el acusado ha sido declarado inocente a falta de pruebas suficientes, se podrá ir-.

lagunas de oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora