Carta número 1♡

506 60 6
                                    

Tantos años en soledad no fueron buenos pero tampoco tan malos ya que con tanto tiempo a mi disposición y sin nada más que la niebla como mi única compañera me tomé tanto tiempo en pensar y en crear ideas locas, tan retorcidas y unas cuantas tan misteriosas que ya no sabía ni que era ética ni que era ser pagano, que era tiempo o que era alegría, tristeza o enojo, sólo vivía por vivir. No recuerdo bien si en aquel barco pasaba el tiempo tan rápido o tan lento que era tortura pero lo que más recordaba, lo que más mi alma pedía era encontrar algo, alguien que de alguna manera quisiera que un viejo esqueleto como yo se convirtiera en uno de sus nakamas. Alguien que de alguna manera me llevara a cumplir mi promesa.

¿Puedes creerlo Luffy-san? Estaba tan feliz de que me quisieras dentro de tu banda, de que fueras tan simple con tus palabras y que con una sonrisa me dejaras entrar en tu corazón. Me alegraba que me quisieras a pesar de no tener ojos, unos labios o cualquier órgano; en serio me alegraba ser parte de ustedes.

-¿Estás mejor?- Me preguntaste después de aquella alborotada fiesta en Thriller Barck, cuando todos estaban dormidos. Ese día me sentía de muchas maneras.

-Sí, gracias Luffy-san.- Miré la luna y aquella melancolía volvió a mí, te diste cuenta y me tomaste de la mano, fue tan raro aquello de sentir la calidez de una mano que sentí los huesos de mi cara arder.

-Entonces... Laboon te sigue esperando. Eso es realmente genial, te aseguro que se ha vuelto demasiado fuerte.- Reíste al cielo y seguías tomando mi mano, en ese momento me pareciste una persona tan alegre, volviste a llenar el extraño vació en mi corazón aunque, yo no tenía uno en ese entonces y mucho menos ahora, yohoho.

-Ya lo creo... Gracias.- Te agradecí con sinceridad, no sé que estaba pensando ese momento, sólo sentía nostalgia y felicidad mezcladas creando un mar que se movía ferozmente dentro de mí.

-¡Oe Brook!- Voltee ha verte y la gran sorpresa que me lleve esa noche fue tan descabellada en ese momento para mí, que todo se paralizó, el mar, las personas y yo. Me envolviste en tus brazos dándome más contacto y más calor del que recordaba, al parecer fuiste tú quien me refrescó la memoría.- Ya eres mi nakama, ya puedes ser feliz de nuevo ¿bien?

No respondí, ¿un viejo esqueleto podía tener sentimientos? ¿en serio un viejo esqueleto podía llorar?
Me quedé abrazado a ti tal vez por unos largos minutos hasta que caíste rendido. Sí que me dejé llevar aquel día pero agradecía a los seres celestiales por ponerte en mi camino.

¿Te acuerdas Luffy-san?

¿Todavía te acuerdas de nuestro primer abrazo?

-Carta entregada.

Melodía De Violín.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora