-Pasta, vino y chupitos de ron para después- me espera en el pasillo cuando entro por la puerta de casa y ruedo los ojos al verlo con dos botellas de alcohol bajo el brazo y dos platos de pasta en las manos. Cierro la puerta una vez dentro y me cruzo de brazos en el sitio mirándolo con una ceja levantada. Me es imposible sonreírle al verlo.
-¿Aun no he entrado en casa y ya quieres emborracharme?-
-Solo necesito quitarte ese mal carácter que se ha incrustado en ti- resoplo irritada. Solo estoy algo estresada.
-No tengo mal carácter-
-¿No? Como sigas así de enfadada con el mundo vas a parecer una vieja pocha arrugada- dejo caer el bolso en la entrada y paso dejándolo atrás.
Necesito tranquilizarme.
Relajarme.
Realmente no puedo seguir así de cabreada.
Cojo el delantal mientras camino hacia la sala y saco los platos para preparar la mesa.
Necesito respirar y tranquilizarme. No quiero, no necesito perder a un amigo por mis movidas. No se lo merece.
-¿Cómo ha ido tu día?-
-Mejor que el tuyo supongo- pongo dos copas en la mesa y Tommy pone en ella todo lo que llevaba en las manos -¿Qué tal con Bratt?-
-Creo que bien, con el bien-
-¿Crees que estas avanzando con la terapia?- caminamos hacia la cocina para coger la salsa de tomate.
-Espero que sí, solo son dos sesiones, supongo que necesito algunas mas- volvemos al salón y nos sentamos uno enfrente del otro para cenar.
-Bueno poco a poco irás mejor, entonces… ¿me vas a decir porque tienes esa carita?-
-Ya sabes Tommy, yo…realmente no se qué hacer con mi vida-
-No te tomes todo tan apecho, te va hacer mal, vas acabar como Juana la loca-
-Eres un idiota-
-Soy tu idiota preferido y créeme que se que tienes más de uno- pruebo la pasta y sinceramente necesitaba llenar mi estomago. No me había percatado del hambre que tenía hasta ahora. Saboreo como si nunca hubiera comido pasta.
Dios esta buenísima.
-¿Alguna novedad hoy?- pregunta mientras me mira como disfruto comiendo mis ricos espaguetis.
-¿Crees que debería llamar a Niall?- pregunto despreocupada. No quiero darle importancia. No más de la que se merece.
-¿Has hablado con el hoy?-
-No me ha llamado aun-
-Si hoy no llama, espera a mañana y llámalo tú- suelto el tenedor y ahora soy yo quien le mira comiendo.
-No, si hoy no me llama no voy a llamarle yo mañana- contesto tajantemente sin apartar la mirada de cada uno de sus movimientos.
-Vaya cascarrabias eres, creo que llamara, no sufras- sigue pinchando en la pasta como si tal cosa no fuera importante.
-Se está haciendo tarde, no creo que lo haga ya- suspiro. Continúo comiendo por dejar de caldearme la cabeza por culpa de Niall.
Lo odio.
-Ya, pero puede estar ocupado o muerto del miedo por si no respondes ¿No crees?- me mira atento.
-Le dije que llamara, sabe que voy a responder, a no ser que…- tuerzo la boca y recuerdo exactamente las palabras que salieron de mi boca – Yo… le dije que llamara solo si había sacado a esa chica de nuestras vidas-
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Notas de un loco(PAUSADA)
Novela JuvenilLa imaginación vale más que mil imágenes. ''Leer cada día cuando la conocí, cuando la hice mía... me hace sentir vivo, sentir que jamas la perdí. Nunca imaginé que escribir un cuaderno de Notas me serviría para poder sobrevivir'' Cuando las cosa...