¡Hola Princesa! (Namjin)

🌸Uno🌸

¿Por qué tuve que salir ese día? Justo ese día... Tengo que contar la historia ¿no? Bueno dale, empecemos.

Había una vez... Ahr te la creíste we. Ahora sí, sin bromas:

Era viernes, el peor viernes de mi vida sin dudas, íbamos a un Starbucks con mis gordis, Chim, Kookie y una amiga nuestra que es re grasa pero no se lo decimos, pobrecita. El día estaba lindo y habían varias personas en la calle por lo que... ¿quién en su inocencia pensaría que te podrían robar justo ahí en medio de la vereda frente a una tienda de ropa? Bueno, esas cosas me pasan a mí, esa suerte tengo.

-ChimChim dejá ese muffin, gordo come todo.- le dije a mi amigo porque estaba a punto de romper la dieta, se lo saqué de la mano y me lo comí yo, soy el mejor amigo que existe, ya lo sé. El ratucán se rió y ninguno le dió bola, después se ahogó pobrecito mi gordis.

-¡Dejame comer en paz!- gritó el otro chancho intentando sacarme un pedazo del muffin de la mano pero no lo logró, le sonreí con gracia, así bien divo y él me hizo una cara fea.

Estábamos lo más bien caminando y mirando tiendas pero entonces en ese mismo e inoportuno momento en el que Kookie sacó su celular vino un negro use nos paró en frente, creí que era mi final, posta, igual el negro estaba bueno.

-Éh wachines, denmen los celu dale.- dijo el forro mientras extendía su mano, Jimin casi se pone a llorar y Kookie se lo entregó sin más, no quería ser golpeado por ese villero, obvio. Encima el tonto se había comprado unas zapatillas hacía media hora. Que suerte la nuestra.

Todos mis amigos le entregaron los teléfonos y yo así con mi típica cara de "Andate bien a la mierda" saqué el mío, el negro me miraba raro y cuando estaba a punto de dárselo él negó.

-No, amor, dejá, no le robo a las chicas lindas.- dijo y guiñó un ojo... ¡Atrevido!

-¿What? No, agarralo, no me jodas.- repliqué, si yo era el único que salía bien de esto mis amigos me iban a tirar toda la bronca. -Esperá... ¿Chica linda?

El ladrón no me contestó, ni siquiera me agarró el celu y se fué a la mierda. Jimin y Kookie me miraban sorprendidos y la otra piba que no me acuerdo el nombre estaba enojada, al parecer el ladrón de había enamorado de mí y ni siquiera soy mujer. Reí un poco y levanté mis hombros como diciendo "Y bueno, ya fué" y nos fuimos, yo re tranqui.

...

-¿Es que no entendés, boludo?- gritó Jimin con los nervios de punta. -¡En ese teléfono tenía el PDF de lo que tengo que entregar el lunes a la empresa! No lo llego a entregar y me despiden, ya fué estoy muerto, me voy a juntar latitas.

Que dramático el chabón. Asentí sin darle mucha importancia y seguí jugando al jueguito que tenía en el celu que, por cierto, no me robaron porque soy hermoso. Estaba lo más bien tirado en el sillón con el teléfono en la mano y de pronto vibra, miré a la notificación que cubría mas o menos la mitad de la pantalla, era un WhatsApp desde el teléfono de... Kookie.

Kook🐀

Ola prinsesa!!

Chau, ¿que onda con esa ortografía? Y peor... ¿Qué onda con mandarme mensajes desde un teléfono robado?
Hice una mueca rara y llamé a Jimin, el gordis vino corriendo re esperanzado cuando le dije que el chabón me había mandado un mensaje.

-Dale, respondele- dijo Chim. -Si le caemos bien por ahí nos devuelve los celulares...

-¡Ni loco hablo con ese negro grasa! Osea olvidate.- Estaba a punto cerrar el chat, ya lo había visto, que lástima.

-¡Pará! Dale Jin, no seas forro, es de vida o muerte, ¿o querés que me despidan y me tenga que ir del departamento, comer de la basura y... Peor, comprarme ropa sin marca...?

Uh, lo último no se lo deseo a nadie.

Rodé mis ojos e hice una mueca de fastidio. Me las iba a pagar después igualmente.

Hey ✌

Lo peor que hice en mi vida qué responder ese mensaje. Adiós reputación.