Just My Girl

Animal

And if I didn't need you
Why do you run right throw my veins?
Savage and so dangerous
Your linger hand remain

Pov Jade

De nuevo amanecí con la sensación de resequedad en la boca y un malestar en el estómago, decidí no ir a clases, de igual forma mis padres no se darían cuenta si faltaba un día. Lo ocurrido en casa de la morena me había mantenido despierta gran parte de la noche, aunque tenía un ligero presentimiento de que Ryder estaba involucrado en ello. Le había dejado multitud de mensajes desde que salí de la casa de la latina, y desde entonces no había respondido a ninguno. Cerré mis ojos tratando de conciliar el sueño, pero era bastante difícil.

Estúpida Vega, estúpida hermana de Vega, ¡estúpida yo! Despertar en su cama en ropa interior seguro estaba en mi lista de imposibles, bueno ahora posibles, y no recordar como demonios llegamos a eso solo aumentaba mi mal humor. 
Mi camioneta no estaba en ningún lugar fuera de su casa, así que me vi obligada a volver en taxi, ya habría tiempo de enviar a alguien a buscarla, en cuestión minutos llegue a la mía, encontré a mis padres desayunando y me gane una buena reprimenda y castigo, al fin pude recluirme en mi habitación lo que restaba del fin de semana, hasta el día de hoy. Sabía que mi malestar solo era una excusa cobarde para no tener que verle la cara, pero no podía evitarlo, lo haría hasta tener respuestas, es decir, hasta ver al estúpido de mi novio. 

Termine saliendo de mi cama para darme un baño y bajar a desayunar, cuando regrese a mi cuarto tenía 3 mensajes, dos de Ryder pidiéndome disculpas como cada vez que desaparecía y otro avisando que llegaría a mi casa más tarde, y uno más de Vega preguntando si podíamos vernos, decidí ignorar ambos y esperar al pelinegro. 
Mientras tanto retomé un guion que escribía cuando aún salía con Beck y desde entonces no había vuelto a ojear, contrario a todos los rumores que corrían sobre nosotros, él había terminado conmigo, dijo que nuestra relación estaba rota y que ambos debíamos madurar, después entendí que solo quería salir con todas las chicas que en algún momento había estado interesadas en él. Entonces apareció Ryder con su aire despreocupado tan parecido al del canadiense, pero muy diferente a él en otros aspectos, lo cierto es que nuestra relación era bastante toxica y complicada, sabia reconocerlo y aun así no podía evitar volver a él una y otra vez.

Cerca de las cuatro de la tarde recibí un mensaje del pelinegro anunciando que estaba afuera, lo hice esperar veinte minutos y baje a abrirle, no pareció molestarle en absoluto la espera y me recibió con un beso.

-Lo siento tanto Jade estuve tan ocupado, tu sabes como es Thomas- rasco su cabeza y me dio una sonrisa ladeada

-No me interesa a menos que haya una porrista involucrada 

-Claro que no, nunca te engañaría- mentiroso, tampoco es que me importara en realidad

-A menos que quieras unas tijeras en tus partes, no deberías hacerlo- comencé a subir las escaleras con él siguiéndome.

- ¿Y bien?...

-¿Y bien qué?- pregunte ya que estábamos en mi cuarto, me senté nuevamente en mi escritorio para guardar el guion en el que trabajaba

-¿Probaste las pastillas? ¿funcionan? - preguntó emocionado, parado frente a mi con las manos en la cintura, deje lo que hacía y voltee a mirarlo.

Entonces lo recordé hablándome de una nueva droga y pasándome un par de pastillas en un pedazo de papel, recordé la cita con Tori y lo que había ocurrido después. No necesitaba verme para saber lo sonrojada que estaba. Era tanta información y recuerdos que por un segundo desee nunca haber sabido nada de esto.

-Eres un imbécil, funcionan pero no recordaba nada la mañana siguiente- rememore lo pasado con la morena y aun sentía el aroma a vainilla de su cabello, sabía que no era momento para pensar estas cosas así que lo guarde todo en lo más profundo de mi mente hasta que tuviera un momento a solas para procesarlo.