Pov Tori
La mañana siguiente desperté más tarde de lo usual, me resigné a perder mi turno en el baño y esperar a que Trina saliera, pero cuando llegué a él para apresurarla se encontraba vacío.
Me metí a la ducha suponiendo que mi hermana había sido madrugadora o aún no se despertaba, inclinándome más por la segunda opción al sentir el suelo completamente seco. Comprobé mis sospechas al salir y encontrar a Trina completamente pérdida entre sus sábanas.
-¡Trina!- lancé un cojín en su dirección- ¡Trina!- repetí más fuerte
Un gruñido salió de las sábanas y supe que estaba ligeramente despierta
-Se te hará muy tarde si no te levantas ahora mismo- jale sus pies como último intento para levantarla
-Déjame Tori- grito como niña pequeña y se zafó de mi agarre con una patada- no iré hoy
-Mis padres van a matarte
-Igual moriré- respondió hundiendo más su cabeza en la almohada
-¿Qué?
-Sólo diles que estoy enferma, ¿si? - me miró con ojos de cachorro, rodé los ojos y asentí
-Si mamá sube y te descubre, no será mi culpa- amenace antes de salir
No insistí más pues se me haría tarde a mí y me dirigí a mi habitación para cambiarme apresuradamente, recogí todas mis cosas y las metí en mi mochila antes de salir al pasillo, me asome de nueva cuenta a la habitación de mi hermana, sólo para verla en la misma posición que antes, cerré su puerta con cuidado y baje de dos en dos las escaleras.
-Cuidado- mi mamá me señalo un plato de tostadas que acababa de dejar en la mesa y se metió a la cocina otra vez
-¿Y Trina?- pregunto mi papá mientras masticaba una tostada
-No irá, así que será mejor que vaya saliendo- tome una tostada y esquive sus miradas
-¿Cómo les fue anoche? ¿A que hora llegaron?
-Les contaré en la cena lo prometo, no quiero llegar tarde
-Puedo llevarte- sugirió mi padre
-¿Con el auto de la policía? Creo que paso- abrí la puerta dispuesta a no perder un solo minuto- los veré en la cena- dije antes de cerrar.
Usualmente me gustaba caminar, me relajaba y por las mañanas el aire era lo suficientemente fresco como para no sudar. Aunque el camino se me hizo relativamente corto acompañada de la música de mi peraphone si me replantee la necesidad de aprender a conducir. Doble la esquina y me quite los audífonos, a pesar de todo había logrado llegar con casi quince minutos de antelación.
Entre por la parte del estacionamiento para evitar dar la vuelta e ingresar por la puerta principal, todo se veía solitario de no ser por dos figuras recargadas en una camioneta negra que parecían discutir, me acerque más sólo para descubrir que se trataba de Jade y Ryder.
Intenté seguir mi camino, pero un mal presentimiento me envolvió y terminé tomando refugio detrás de un auto, desde mi posición ellos no me notaban, podía verlos más no escucharlos, aunque eso no importó y me límite a esperar que se separaran.
La pelinegra se mantenía serena y Ryder empezaba a perder la paciencia, me di cuenta que no era la única observando, Beck permanecía en su auto con la puerta entreabierta y la mirada fija en la pareja, verlo ahí me tranquilizo de alguna manera. Regrese mi atención a la camioneta de Jade cuando escuche un fuerte golpee provenir de ahí, el puño del chico aún se encontraba en el cofre y supuse que lo había golpeado, esta vez era la gótica la que gritaba, dio un paso adelante tratando de intimidarlo, pero Ryder termino por perder los estribos y la empujo fuertemente provocando que su espalda chocara con la puerta de la camioneta.

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Just My Girl
RomanceJade despertó bajo una maraña de pelo castaño y un olor a vainilla envolviendola, el sentimiento era tan reconfortante que tardó algunos segundos en desesperezarse y darse cuenta de lo que ocurría y lo que seguramente había ocurrido.