Reunión

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"Si alguien te abandona cuando más lo necesitabas, ¿Lo perdonarías?"

Jamás me había sentido tan destrozado, tan mal, tan idiota. No puedo creer que he estado viviendo con una mentira tan grande
-Hijo... - dijo mi "madre" al entrar a mi cuarto
-Yo no soy tu hijo- expresé con dolor y un nudo en la garganta.
-Zack, escucha- la miré y grité
-¡Mi nombre es Harry! ¡Y no soy tu hijo!- retrocedió un paso
-¿Por qué..?- estaba a punto de soltar en llanto
-¿Por qué no me lo dijiste?- bajé la cabeza
-Por tu bien hijo- se sentó junto a mí, volteé a verla
-Fuiste dejado en nuestra puerta, tenías tan sólo unos meses de nacido, no podía dejarte ahí- mi mirada seguía fuerte
-Créeme que en verdad busqué a tus padres, pero nunca los encontré, es como si se hubieran desaparecido de la faz de la tierra- yo sólo me sentía triste, idiota, crédulo
-No fui capaz de decirte la verdad, porque no merecías tal sufrimiento, así que te crié, te cuidé, te amé, y lo hago y lo seguiré haciendo, porque para mí, tu eres mi hijo- secó mis lágrimas
-Eres mi hijo, no importa lo que pase- sabía que decía la verdad, que sus sentimientos eran fieles, pues claro, ¿Quién fingiría amar a alguien por más de 17 años?
-Pero... ¿Por qué me abandonó?- ella me tomó de la mano
-No lo sé hijo, pudo haber sido por muchas razones- no sabía ni que pensar
-Pero algo sí sé, y es que te amo, y eso no lo cambiará nadie- la abraze, tomé un gran respiro y pensé, ella no tenía la culpa, me crió como su hijo y me cuido toda mi vida, no podía molestarme con ella
-Y ella.. ¿Crees que esté muerta?- dije con la voz quebrada
-No sabría decirte hijo, pero no quiero que ésto te afecte- debía decir que sí, para que no se angustiara, pero necesitaba saber de ella
-Esta bien.. Mamá- ella sonrió y yo también, bajamos a la sala, y salimos, al escuchar sirenas
-El accidente de afuera- recordé.
Estaba un auto con el frente aplastado, como si hubiese chocado contra un muro
-¿Puede explicar lo que sucedió?- dijo un oficial al conductor
-Era un muchacho, que cruzaba la calle, cuando se me puso enfrente, antes de que pudiese frenar, el sólo levantó su mano, y algo hizo que chocara- todos lo miraban como si estuviera loco, pero, me sonaba familiar ese tipo de eventos, me hacía pensar en mis habilidades
-¿Puede identificar al sujeto?- preguntó el oficial
-Sí...- el me miró, y puso una vista de confusión mezclada con un poco de miedo
-Es... Él- me señaló, los oficiales se alertaron, algunos desenfundaron sus armas, escuché a uno gritar
-¡Alto, no te muevas hijo!- yo entré en pánico
-¡¿Qué les sucede?! ¡¿Qué creen que hacen?!- gritó mi madre
-Señora, apartese, su hijo tiene que venir con nosotros- dijo el oficial
-Tranquila mamá, estaré bien- la miré, y sin saber como, entré en su cabeza, escuchaba sus pensamientos
-Mamá, estaré bien- le dije en su mente, vi como una lágrima cayó por su mejilla, y su mirada se torno sorpresiva
-Esta bien hijo- escuché yo en la mía, asentí con la cabeza, y me subieron a la patrulla.
Al llegar a la estación, me dejaron en un cuarto, de seguro para interrogarme.
-Muy bien chico, ¿Nos dirás que pasó?- me miró como un niño idiota
-Señor, yo no tuve nada que ver con ese accidente- se sentó del otro lado de la mesa
-El accidentado confirmó tu identidad- sólo sobe mis sienes
-¿Y eso es suficiente prueba para usted?- lo miré a los ojos
-¿Pudo haberle afectado el choque?- Se levantó y apoyó las manos sobre la mesa
-Parece que te pones muy a la defensiva, ¿Te asusta algo niño?- dijo el oficial, con tono arrogante
-Pues, sí, me defiendo porque me acusan de algo que no cometí- le di la misma mirada
-O acaso ¿Debo dejarme arrestar por una mentira?- me recargué en la silla
-¿Así debo rendirme ante una acusación falsa en mi contra?- el policía se sentó de nuevo
-Digas lo que digas niño, te procesarán, y te enviarán a la correccional- sonrió de una forma vengativa
-¿Por qué tanto odio a mí señor?- dije confundido, puesto que, se le notaba un cierto odio hacia mí
-Porque tu eres cómplice de mi desgracia- me vio con odio
-¡¿De qué demonios habla?!- empezaba a asustarme, cuando entra un oficial a la habitación
-Oye Kevin, quitale las esposas, pagaron la fianza del chico- se levantó y me quito las esposas, pero me dijo al oído
-Haré que tu, y todos, paguen pronto- me levanté, y salí demasiado preocupado, no sabía que estaba pasando.
Al salir, mi madre estaba en el auto
-Hola mamá- ella se espantó
-¡Hijo! ¿Cómo saliste?- me confundí
-Uh.. Alguien pagó la fianza, pensé que habías sido tú- dije
-No hijo, no fui yo- nos asustamos un poco, pero al fin, fuimos a casa.
No podía dejar de pensar en lo que ése oficial me dijo, ¿Quién es? ¿Por qué me odia?
Al día siguiente, yo desperté cansado, pero, quise ir a correr al parque
-Mamá, saldré, vuelvo en un rato más- ella me abrazó y salí.
Al llegar a allá, conecté mis audífonos, puse música y di unas vueltas al parque. Después de una media hora, me senté en una banca, tomé un poco de agua, y descanse ahí un momento.
En eso, una señora se me acercó
-Hola- se sentó junto a mí
-Hola, buen día- dije con respeto
-¿Como has estado?- dijo con extrema confianza hacia mí
-¿Disculpe, la conozco?- dije algo alertado, pero, ha decir verdad, su rostro me era familiar
-Uh.. No, pero, yo pagué tu fianza en la comisaría- entonces me preocupé un poco
-Gracias, que gesto, en serio, no debió- me intenté ir de ahí
-¡Espera!- exclamó
-¿En serio no me recuerdas?- fue entonces que en recordé, era la mujer con la que había soñado demasiadas veces, pero, obviamente no podía decirle que soñé con ella, eso sería demasiado perturbador
-No señorita, lo siento- me di media vuelta, di unos pasos cuando dijo
-Harry... - me detuve de inmediato, mi corazón se aceleró y me puse helado. Voltee y la mire
-¿Cómo sabe mi verdadero nombre?- pregunté asustado
-Por que te conozco- su mirada era de nostalgia
-Mi nombre es Elena Hart... - le salió una lágrima
-... Y soy tu madre, Harry- casi me desmayo, pero tome conciencia, y respiré.
Fuimos a un café, necesitaba respuestas
-¿Cómo me encontraste?- pregunté
-Vi en las noticias que habían arrestado a un joven de 17 años por ser sospechoso de un accidente, de inmediato supe que eras tú, y vine- me parecía algo ilógico
-¿Dónde estuviste todo este tiempo? ¿Por qué tu y papá me abandonaron? ¿Por qué no viniste por mi antes?- ella agachó la cabeza
-Estaba destrozada, tu padre acaba de fallecer hace unos meses, unos días antes de tu cumpleaños 17 me parece- dijo con ojos llorosos
- Y no sabia como reaccionarían, no tenía fuerzas para verlos, me culpaba de todo- se notaba su sufrimiento interno
-Y no sabía como lo tomarían los dos- me confundí
-¿Los dos?- cuestione
-Tú y...- en eso, una explosión en la entrada del establecimiento nos interrumpió, todos en el lugar nos asustamos, muchos corrieron, pero al movernos nosotros, alguien entra por la entrada, y escuchamos que dice
-¡Vaya, vaya, vaya! Pero que bonito, ¿No lo creen? La familia hermosa tiene su primera reunión familiar, que intenso- su voz me preocupo, voltee, y era él, el tipo del callejón, idéntico a mí
-Hola, madre- dijo él, yo miré a Elena
-¿De que habla?- su mirada era de aterrada
-El es Christopher, Harry... - me miró
-... Es tu gemelo- entré en shock, miré a Christopher, mientras caminaba a nosotros
-¿De verdad creyeron que no los haría pagar por haberme dejado?- dijo
-Yo no sé de que hablas- contesté
-Mmm... Tal vez no, pero ella sí, ¿No es así?- el pasaba el fuego como si nada, nosotros estábamos bloqueados
-Ella, nos abandonó a los dos, liberándose de una carga, dejándonos a la deriva- su voz era de odio puro
-¡Detente!- grité
-No me digas, que estás de su lado.. ¡¿Después de que nos dejara?!- exclamó furioso
-No, tal vez no esté de su lado en si, pero si del lado del bien, y no dejaré que le hagas daño- el sonrió
-Bien, pagarás también como ella, yo quise encerrarte en la cárcel, de una manera un poco, misericordiosa- en eso creo que entendí
-Tu eras el oficial... - dije
-Yo controle a ese oficial, yo detuve ese auto, yo he hecho todo desastre- su voz psicópata me empezaba a asustar
-No dejaré que la lastimes- dije, y el suspiró
-Esta bien, sufran los dos- metió la mano a su suéter, sacó un arma, pero en reflejo, moví las cosas del lugar, y con una mesa lo golpeé, no sabía como, pero lo hice
-Mira nada más, no somos tan diferentes después de todo- el río y mientras caminaba hacia atrás dijo
-Volveré por ustedes- el fuego se intensificó, y él, había desaparecido.
Llegaron los bomberos, y los policías, nos hicieron preguntas, nosotros estábamos bien, pero ahora, había un problema, tenía a alguien tras de mí.

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