Y si...?

CAP.5 -No es verdad-

—Al otro día—

Siempre serás la persona más importante en mi vida...aunque conozca a miles de personas, tu siempre serás mi "'untos hasta fin' Atte. TT"

Ese fue el único mensaje que recibí de él la mañana de el domingo, bueno, no es que me hiciera muchas ilusiones de todos modos, por que, bueno, fuimos algo de una sola noche ¿verdad?

A quien quiero engañar...no mentiré, tenía la esperanza de que me mandará otro mensaje durante el día. Mi madre me estuvo regañando. ¿Porqué?

Bueno, así fue más o menos el día siguiente de la fiesta.

Con movimientos lentos y cuidadosos traté de abrir la c¡puerta de la casa, eran las 08:00 a.m. del domingo, y si, yo Bill Kaulitz apenas iba llegando a mi casa, y cuando por fin abrí la puerta y entré con los zapatos en mano, la chamarra echada a hombro, y cuando me volteé...

—AAAAAHHHHHHHH!!!—si, ahí estaba.

—AAAAAHHHHHH!!!! Nada Bill...—con las manos en jarras, me veía como entre divertida y medio enojada, por que enserio, esa mujer creía que no tenía conocimiento de lo que era la diversión, así que creo que bueno, estaba enojada por que llegara a esa hora de la mañana, pero estaba como feliz por que me divertí tanto que llegue a esa hora...o mi ingenua y joven mente quería entender—tienes la más remota idea de qué hora es...¿no?—ahora tenía los brazos cruzados, un pie tamborileando el suelo, la ceja alzada...ratas, si estaba enojada, y la última vez que la vi así fue cuando Andrew rompió uno de sus tapices tipo zarpa que trajo de sus viajes a Coahuila...no salimos como por un mes a jugar con nuestros amigos.

—Este...—si, claro, perfecto Bill, duda, duda como si tu vida dependiera de ello, error.

—No, el niño no sabe la hora...—me miró con una sonrisa tan cínica, que enserio¡ me dio miedo—las 8 de la magna Bill—okay, eso si no me lo esperaba, para nada...tan tarde era?—LAS MALDITAS OCHO DE LA MAÑANA BILL—explotó, creo que oí un crack en su cabeza o no que se yo...pero no fue bonito—estas castigado...si, castigado, por dos semanas, sin carro, sin nada de amigos, videojuegos o algo, estas castigado jovencito.—sentencia final.

—Si má...—agaché la mirada, retorcí un poco los pies, y entonces cine directo a mi habitación, cuando pasé a su lado sólo escuche...

—Espero y haya valido la pena Billybebe...—la mire de reojo con los ojos abiertos a más no poder. Tenia una burlona sonrisa en el rostro.

—E-este...yo...MAMÁ!!—salí corriendo a las escaleras para mi cuarto y nada más alcancé a escuchar la risa de mi madre, por instinto yo también me reí, estaba feliz de que se preocupará por mi, pero estaba igual o más feliz de que se alegrara por mi.

Al cerrar la puerta de mi cuarto, me recargue en ella, llevando una mano mis labios, recordando todo lo que pasó hace menos de 10 horas, recapitulando las sería algo así:

1.- Salí de fiesta, mi primera fiesta donde tomaba alcohol sin importarme nada.

2.- Salí sin la compañía de Ria, cómo solía hacerlo

3.- Baile con un hombre, y no cualquier hombre, con Tom Trümper

4.- Me fui de la fiesta CON Tom

5.- Tuve sexo CON Tom

6.- Amanecí con Tom

7.- Tengo un ligero con CON Tom

8.- Estoy jodido, literalmente.

Dejé mi chamarra sobre el respaldo de la silla del escritorio, mis tenis en la zapatera del closet, me quité todo lo que traía puesto, me amarre el cabello en una coleta alta, me quité el maquillaje, me metí a la cama sólo con los bóxers...de Tom cabe señalar, por que los míos ve tu a saber donde quedaron, y realmente me importaba poco o nada.