Miedos e Inicios

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— Jean se sabe algo de mi hermana

— no amor nada

— y Álex donde esta

— no lo se desde la mañana no lo veo, se a convertido en la sombra del inspector

— Jean tengo miedo y si ese loco lastima a mi hermana y a su bebé

— esperemos que no, he puesto a todos mis investigadores a trabajar para buscarla pero no hay nada

— pero cariño ya van dos días y nada

— lo se amor lo se

***

— Erick déjame ir si, no diré nada por favor déjame ir

— para que quieres irte, para irte a revolcar con ese Alexander, no me hagas esa cara se que el es tu pareja, sabes fue fácil saber dónde estabas, tus padres no fueron muy cuidadosos al hablar contigo

— Erick...

— Erick nada preciosa, haste la idea que no veras a nadie nunca más, te quedarás conmigo así como siempre debió ser

***

— inspector tres días tres días y no hay noticias

— Alexander se lo que sientes pero no podemos hacer nada debemos esperar

— esperar, esperar a que mi mujer aparezca muerta y mi hijo y mi hijo que (solloza)

— lo siento Álex.

***

Una semana había pasado y no habían noticias hasta que uno de los investigadores de JeanMarco dio noticias.

— señor Sloveti la encontramos, en estos momentos van camino a un aeropuerto privado, debemos detenerlos o los perderemos para siempre.

— Álex encontraron a Alana, vamos ya el inspector está enterado.

Llegaron al aeropuerto, el inspector llevo apoyo, habían rodeado el aeropuerto, habían preparo la emboscada, hasta en el avión habían policías encubierto, Jean y Álex estaban ocultos y entonses los vieron Erick llevaba abrazada a Alana por la cintura, Álex sintió que le hervía la sangre se puso de pie dispuesto a ir a rescatar a su mujer pero Jean lo detuvo.

Iban caminando cuando Alana en un descuido de Erick se soltó, lo golpeó y se hecho a correr, todo paso muy rápido, Erick saco un arma, Álex iba corriendo hacia Alana, Alana iba corriendo alejándose de Erick y un disparo se escucho, Alana cayó Erick también y Álex se paró en seco cuando vio caer a Alana, se tomó el cabello y se dijo así mismo- no por favor- corrió hasta Alana y la tomo entre sus brazos, la reviso y no tenía ninguna herida visible, solo se había desmayado de la impresión. Álex hundió su rostro en el cuello de Alana y lloro, lloro como un bebé.

***

— no, no ,no déjame ir....

-— Shhh Cariño Tranquila estás a salvo

—(llora) Alexander...

Alexander abrazo a Alana y acariciaba su espalda y le susurraba al oído,— todo está bien amor todo está bien.

— mi bebé cómo está mi bebé

— el está bien, está a salvo

— creí que no volvería a verte creí que perdería a mi bebé, Erick me golpeo muchas veces pero siempre protegi a nuestro bebé.

Alexander sentí una gran furia, escuchar el dolor de Alana y lo que vivió

— eres muy valiente preciosa, yo creí que te perdería yo creí que...(llora)

— todo está bien verdad ya todo acabo

— si hermosa ya todo acabo, Erick está muerto.

***Dos semanas después***

— hija estás despierta

— ¿Dorana? Si pasa

— como te sientes

— mucho mejor gracias por venir a verme

— eres de nuestra familia,mira te traje esto

— ¿que es?

— ábrelo

— es un mameluco, está tan lindo...Gracias está hermoso

— fue de Álex yo lo guarde como recuerdo

— Gracias Dorana

— y cuéntame cómo va mi vis nieto

— pues muy bien se porta bien conmigo pero con su padre no mucho

— escuche que Alexander comenzó a sentir los antojos, las náuseas y los mareos

— pues si pobre si lo vieras está pálido, es un llorón

—( risa), sabes mi esposo sufrió los síntomas de nuestro hijo la paso muy mal tres meses

— mi pobre Álex.

***
— cariño ¿te sientes bien?

— no Alana no me siento bien, creo que vomitare de nuevo

— debes ir a clases es la última semana

— no es necesario ya pase todas las materias incluso matemáticas, aunque me costó esa profesora es una malvada

— te amo mucho mucho

— yo también pero ahora debo vomitar (corre)

***Cuatro meses después***

La familia estaba reunida en una fiesta en la casa de campo de los Spencer, Alexander estaba feliz porque los síntomas del embarazo habían desaparecido, solo que ahora los sufría Alana quien estaba demacrada por los mareos los vómitos y los antojos, el medico les había explicado que eso pasaría rápido, Alex se desvivía por hacer sentir bien a su prometida, Alana tenia el vientre un poco abultado y Alex no podía dejar de acariciarlo, saber que su hijo crecía ahí dentro lo llenaba de dicha y orgullo. 

La escuela había terminado, Alex iría a la universidad, tema que era delicado ya que eso significaba separar de Alana y de su hijo, claro no por mucho tiempo ya que ellos se mudarían para estar cerca, pero debía esperar a tener al bebe, esa fiesta era precisamente la despedida de Alexander por eso Alana estaba triste sus ojos llorosos, Alex trataba de consolarla y decirle que pronto estarían juntos para siempre pero ella tenia miedo, miedo de que Alex conociera a alguien mas en la universidad y se olvidara de ella, todos conocían ese miedo así que habían preparado una sorpresa.

Alex se arrodillo frente a Alana y tomo su rostro con extrema ternura

— Cariño te sientes bien

—  Si amor yo lo siento... (solloza)

— tranquila ya veras estos meses pasaran rápido y estaremos juntos, bebe a mi también me duele separarme de ustedes

— no estarás en el nacimiento de nuestro hijo, amor si estaré,  nada ni nadie impediría que viera a mi hijo nacer

— lo prometes

— lo prometo, ahora ven que te tengo una sorpresa

—  a donde vamos

— ya veras

— Dios, Alex...esto es..es

—  si mi amor es nuestra boda

— pero como...

— crees que me iría dejando a mi mujer libre claro que no, quiero que todos sepan que eres mi esposa, mía solo mía

—  te amo Alexander

—  yo te amo mucho mas hermosa  

Y así ese día Alana y Alexander unieron sus vidas para siempre...

La Matemática del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora