Capítulo 5.

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•Brissa•

-Serás...- dije, levantando la mano para golpear a Arthur, pero ví caer a Obed en medio del baño. Corro en su dirección, apartando al celoso Arthur, y me tiro al piso para revisarlo. Estaba inconsciente y en la superficie de su nivea piel de la sien ya se vé una especie de moratón extraño.

Lo levanto, y si yo sola.
Y subo las escaleras arriba hacía mi habitación, lo dejo en mi cama y me dirijo a mi baño para tomar de allí una bolsa de gel helado para poner sobre el, ya notorio, golpe.
Dejo la bolsita ubicada entre la frente y la oreja derecha del chico; y bajo las escaleras, dispuesta a soltar todas las maldiciones que ya se merecía mi novio.

Debería comenzar a pensar en acabar con él, la verdad.

‹si pudiera, probablemente, lo estrangularía- se escucha un suspiro por parte de mi hermana, al otro lado de la llamada telepática- y, por cierto, el chico de arriba parece estar bien, mas no siento sus vibraciones, y no sé si es porque es un Nunca o porque algo me falla›

Aibory se queda callada, ahora que lo recuerdo ella no había estado cuando nos dimos cuenta que Obed era un Nunca, pero antes de poder decirle algo salió de mi mente... Entonces, ahora es mi turno de pensar, sinceramente​ me estoy tomando muchas molestias por el chico, pero hay algo en él que simplemente me hace querer protegerlo.

Seguramente es por ¿el «instinto de reina»? Si, si, es eso.

Autoconverceme es complicado, más cuando sabes que tú no te puedes engañar. Bufé.

Llegué a la primera planta de mi casa, busco con la mirada a cualquier personaje, y más bien en especial a uno solo, para echarlo y...

-Arthur se fué. Dijo que te llamaría luego.- la voz de Vallora, seguido de una llave del grifo abriéndose en la cocina, me dejó confusa.- No lo entiendo, no le encuentro sentido a sus golpes, él no es así.

-No, no lo es.- dije, y era cierto, Arthur no es así...

-Oye, ¿Arthur no cumplió hace un poco?

-Si, hace una semana... - ese día la familia de Holden había preparado una fiesta sorpresa a la que asistí pero prefiero no entrar en detalles- Por cierto, ¿Piensas quedarte a dormir?..

-Em, -la chica me miró con cierto nerviosismo- no, no, sabes que mis padres me lo prohíben si no les he avisado con anticipación, y si no están tus padres sería peor...

-Comprendo...

-¿Cómo está él?- me corta, y me giro levemente como si tuviera la esperanza de que el chico, que ahora está en mi cama, no le hubiera ocurrido nada.

-Está bien, sólo le dió en la sien. Aunque bueno, no soy médico, pero diría que se desmayó muy rápido.

-¿Ah, sí?

-Pues, son suposiciones mías, nada más.

Vallora iba a hablar, pero la canción Hello de Adele sonó interrumpiendo sus palabras, era una llamada, la cuál cogió rápido Val.

-¿Si?¿Hola?- silencio.- Si, estoy con ella, papá.- un silencio algo más largo-¿Qué hizo qué?- la cara de mi amiga me hizo gracia y traté de no reír-Voy para allá, y dile a Dani que me las va a pagar- en resumidas cuentas, podría apostar a que Dani, su hermano menor, tomó algo sin su consentimiento y lo rompió o algo así.

-¡Daniel rompió mi consola, y estaba nueva! ¡Y la compré yo, sóla, con los ahorros de mi vida!- ¡Ja! Acerté.

-No te preocupes, podrás repararla, o en su defecto, decirle a alguien para que lo haga.

Never Become (ES)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora